Nadia Calviño, vicepresidenta primera y máxima responsable económica del Gobierno, ha mandado un mensaje a la patronal tras su descuelgue en la negociación por la reforma de pensiones: “Espero que, de aquí a final de año, sí se sumen al resto de negociaciones”. Unas declaraciones a Antonio García Ferreras en Al Rojo Vivo (LaSexta) que coinciden en el tiempo con la reunión que mantienen Gobierno y agentes sociales para avanzar en la reforma laboral.

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“Tenemos que estar mirando al futuro, no podemos seguir en el pasado”, reclama la ministra en aras de “corregir desequilibrios” como el paro juvenil o los problemas estructurales del mercado de trabajo. “Hay que abordar una reforma laboral que acompañe con empleo de calidad a la transformación verde y digital” -pide Calviño- “Eso es lo que quiere Bruselas y el conjunto de la sociedad española”.

“A todos nos hubiera gustado que hubiera un acuerdo con los sindicatos y los empresarios”, asegura tras el fracaso de las negociaciones con CEOE y Cepyme en materia de pensiones. No obstante, recalca que la subida de las cotizaciones a la Seguridad Social hasta el 0,6% es “una medida responsable y justa”.

Así, ha celebrado el acuerdo entre Gobierno y sindicatos: “Es, no solo justo desde un sistema intergeneracional, sino que también tiene que ser sostenible a medio y largo plazo”. La máxima responsable económica del Ejecutivo cifra en aproximadamente 2.000 millones de euros la dotación que queda en la hucha de las pensiones y llama a “rellenar el hueco” para “seguir teniendo unas pensiones dignas”.

Matiz sobre el aumento de los años de cotización: "No hay una decisión tomada" 

Preguntada por el aumento de los años de cotización, ratificado en el documento enviado a Bruselas, aclara que “no hay una decisión tomada”. “Hemos enviado lo que se va a plantear” -explica Calviño- “pensando en el bienestar de los ciudadanos y sobre todo de los más jóvenes”. A pesar de esto, la responsable económica emplaza al diálogo social para lograr un consenso en el sistema de pensiones. “El mundo ha cambiado, las carreras ya no son lineales” -aclara- “No queda claro que los últimos años sean los mejores de la carrera”.

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En el caso de la reforma laboral, asegura que tiene que estar cerrada a final de año. “No porque nos la pida nadie sino porque, estando en una situación de expansión económica, tenemos que tener cuanto antes un marco de seguridad jurídica que lo permita”, asegura. En esta línea, recalca que no hay discrepancias sobre la reducción de la temporalidad: “Este compromiso y prioridad es del Gobierno, de los sindicatos y también los empresarios son conscientes de que hay que mejorar el mercado laboral”.

Una de las principales claves de la reforma laboral es la reducción de la temporalidad, por lo que Gobierno y sindicatos abogan por imponer un porcentaje máximo de esta en las empresas. Sin embargo, reconoce tener “dudas de que eso sea una buena solución” ya que “hay empresas que están muy por debajo de ese porcentaje”. “Es un cambio muy importante pero merece la pena el esfuerzo para avanzar en ciclo de crecimiento”, valora la ministra.

De cara a las previsiones macroeconómicas matiza que “estamos en un momento muy complicado”. “Lo que hemos hecho desde el primer momento es lo correcto: actuar con prudencia”, asegura la ministra de Asuntos Económicos en base a sus perspectivas de crecimiento. “Lo más importante es el mensaje que dan todos los organismos, un crecimiento muy intenso entre 2022 y 2023”.

“Nuestro objetivo no tiene que ser un rebote pasajero, sino un crecimiento fuerte y sostenido”, con unas previsiones de crecimiento del 5,5% del PIB para este año. El objetivo, según Calviño, es “poner a nuestro país en una senda de crecimiento y prosperidad de, no antes de la pandemia, sino antes de la crisis financiera […] Hemos tenido una década prácticamente perdida y ahora hay que recuperarse”.

La inflación se mantendrá hasta la primavera de 2022

La ministra también se ha pronunciado sobre los altos niveles de inflación, asegurando que “no es positivo”. Sin embargo, matiza que ha empezado el año con una inflación del 0%, “demasiado baja sin dinamismo y sin futuro”. Ante esto, asegura que “de momento no debe sorprendernos que haya un rebote de la inflación”. La vicepresidenta mantiene sus expectativas, y la de los expertos, de que los niveles de inflación se mantengan al alza hasta, al menos, la primavera de 2022.

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Una inflación que Calviño ha explicado por el encarecimiento de la electricidad y los productos energéticos, los problemas geopolíticos y un efecto base que supone comparar estos datos con la pandemia. “Hay que asegurarse que no tiene un carácter estructural. Es un fenómeno transitorio”, recalca. En el caso de la luz, avanza que el problema “seguirá produciéndose hasta que no tengamos la situación final, que es tener una energía más limpia, mucho más barata y con menor dependencia”.

En línea con esto, ha lanzado un mensaje de calma a la población negando cualquier posibilidad de que se produzca un apagón energético: “No hay ningún riesgo de ningún apagón. Cualquier persona que comprenda cómo funciona el mercado sabe que no hay riesgo de ningún apagón”.

Coincidiendo con la ampliación del ERTE de Renault hasta finales de junio, la ministra lamenta la falta de semiconductores y asegura: “Hemos descubierto estos últimos meses muchos elementos de los que somos conscientes”. En relación con esto, aclara que “es un efecto real en una industria estratégica”, para matizar después: “No tenemos ninguna perspectiva de problemas de abastecimiento de productos en general”.