El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comparecido este lunes para realizar el clásico balance previo a la finalización del curso político y el inicio de las vacaciones veraniegas para los servidores públicos. Dos años han transcurrido desde las elecciones de 2023 y en el ecuador de la legislatura, el jefe del Ejecutivo ha prometido dos años más con “la misma determinación y energía que los siete anteriores” y con la pretensión de desplegar “agenda social, económica, medioambiental, progresista y ambiciosa” que queda pendiente.

La aprobación de unos Presupuestos Generales del Estado (PGE) renovados y actualizados, pues los actuales están prorrogados desde 2023, es clave para poder desempeñar esta labor, aunque Sánchez ha dejado entrever que no es indispensable. No obstante, ha garantizado que el Gobierno presentará las Cuentas y trabajará con el conjunto de grupos parlamentarios para que se aprueben. “En los próximos dos años vamos a pelar cada votación y ley, velando por los intereses de la mayoría social frente a los privilegios de las élites”, ha trasladado.

Frente al catastrofismo de los cenizos de siempre, el optimismo de los datos

El momento de tensión que atraviesa el Ejecutivo con sus socios está complicando las cosas, pero Sánchez ha querido desmontar el discurso derrotista que la derecha intenta implantar y ha asegurado que “ha logrado aprobar 42 leyes y ha cumplido con el 45% de los 200 compromisos” que fueron asumidos con la ciudadanía después de los comicios de hace dos años. Uno de ellos, el del aumento de los permisos parentales, ha adelantado que se certificará en el Consejo de Ministros de este martes, el último del curso.

Balance económico y social

Más allá de anuncios y promesas, el presidente ha expuesto un balance de las políticas aplicadas y los datos recopilados para valorar la acción del Gobierno. “Frente al catastrofismo de los cenizos de siempre, el optimismo de los datos”, ha defendido, apuntando que “España suma y sigue y lo hace en un contexto internacional muy complejo”. “Nuestro país vive una de las mayores épocas de prosperidad de su historia”, ha espetado, reconociendo que “queda mucho trabajo por delante”, pero destacando el avance en las “cinco prioridades” de la coalición.

La primera de las mencionadas ha sido la referida a la economía y el empleo. Sánchez ha sacado músculo por los últimos datos laborales conocidos, que reflejan la superación por primera vez en la historia de los 22 millones de afiliados y un paro en niveles de 2008, y ha dejado entrever que los referido al Producto Interior Bruto (PIB) que se conocerán este martes serán positivos. “Por tercer año consecutivo, España será la gran economía que más crezca, por encima de la media de la Unión Europea y de las economías avanzadas”, ha puesto en valor.

Si bien ha reconocido que queda aún mucho por andar para “cerrar la brecha de poder adquisitivo que nos separa de Europa”, ha considerado que el avance “positivo” de España está generando “confianza y optimismo”. De esta sensación, ha defendido, es en parte responsable la segunda de las prioridades: el fortalecimiento del Estado del Bienestar. El jefe del Ejecutivo ha hecho un recorrido por los avances en materia sanitaria (salud mental o Agencia Estatal de Salud Pública), educativa (plazas públicas de 0 a 3 años, becas y FP), de pensiones (revalorización IPC) y dependencia (783 millones de euros).

“En muchas Comunidades Autónomas (CCAA) la sanidad, la educación y los cuidados pierden terreno a manos de administraciones conservadoras que están desmantelando el sistema público para venderlo al mejor postor”, ha lamentado. A más de estas materias, en este punto se ha detenido especialmente en la problemática de vivienda y en la dificultad de asunción de soluciones con el reparto de competencias, la mayoría en manos de las Comunidades Autónomas. No obstante, ha querido destacar medidas a nivel nacional como el aumento del 8% de la vivienda de protección oficial, la eliminación de las golden visa o la persecución a los pisos turísticos ilegales.

Medioambiente, reforma institucional y política exterior

La tercera de las prioridades señaladas ha sido la “adaptación y mitigación de la emergencia climática”. En este punto ha puesto en valor la ley de prevención de pérdidas y desperdicio alimentario, que asegura que evita que más de 1,3 millones de toneladas de alimentos en buen estado acaben en la basura; la protección de los ecosistemas, con una reducción de emisiones de CO2 un 17%; o la intención de sacar adelante el decreto antiapagones, que ha adelantado que el Gobierno volverá a intentar sacar adelante. “Crecemos reduciendo la emisión de gases de efecto invernadero”, ha resumido.

El cuarto punto por el que ha pasado el repaso de Sánchez, en presencia del ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha sido el “fortalecimiento de las instituciones y la cohesión territorial”. En este no ha podido evitar hablar de la corrupción que ha salpicado al PSOE con el caso Koldo y ha defendido la actuación del partido del que es secretario general, expulsando a los presuntos delincuentes y presentando en el Congreso un Plan de Lucha con 15 medidas consensuadas con Sumar.

A más, ha destacado la ley de eficiencia judicial y las medidas para la democratización de las carreras judicial y fiscal, en lo referido al plano judicial, y la condonación de 83.000 millones de euros de las CCAA y la aprobación de sus entregas a cuenta, en materia de cohesión territorial. Por último, Sánchez no ha podido evitar referirse al plano internacional, marcado por la guerra arancelaria del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, y por el genocidio desplegado por Israel en Palestina.

Sobre el rendimiento de Europa a los intereses estadounidenses, el jefe del Ejecutivo ha querido trasladar respaldo a la presidenta de la Comisión, Úrsula von der Leyen, aunque ha reconocido que no le genera “ningún entusiasmo” la claudicación. En lo referente a los conflictos abiertos, ha confirmado el compromiso del país con Ucrania y ha anunciado el envío este viernes de miles de kilos de alimentos a la Franja de Gaza, vía aérea, para combatir la hambruna con la que Israel está asesinando a los civiles. “Es una vergüenza para toda la humanidad y detenerla es un imperativo moral, humanitario y político”, ha trasladado.

Zanjado el repaso, Sánchez se ha despedido con optimismo del curso y ha deseado que los españoles disfruten “de su merecido descanso vacacional”. “Lo harán en uno de los países que mejor está funcionando en Europa y en el mundo. Un país con unas cifras de crecimiento y empleo récord. Con los niveles de desigualdad y pobreza más bajos que la última década y media. Con el segundo poder adquisitivo que más crece en la OCDE”, ha añadido. Un mérito que atribuye al trabajo de los 48 millones de españoles.

Súmate a El Plural

Apoya nuestro trabajo. Navega sin publicidad. Entra a todos los contenidos.

hazte socio