Carmen Mola ha puesto fin a la saga Inspectora Elena Blanco con 'El Clan' (Planeta), una novela en la que no solo 'matan' a su personaje más emblemático, sino que le obligan a enfrentarse al psicópata más terrible de todos cuantos han creado, el propio sistema, una inmensa serpiente corrupta que contamina todo. Este nuevo thriller tiene todos los ingredientes con los que los tres 'Mola', Jorge Díaz (Alicante 1962), Agustín Martínez (Lorca, 1975), y Antonio Mercero (Madrid, 1969), nos mantienen en tensión hasta la última página: sangre, acción, giros inesperados, algo de amor y mucha crueldad.

La parte gamberra y la seria, las dos caras de Carmen Mola

Antonio Mercero, Jorge Díaz y Agustín Martínez, los tres guionistas detrás del seudónimo de Carmen Mola (Foto: Javier Ocaña)

"Creemos que la novela negra -ya sé que ahora algunos dirán que esto es una novela policíaca o no sé qué, pero para mí es novela negra-, ya sea histórica o actual, tiene crítica social. Nosotros separamos muy bien nuestra parte gamberra, que evidentemente tenemos en la promoción y en las entrevistas, de la seriedad a la hora de escribir", nos explica Jorge Díaz en una entrevista conjunta en la que los tres van contestando perfectamente sincronizados, como si fueran solo uno, esa Carmen Mola, irónica, guasona, divertida y, a veces, seria, que, cuando se pone a escribir aborda temas muy actuales. A lo largo de estas cinco entregas, nada se les ha escapado: narcotráfico, trata de personas, tráfico de órganos, vientres de alquiler, corrupción policial, política y judicial, la maldad humana en todas sus dimensiones. 

Lo más inquietante de las novelas de Carmen Mola es que cuesta a veces distanciarse de las historias que cuenta porque tienen mucho que ver con los titulares que aparecen cada día en los periódicos. Ellos aseguran que 'El Clan' es su novela más real, ya que han recreado la violencia de los enfrentamientos en la guerra de Liberia y la utilización de los niños soldado, pero lo cierto es que todas se nutren de la realidad.

Su principal objetivo es hacer novelas entretenidas. "Nuestras novelas tienen varias lecturas, que obliguen a pensar. No que obliguen, que el que quiera, que piense y el que no, que solo se entretenga. Pero es importante que den esa posibilidad, porque si no, ¿para qué escribimos?", reflexiona Jorge.

¿Es de verdad el fin de Elena Blanco?

Lo han dicho por activa y por pasiva: una trilogía de cinco libros es más que suficiente. No va a haber precuelas ni secuelas, no van a crear una nueva BAC con otro nombre ni van a resucitar a Elena. - "Sí, hasta que tengamos necesidad de dinero y no escribamos lo que haga falta", matiza irónico Agustín-.  A los tres les da cierta nostalgia no volver a escribir en la piel de su inspectora más querida, pero tras el "duelo, habrá otros personajes" y habrá más Carmen Mola. 

"No vamos a escribir novela romántica mi novela infantil ni novela juvenil ni nada por el estilo, acabará siendo una novela cercana al thriller, actual o histórico. No queremos hacer otra BAC a la que llamemos ZEC, ni crear otra Elena Blanco, o lo que todos preguntáis si la nueva Elena Blanco va a ser otra detective que aparece en 'El Clan'. No es nuestra intención, nuestra intención es crear otro personaje que por el que sintamos lo mismo que por Elena Blanco", advierte Jorge Díaz.

¿Qué hay de cada uno de ellos en Elena Blanco?

"Cuando uno escribe va volcando cosas de sí, de lo que ve, de su experiencia, pero no necesariamente de una manera muy consciente. No te podría decir que yo estaba empeñado en que cantara en un karaoke porque a mí me gusta cantar, que es cierto, me gusta cantar, pero también es cierto que no me empeñé. Eso surgió. Me interesa del personaje su fragilidad, en contraste con su trabajo, que es muy echada 'p'alante'. Me gusta eso literariamente, pero no es que en la vida me guste sentirme desamparado ni solo", responde Antonio Mercero.

No hemos matado a nadie con gusanos, no hemos metido a nadie en una trituradora, pero sí hay una manera de ver el mundo, una manera de crear personajes con los que sentimos empatía

Por su parte, Agustín subraya que, no por el hecho de ser tres, están menos vinculados a la novela como autores. Él se siente tan autor de éstas como de las que ha publicado en solitario. "No hemos matado a nadie con gusanos, no hemos metido a nadie en una trituradora, pero sí hay una manera de ver el mundo, una manera de crear personajes con los que sentimos empatía. Un escritor se tiene que enamorar un poco de sus personajes y eso es lo que pones de ti".

¿Fué expulsado Jorge Díaz de un teatro por feo?

"Estamos hablando de despedirnos de Elena Blanco, pero en realidad nos despedimos de la BAC. A lo mejor hay cosas mías que están en Buendía, o en Chesca, o en  Orduño. Siempre hablamos de la grappa de Elena, que va al karaoke, pero también Buendía quiere jubilarse y marcharse a Benidorm con sus nietos o o Mariajo sigue teniendo ese espíritu juguetón con los años, que la lleva a colar noticias falsas en el periódico. Lo que disfrutaba al ver titulares como  'expulsan a un espectador de un teatro por feo' en un periódico nacional.  A mí esas son las cosas que me gustan: llevar la realidad al juego. Entonces hay cosas nuestras, no solo en Elena Blanco, sino en todos los personajes", matiza Jorge Díaz.

