Los Presupuestos Generales del Estado de 2023, los mismos que el Gobierno de España se comprometió a sacar adelante "en tiempo y forma", han nacido con un rasgo fundamental: un gasto social de récord, el más elevado de la democracia, centrado en proteger al grueso de la ciudadanía mediante la aplicación de políticas públicas. 

Detrás de estos Presupuestos hay muchas caras, pero una de las más expuestas es, probablemente, la de la portavoz del Gobierno y también ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez. ElPlural.com se ha trasladado hasta este Ministerio para charlar con Rodríguez sobre su trayectoria política y personal y sobre lo que se puede esperar de estos nuevos Presupuestos Generales, además de sobre las medidas ya tomadas por el Gobierno durante el trascurso de la legislatura. 

Isabel Rodríguez, ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno. Gracias por conceder esta entrevista a ElPlural.com.

Un placer. Importante la pluralidad en estos momentos y poder explicar la acción de nuestro gobierno.

Pregunta: Estaba repasando su currículum antes de acercarnos aquí al Ministerio. Es usted licenciada en Derecho, tiene 41 años, pero tiene una enorme experiencia política. Fue la senadora más joven de la historia de este país con 23 años.

Respuesta: Bueno, soy de aquellas que se entusiasmaron y se ilusionaron con el presidente Zapatero y que, como consecuencia de haber contribuido en aquellos momentos al cambio, participando en el activismo desde el ámbito educativo y también desde la organización política juvenil de mi partido, pues llegué allí y pude participar de los grandes avances y logros que en aquellos momentos se conquistaron. Es un poco vocacional, sí.

P: ¿Qué se siente con 23 años, con la carrera recién terminada o terminándola, y sentarse en nada más y nada menos que el Senado?

R: Bueno, la verdad es que siempre tuve muy claro por qué estaba y participaba en la vida política, y sigo manteniendo intacto ese compromiso, además de ser consciente de lo que significaba hacerlo, en su momento, de la mano del presidente Zapatero, con todos los cambios que llegaron a nuestro país. Hay que estar siempre con los pies en la tierra, no olvidarse de dónde venimos ni de nuestras raíces. En mi caso, provengo de una familia humilde y trabajadora donde el ascensor social funcionó gracias a las políticas de gobiernos socialistas. Propiciar que ese ascensor siga funcionando y no olvidarnos de para qué estamos aquí es de vital importancia.

P: Usted debutó directamente en política nacional, pero también se ocupó de la política regional con varios cargos en el Gobierno de Castilla-La Mancha y, antes de ser ministra, fue alcaldesa de Puertollano. De todos esos desafíos profesionales, ¿cuál fue el que le hizo más ilusión?

R: Lo más difícil y donde, quizás, más se ve la política es en el ámbito municipal. Fui alcaldesa de Puertollano durante los años más duros de la pandemia y fue difícil, pero también disfruté mucho. Aquí [en la política] si no se disfruta, es mejor no estar, porque hay que vivirlo con pasión. Es un oficio que exige de mucha dedicación, de mucho tiempo y de mucha entrega. Entonces, o lo afrontas con pasión o mejor dejarlo para que ocupen otros esa responsabilidad. En todos los sitios he disfrutado, pero, sin duda, siempre prefiero el Gobierno, los ejecutivos, y muy especialmente en mi tierra, en Castilla-La Mancha.

P: Ha dicho que le gusta más la gestión en lo que respecta a la Política Territorial, pero desde la portavocía, en este caso, le toca también gestionar la parte de comunicación. Desde un puesto tan institucional, ¿es especialmente difícil comunicar la gestión de un Gobierno de coalición formado por dos partidos políticos?

R: Es la primera vez que al portavoz del Gobierno, en este caso a la portavoz del Gobierno, le toca comunicar la acción de un Gobierno en el que no hay un único prisma o una única voz, sino que la conforman dos posiciones políticas distintas, muy coincidentes, pero que sin duda tienen matices entre sí. Trato de ser muy respetuosa con las dos formaciones políticas. Tengo que agradecer a los ministros y a las ministras, tanto de Unidas Podemos como, por supuesto, del PSOE, la tarea facilitadora que hacen para que yo pueda ejercer mi labor.

A su vez, son tantas las medidas que estamos poniendo en marcha que, en algunos casos, yo creo que muchos miembros del Gobierno son incapaces de asumir el conocimiento de todo lo que estamos haciendo y nos cuesta, por tanto, transmitirlo. Es una labor bonita, apasionante. Sabemos que estamos cambiando nuestro país y, además de gestionar la adversidad, estamos cambiando la estructura, estamos moviendo los cimientos para mejorar nuestro sistema productivo, para mejorar nuestro sistema educativo y para afrontar objetivos como el del cambio climático, el reto demográfico o la ruptura de las desigualdades.

