Jorge Díaz (Alicante, 1962), Antonio Mercero (Madrid, 1969), y Agustín Martínez (Lorca, Murcia, 1975), los tres guionistas que están detrás de Carmen Mola, vuelven con una novela histórica ambientada en la Cuba colonial, en un tiempo en el que el lujo que rodeaba a los hacendados españoles contrastaba con la precariedad de sus esclavos, quienes en muchos casos ni siquiera tenían la categoría de personas.El Infierno (Planeta) es una vuelta de tuerca más en el estilo de esta autora de ficción en la que convergen crímenes terribles, nuestra historia más negra y el folletín clásico. Los hemos acompañado hasta La Habana, donde transcurre gran parte de la acción, para conocer los detalles de este thriller histórico que agrupa varios géneros en una mezcla de lo más explosiva y estremecedora.

“Existe el infierno y son los hombres. Por desgracia esto que nosotros describimos como el infierno es una realidad, es decir, hay lugares del mundo donde la violencia campa a sus anchas, donde hay gente que está por encima de otras personas y se creen en el derecho de matarlos. Eso pasaba en la Cuba que nosotros describimos con el tema de la esclavitud, cuando había una clase dirigente que se sentía como seres humanos, mientras traían africanos e incluso españoles a trabajar en los ingenios (plantaciones de azúcar) a los que no veían como seres humanos. Podían entonces esclavizarlos y torturarlos hasta que se quedaban sin fuerzas y muriera. Por desgracia es una realidad que en otros puntos del globo sigue existiendo”, nos explica Agustín Martínez, a quien han colgado la etiqueta del “truculento” dentro del universo Carmen Mola. Inicialmente, este triunvirato literario se repartió los papeles o, al menos, eso es lo que cuentan. Si él aporta el lado más oscuro, Jorge Díaz se presenta siempre como el “cerebro” y añade que Antonio Mercero es el “corazón”, que aporta la vis romántica. “Acepto la etiqueta con deportividad”, replica el aludido, pero subraya que “lo más importante que aporta cada uno es la generosidad para aceptar el talento y las ideas de los otros, que no siempre coinciden con las propias”.

Los tres reconocen que su éxito no hubiera sido posible sin el oficio de guionistas. “Estamos muy acostumbrados a la crítica, a que te tiren un guion o una trama entera. No nos ofendemos si un compañero te dice que una idea no funciona y nunca salimos de una reunión con el rabo entre las piernas o cabreado si alguien nos ha dicho que algo era malo”, explica Antonio.

Carmen Mola en la catedral de La Habana, ubicada en el centro histórico de la capital cubana, donde transcurre su última novela, 'El Infierno'  (Foto: Javier Ocaño) Carmen Mola en la catedral de La Habana, ubicada en el centro histórico de la capital cubana, donde transcurre su última novela, 'El Infierno' (Foto: Javier Ocaña)

"Carmen Mola tiene el detalle de darnos todo su dinero"

Después de seis novelas, entre ellas ‘La Bestia’, ganadora del Premio Planeta 2021, y una en fábrica (un nuevo volumen de la saga ‘La novia gitana’), se han convertido en uno, fagocitados por su propia ‘hija’. “Ha habido una evolución de la primera novela a esta, probablemente porque hemos limado cualquier aspereza en el engarce de las piezas y hemos aprendido”, argumenta Jorge Díaz. “Todos nosotros, de forma individual, también queremos escribir novelas, novelas nuestras, no minimolas y nos gustaría tener su éxito. Carmen Mola está muy por encima, tiene un estilo propio, unos temas y un público que está esperando sus novelas, mientras no espera, desgraciadamente las mías”, añade. En cualquier caso, no tienen “envidia” de su éxito, entre otras cosas, porque tiene el “detalle” de darles todo su dinero, explican entre risas.

¿Qué podemos encontrar en ‘El Infierno?

La novela se inicia en el convulso Madrid de la sargentada del cuartel de San Gil en 1866, el levantamiento del ejército contra la reina Isabel II, que tiñó las calles de sangre. En medio de aquel horror se cruzan los caminos de Leonor y Mauro. Ella, una suripanta (un término que el diccionario de la RAE define como mujer ruin, moralmente despreciable en su primera acepción y como corista en el teatro), y él un estudiante de medicina que colgó la bata para abrazar la causa revolucionaria. Ambos se ven envueltos en un homicidio involuntario que marcará sus vidas. No solo sentirán una atracción irresistible el uno por el otro, sino que acabarán cruzando el Atlántico para reencontrarse en La Habana colonial. Ella, casada con un poderoso hacendado cubano de quien no estaba enamorada y él, como esclavo, engañado por un empresario sin escrúpulos.