Acostumbrados a giros de guion, en cuanto se ponen un poco serios, alguno interrumpe con una broma. En este caso, Antonio que le pregunta asombrado: "¿Pero te expulsaron por feo de un teatro?", despertando risas sinceras de sus compañeros.

El Madrid de Carmen Mola

Madrid es el principal escenario de toda la saga, también en esta última entrega, que recorre también Almería, Monrovia y Oporto. El Madrid de Carmen Mola es un Madrid de barrios y bares de los de toda la vida, donde saben tirar una caña y poner una tapita, lejos de los locales de moda. Aunque de los tres sólo Antonio ha nacido en Madrid, se declaran madrileños de adopción. "Somos madrileños porque lo hemos escogido, no por la mera casualidad de haber nacido aquí. A los tres nos gusta mucho Madrid, nos gusta pasear por Madrid, encontrar sitios que pueden salir en las novelas, encontrar un bar en el que disfrutaría Zárate, o buscar un sitio, por ejemplo, donde aparezca un cadáver. Es muy fácil poner un cadáver en el retiro, pero no tan fácil en la Quinta de Vistalegre o en el depósito de la grúa. Nosotros vivimos el Madrid de fuera de las postales y es el que hemos retratado a lo largo de las novelas", señala Jorge sobre cuál es el Madrid de Carmen Mola.

El balcón de Elena Blanco no era el que ellos pensaban

Antonio Mercero, Jorge Díaz y Agustín Martínez (Carmen Mola), posan en un balcón de la Plaza Mayor de Madrid, el lugar donde ubican la casa de la inspectora Elena Blanco (Foto: Javier Ocaña)

Un escenario imprescindible y mítico de la saga es la Plaza Mayor, donde vive Elena Blanco. Pese a las múltiples veces que fueron allí para recrear con exactitud el balcón desde el que observaba la plaza en la que secuestraron a su hijo en la víspera de Navidad, se equivocaron. "Nos sentábamos en medio de la plaza y decíamos, el balcón de Elena es uno de aquellos. Y entonces un amigo mío me vino con el libro y me dijo 'No, estás equivocado, no es uno de esos'. Me demostró que lo que yo había escrito era distinto de lo que yo pensaba y que el balcón era otro", confiesa Jorge.

Carmen Mola sitúa la sede de la BAC en la calle Barquillo y vuelve a aparecer en sus páginas el Cheer's, el karaoke de Huertas al que acude la protagonista a beber grappa italiana y a cantar, sobre todo cuando está triste. Allí dedicará una canción a cada uno de sus compañeros, que suena a despedida, por cierto. También el Refra, el bar de donde desayuna cada día.

¿Les ha cambiado salir del armario?

Los tres coinciden en que siguen escribiendo con la misma libertad con la que lo hacían antes de salir del armario, desde que hicieran pública su identidad después de ganar el premio Planeta en 2021 con el thriller histórico 'La Bestia'. "Nunca nos hemos puesto límites y no nos cortamos con nada. Es lo que hizo que las primeras novelas fueran diferentes a la propuesta general que había en las librerías y teníamos que conservarlo", apunta Agustín.

Lo que sí ha cambiado, añade, es que ahora se sienta con su editor a hablar de la novela (antes lo hacían a través de su agente), y que tienen feedback a raíz de su contacto con periodistas y lectores. "No porque hagamos caso, porque no hacemos caso a lo que nos dicen, pero si tienes un punto de vista nuevo sobre sobre tu trabajo y te ayuda a la hora de construir algo nuevo", remata medio en broma medio en serio.

¿Cuál es el argumento de 'El Clan'?

Es complicado hablar de esta novela sin meter la pata, ya que los sorprendentes giros marca Carmen Mola lo cambian todo con un simple pasar de página. En esta última entrega, Elena Blanco inicia una carrera contrarreloj para salvar a su compañero Ángel Zárate, tras recibir unas imágenes en las que se le ve gravemente herido. Desesperada, comete un error fatal y acaba siendo acusada de asesinato de un policía. Es el principio del fin de la BAC, a cuyo frente se pone Miriam Vaquero, una inspectora con pinta de catequista con cinco hijos y un marido perfecto. El resto de los miembros de la diezmada brigada (Mariajo, Reyes, Orduño y Buendía), intentarán salvar a su compañera. La trama se complicará con la aparición de unos cadáveres a los que le han quitado los órganos. No se sabe quiénes son, pero sí su procedencia: una tribu procecente de Monrovia.

La novela aborda temas como la corrupción institucional, la brutalidad de las mafias, y el mercado negro de órganos y tráfico de armas en África'El Clan', aseguran los tres, pone el foco en las mafias que ganan dinero a costa de la desesperación de la gente. "Ahí una rueda terrorífica que a veces tienes la sensación de que solo hablamos de esos inmigrantes, esos senegaleses, esos subsaharianos que aparecen en la costa y no ponemos el foco en quien los está trayendo, ¿por qué están llegando de esta manera? ¿Qué viaje están haciendo estas personas para llegar hasta nosotros?", asegura Agustín.