Siguen llegando informaciones que cuestionan el Mundial de Qatar. Homofobia, explotación laboral y machismo son algunos de los motivos que han servido en bandeja de plata la polémica acerca de la cita futbolística. Así las cosas, todavía en vísperas de que eche a rodar el balón en el país árabe se producen situaciones poco deseables, también contra los medios de comunicación. Uno de estos momentos es el que denuncia el reportero de la televisión danesa Rasmus Tantholdt, quien se encontraba rodando un reportaje para TV2.

Las imágenes evidencian que el protagonista de las mismas no es bienvenido. Tal es así, que llegado a un punto del corte las autoridades qataríes -en concreto la persona que aparece sentada en el carrito de golf- le impiden filmar y amenazan, incluso, con romperle la cámara si no atiende a las peticiones. El periodista cambia el idioma al inglés para pedir explicaciones sobre lo ocurrido, pero estas no llegan.

Por el contrario, la cadena recibe después una disculpa de la Oficina Internacional de Medios de Qatar, así como del Supremo del territorio. El país trató de recular, por lo tanto, tarde; y dejó muy claro el trato que da según a qué medios de comunicación, tal y como lamenta Tantholdt en Twitter en un vídeo que no tardó en dar la vuelta a redes sociales.

Censura a Dinamarca: ¿casualidad o declaración de intenciones?

Dinamarca ha sido una de las selecciones más críticas con el Mundial de Qatar. Prueba de ello es que la selección danesa iba a jugar su partido inaugural con una elástica en la que se podía leer “Derechos humanos para todos”. La iniciativa ha sido finalmente rechazada por la FIFA porque, según alega el máximo órgano futbolístico, “está prohibido exhibir mensajes políticos, religiosos o personales así como lemas de cualquier tipo, en cualquier idioma o que formen parte de los jugadores o miembros oficiales de sus uniformes de juego o los del equipo, material del equipo como bolsas, bolsas médicas o cuerpos”.

Asimismo, y tal y como explicó Hummel, fabricante de las camisetas del combinado danés, la tercera equipación sería negra a modo de “luto” por las personas fallecidas en la construcción de estadios y la permanente vulneración de las libertades básicas por parte de Qatar.

Brazalete arcoíris en el Mundial de Qatar

Una decena de selecciones lucirá el brazalete con los colores arcoíris en sus partidos como protesta por las políticas del régimen qatarí, donde la homosexualidad está penada con hasta siete años de prisión. En este sentido Inglaterra, Alemania, Francia, Dinamarca, Gales, Bélgica, Países Bajos y Suiza llevarán a cabo la acción protesta. No así España.

El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEFE), Luis Rubiales, justificó la decisión exponiendo que nuestra selección portará uno con la palabra Respect, que “incluye los ataques al colectivo LGTBIQ+”. El máximo responsable de nuestro fútbol no ha vuelto a pronunciarse. El mismo camino han tomado Portugal y Polonia, que lucirán un parche con el lema “el fútbol une al mundo”, un “gesto global” a ojos de la FIFA.