"Un folletín a lo Mola"

Parece un argumento de un folletín, y lo es, pero “un folletín a lo Mola”, puntualiza Jorge Díaz. “Nos gusta salir lo ya trillado, de lo que sabemos hacer bien, que es el policíaco de siempre. Ya en 'La bestia' hacíamos un híbrido de géneros y en esta novela también. Hay un folletín precioso, una historia de amor muy apasionada, pero también un retrato de la violencia y de la esclavitud en la Cuba colonial, que eso ya de por sí, sostiene la novela. También momentos de terror y un poco de novela costumbrista para hablar de cómo era La Habana esplendorosa de aquella época, digamos un paraíso, que tenía el tenebroso reverso de la esclavitud”, aclara Antonio Mercero.

Carmen Mola posa ante la estatua de Dante Alighieri en La HabanaCarmen Mola hace un guiño a la Divina comedia, de Dante Alighieri, al referirse a los círculos del infierno que inspiran la parte más oscura e inquietante de la trama. En la imagen, los tres molas posan ante la estatua del poete florentino en La Habana (Foto: Javier Ocaña)

1.700 gallegos esclavizados

Durante nuestro viaje a La Habana los tres ‘molas’ han exhibido su enorme pasión por la historia y el deseo de denunciar aberraciones históricas apenas contadas. Es el caso, subrayan, de esta parte de la leyenda negra española de la que apenas se habla: fuimos el penúltimo país en abolir la esclavitud, por detrás de Brasil, con la vergonzosa paradoja de que se prohibió en España mientras se permitía en las colonias. En este folletín a lo mola descubrimos, entre otras cosas, la historia de 1.700 gallegos que viajaron hasta La Habana con la promesa de un trabajo asalariado y una vida mejor que, sin embargo, fueron esclavizados.

Uno de las fuentes documentales que ha utilizado Carmen Mola para escribir ‘El Infierno’ es Azucre’, la novela de Bibiana Candia inspirada en la vida de Urbano Feijóo de Sotomayor, un empresario gallego que hizo fortuna en Cuba con el azúcar y el tráfico de esclavos, entre ellos sus compatriotas, quienes viajaron hasta la isla para trabajar en la construcción del ferrocarril y acabaron en diferentes ingenios sin cobrar lo pactado, con la excusa de que tenían una deuda por los gastos del viaje y su manutención. La mayoría murieron allí y fueron muy pocos los que pudieron regresar. "Desgraciadamente hoy en día este tipo de infiernos sigue existiendo", asegura Agustín

Otro personaje real que han utilizado como referencia es Pancho Marty, un español instalado en La Habana, que también se hizo multimillonario con la trata de personas y se convirtió en una de las personas más influyentes de la colonia. Tenía, entre otras cosas, el control del puerto y era el propietario del Teatro Villanueva, uno de los escenarios de la novela.

Todos estos buscavidas y nuevos ricos aparecen retratados con precisión en ‘El Infierno’, con su doble moral, el juego de las apariencias y la ostentación, todo ello en contraste con las clases sociales menos favorecidas, que malvivían en tabernas y lúgubres pensiones. Para recrear el ambiente de la época “tuvimos la enorme suerte de encontrar un manual de viajes que detallaba con precisión incluso el precio del café”, nos cuenta Jorge Díaz en referencia a ‘Cuba a pluma y lápiz’, de Samuel Hazard.

En este enorme mosaico de géneros, personajes y lacras históricas, no faltan los crímenes y el característico uso que hace Carmen Mola de la violencia, con giros y sorpresas que mantienen al lector alerta hasta el último párrafo. Además, sus lectores habituales encontrarán “hilos conectores” entre ‘La Bestia’ y ‘El Infierno’ como un “guiño a los lectores”. Para evitar spoiler, sólo un nombre: Clara. 

¿Es Carmen Mola feminista?

Les preguntamos si Carmen Mola es feminista y si ellos, de forma individual se definirían como tales. "No se puede no ser feminista hoy en día, es una realidad", contesta rotundo Agustín Martínez, a lo que el resto asiente. "En nuestras novelas está la respuesta a esa pregunta, siempre aparecen mujeres muy luchadoras, muy decididas, que no son vicarias de la trama del hombre, ellas sostienen la historia y actúan. Eso convierte a los femeninos son protagonistas y no la mujer de... La protagonista de 'El Infierno' empieza siendo una mujer muy frívola, pero se convierte en alguien muy idealista por todo lo que le va sucediendo y por su encuentro con Mauro, que marca su vida por completo", puntualiza Antonio Mercero. 

‘El Infierno’ sale con una primera tirada en de 400.000 ejemplares y es el gran lanzamiento de Editorial Planeta en España y América Latina para este otoño. En catalán saldrá publicada bajo el sello Columna Edicions Grup62. Hasta el momento, la novela más vendida de Carmen Mola ha sido ‘La Bestia’ y esperan que esta segunda incursión en el thriller histórico tenga, como poco, el mismo éxito.