Pepe Álvarez, secretario general de UGT, ha culpado a la “presión política” del descuelgue de la patronal en las negociaciones para avanzar en la reforma de pensiones en una entrevista en Al Rojo Vivo en LaSexta. Gobierno y sindicatos han alcanzado un acuerdo para el diseño del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) y la subida de las cotizaciones a la Seguridad Social del 0,6%, sin el apoyo de CEOE y Cepyme, que reiteraron su rechazo a las medidas del Gobierno.
Así, el líder de UGT asegura que no ha habido ninguna contrapropuesta de los empresarios en la negociación. “No quieren cargar con el coste que supone para las empresas”, ha explicado Álvarez, que menciona también la “situación de presión política sobre la patronal” como parte del plantón. “A nadie se le escapa”, asegura.
En línea con esta “presión política”, ha respondido a las críticas del alcalde de Madrid y portavoz nacional del Partido Popular, José Luis Martínez Almeida, calificándolas de “pura demagogia”: “Se podría haber aplicado al cuento el señor Rajoy y no haber recortado las pensiones en 2012”.
“Es una manera como otra de sacar argumentos de donde no la tiene, es una posición muy insolidaria con los españoles”, critica el líder de UGT ante el descuelgue de la patronal. En esta línea, recalca que “la medida da sostenibilidad al sistema y ayuda a que los pensionistas y trabajadores actuales vean su futuro asegurado”.
“Creo que el acuerdo es más fácil para la reforma laboral"
A pesar del desencuentro con empresarios, Álvarez no considera que esto perjudique los próximos acuerdos con la patronal, en este caso con la reforma laboral. “Creo que el acuerdo es más fácil para la reforma laboral ya que está más condicionada que en el resto de materias”, asegura. De cara a la reforma laboral, UGT aboga por mantener el papel de los ERTE con un modelo similar al alemán, asegurar la contratación y la negociación colectiva.
“Los costes en España están muy por debajo del entorno europeo en el que estamos compitiendo” -asegura en línea con las declaraciones del ministro Escrivá esta mañana- “España tiene un margen importante para poder continuar subiendo los costes unitarios de trabajo, no va a afectar a la competitividad y al empleo”. Así, prevé que los efectos se observen ya en los primeros meses de 2023.
“Estamos ante un acuerdo histórico” -celebra Álvarez- “Hemos visto que hay otra fórmula que se puede utilizar, que no rebaja la pensión y permite asegurar el futuro para las actuales y futuras generaciones de pensionistas”. “Esto rompe con la tendencia de recortes que habíamos visto hasta ahora”, asegura.
Con respecto a la respuesta de la Comisión Europea, el líder sindical no prevé que Bruselas reaccione de forma negativa a la falta de la patronal en el acuerdo: “Verá perfectamente que queda plenamente compensado. Es un paso más para tener a principios de año los 10.000 millones de euros de los planes de reconstrucción. Tampoco dejaría de dar soporte a la necesidad que tiene España de recibir los fondos europeos”.