P: Más de una vez le hemos escuchado decir que ciertos ministros o ministras hacían determinadas declaraciones a título personal. Cuando se tiene que enfrentar alguna polémica, de las que nos encantan a los medios de comunicación, ¿cómo lo vive? ¿Cómo consigue mentalizarse para que se le vea siempre tranquila, serena y no pegando puñetazos encima de la mesa?

R: Pensando en a quién me dirijo y en lo que la gente espera de nosotros. Creo que la gente que votó al Partido Socialista y a Unidas Podemos cree en nuestro proyecto y en el progreso de este país y esperan mucho de nosotros. Y creo que a veces perdemos demasiado tiempo en meter el dedo en la diferencia y no tanto en mostrar todo lo que nos une, que es mucho más. […] Entonces, pienso en esa gente que está al otro lado del televisor cuando yo estoy dando esa rueda de prensa, para trasladar lo mejor de nuestro Gobierno a la ciudadanía con todo el respeto que se merece la misma.

P: Todos los portavoces de todos los gobiernos se convierten rápidamente en blanco de críticas, porque tienen que enfrentarse, todas las semanas o muy habitualmente, a los medios de comunicación. Usted, de momento, se libra. ¿Cómo lo ha conseguido?

R: Bueno, yo creo que alguna me llevo [risas]. Especialmente en estos tiempos, es muy importante el respeto a los medios de comunicación y a sus profesionales, al mismo tiempo que también es importante que nosotros nos hagamos respetar en nuestra tarea de Gobierno. Tener el respeto como base es importante incluso ante nuestros adversarios. Pero lo cierto es que sí, me siento respetada por ustedes [los medios de comunicación].

P: Como ministra de Política Territorial, le toca también trabajar con los presidentes autonómicos, lo que incluye lidiar también con los barones del Partido Socialista, que muchas veces son muy críticos con la tarea del Gobierno. ¿Cómo lo lleva?

R: Bueno, yo he tenido la experiencia de estar en un gobierno autonómico y entiendo que, en muchas ocasiones, sus presidentes o consejeros están muy centrados en atender aquello que tiene que ver con su comunidad autónoma, y quizás pierden el prisma porque su prioridad y para lo que han sido elegidos es para gestionar su región, más que para estar pendientes de lo que sucede en el contexto nacional. Creo que este gobierno ha sido ejemplar en la política de gobernanza y en dar el papel que merecen a las comunidades autónomas y nos hemos centrado en aquellos objetivos que podíamos lograr juntos.

A su vez, hemos logrado reducir la conflictividad entre comunidades autónomas y el Estado a prácticamente algo anecdótico. Creo que este modo distinto de gobernar, basado en la cooperación y en la comunicación, con las comunidades autónomas, respetando la naturaleza del Estado Autonómico que caracteriza a nuestro país, es un modelo de éxito.

P: El Consejo de ministros acaba de aprobar los Presupuestos Generales del Estado para el próximo año. Desde el Gobierno se ha dicho que son los Presupuestos con mayor gasto social de la democracia, algo que ya se había dicho de los del año anterior. ¿Por qué este año vuelven a serlo? ¿Dónde reside el aumento?

R: Porque objetivamente hay un mayor gasto social [que el año pasado]. Tres de cada cuatro euros del presupuesto van destinados al gasto social. Y hemos aprobado un presupuesto de estas características, sin duda, por convicción, porque este es un Gobierno que defiende el Estado del bienestar y, por tanto, las políticas sociales. Forma parte de nuestra ideología: pensamos que las sociedades que avanzan son aquellas donde existe una mayor cohesión y una mayor igualdad. A mayor desequilibrio, menor avance para el país.

Decimos que son los presupuestos de más inversión social porque objetivamente lo son. Y ¿por qué hemos podido hacerlo? Pues gracias a las decisiones que ha ido adoptando previamente el Gobierno. La recuperación económica ha sido fruto de las decisiones políticas que se han ido tomando. En definitiva, nuestro modelo consiste en proteger a la ciudadanía, a los más vulnerables, para que España pueda seguir avanzando.

P: Pero, ministra, si hay tanto despliegue en el gasto social, ¿por qué el Partido Popular va por delante en las encuestas?

R: Bueno, el Partido Popular ha hecho un relevo en su dirección, que eso siempre tiene un impacto en las encuestas. Este es el Gobierno que ha gestionado la crisis de la que le hablaba, la de la pandemia, pero ahora tenemos que hacer frente a otra: la de la inflación como consecuencia de la guerra. Y habiendo gestionado dos crisis de esta magnitud y todo lo que implicaron, este Gobierno y el Partido Socialista han sido capaces de mantener el apoyo constante por parte de la ciudadanía.

Además, yo creo que la ciudadanía no está, hoy en día, en un contexto de movilización electoral. El electorado progresista, hoy por hoy, está atendiendo las dificultades de su día a día, a su familia, el inicio de curso de sus hijos, los autónomos sacando adelante sus negocios… Las familias no están ahora mismo en clave electoral. Cuando llegue el momento y tengamos que pedirles su participación, haremos el esfuerzo de movilizar a los nuestros. Tengo la confianza de que toda la acción del Gobierno, cuando llegue el momento, será valorada positivamente.

P: ¿Cree usted, como consideran algunos dirigentes socialistas, que los socios de Gobierno perjudican a la valoración de la acción del Ejecutivo?

R: Mire, yo creo que es mucho más fácil y más cómodo analizar la gestión de un Gobierno en mayoría. Ser el primer gobierno de coalición en nuestro país y que dicha coalición no cuente con una mayoría parlamentaria y, por tanto, haya que seguir hablando y negociando cada vez que damos un paso, acarrea una dificultad adicional. Y pese a esas complicaciones, este Gobierno ha tenido una acción como ningún otro en términos objetivos. Eran muchos los agoreros que decían que este Gobierno tenía los días contados y que no seríamos capaces siquiera de sacar unos primeros presupuestos, pero lo hemos hecho con los primeros, lo hemos hecho con los segundos y lo vamos a hacer con los terceros. Y haberlo logrado ha significado estabilidad política, estabilidad social y estabilidad económica para España en estos tiempos de incertidumbre.

P: Volvemos a hablar de los Presupuestos. Le he escuchado en dos ocasiones hablar de las pensiones, que han subido un 8%. ¿Es para usted lo más relevante de estos presupuestos o hay alguna otra partida que considere más destacada?

R: Creo que la partida en becas es fundamental. Va en nuestra esencia. Antes le hablaba de mis orígenes, y si no hubiera sido por una política de becas, por una universidad pública y por unos recursos que me acompañaron en mi época de estudiante en mi infancia y juventud, ya le digo que no solo no estaría sentada en el Consejo de Ministros, sino que no sería quien soy. Por tanto, creo que para atajar uno de los principales problemas que tiene nuestro país, que es la desigualdad, hay que blindar la educación en todos sus niveles, desde la educación infantil hasta la universitaria. Garantizar que todos los alumnos puedan cursar sus estudios, con independencia de las circunstancias económicas de su familia, con tranquilidad y atendiendo únicamente a su talento y valía.

Y, por otra parte, el transporte. Creo que está propiciando grandes ahorros a las familias. Los vecinos y vecinas de mi ciudad que viajan a Madrid con estos abonos pueden estar ahorrándose en torno a 300 € mensuales. A su vez, estamos fomentando un cambio de mentalidad y dando un mensaje muy importante a las generaciones futuras, apostando por el transporte público, abaratándolo para que sea usado por la inmensa mayoría de la ciudadanía, ahorrando emisiones de CO2 y contribuyendo al desarrollo de ciudades mucho más amables para las personas.

P: Hablaba hace un momento de su vivencia propia, de sus orígenes humildes y de la oportunidad que le dio la educación pública. Hablando desde el punto de vista personal, ¿ha tenido usted también tiempo, además de llevar a cabo una intensa carrera política, de formar una familia? Me imagino que el traslado a Madrid de su familia habrá supuesto o no un cierto estrés.

R: Me acompañan muy bien [risas].

P: Le leí en un titular hace aproximadamente un mes que me sorprendió mucho: “Me sentí culpable de no sentirme mala madre”.

R: Bueno, creo que se debe a la concepción social que hemos tenido que ir asumiendo las mujeres siglo tras siglo. Cuando una se siente libre de hacer lo que más le gusta, de entregarse día y noche y no sentirse culpable por ello, se siente juzgada. Y en alguna ocasión sí que me sentí así. Todos los avances que este país ha propiciado en los últimos años en materia de igualdad para las mujeres son muy importantes, pero aún es necesario seguir rompiendo algunas barreras.

Realmente, creo que las mujeres de mi generación, cuando más han sufrido la desigualdad, es cuando han tenido que tomar la decisión de ser madres y eso ha implicado retrocesos o amenazas a sus carreras profesionales. En esta legislatura, entre todas las cosas en las que hemos avanzado, hay una muy importante a este respecto, que es el haber igualado los permisos de paternidad y de maternidad para que la crianza no se convierta en una tarea que recaiga únicamente en la mujer.

Pues ministra, mucha suerte y muchas gracias por atendernos.

Gracias.