Además de su labor futbolística, Sergio Ramos tiene una faceta empresarial dedicada a la inversión inmobiliaria desde hace unos años junto a su familia. Uno de sus objetivos principales en este campo era construir una macrourbanización al sureste de Madrid, Los Berrocales, con una inversión de 33,6 millones de euros entre 2015 y 2018.

Sin embargo, la obra se ha visto paralizada varias veces por motivos políticos y finalmente el futbolista ha acordado una dación en pago con el fondo Blackstone para saldar la deuda de los últimos años, tal y como confirman Vanitatis y Cinco Días. Así, abandona el macroproyecto empresarial que había puesto en marcha junto a su familia.

Según las fuentes citadas por Vanitatis, se trata de “una dación en pago a partir de un acuerdo amistoso por el que el crédito que se sostenía en activos queda cancelado en el momento en el que Blackstone se queda con los activos. Es una operación habitual, un trámite”. De esta forma, Sergio Ramos cede sus terrenos al fondo y da por extinguida la deuda en el proyecto Desarrollos del Sureste.

Los problemas en la operación comenzaron cuando el Ayuntamiento de Madrid, en ese momento liderado por Manuela Carmena, decidió paralizar el proyecto de Ramos para inspeccionarlo. El futbolista estaba presente en el plan urbanístico a través de Sermos 32 SL, sociedad en la que aparece como único accionista.

Actividad inmobiliaria fuera del terreno de juego

En 2011, el futbolista del Real Madrid se asoció con Cecosa Hipermercados, propietario de Eroski, para invertir en la sociedad constructora Inversiones Inmobiliarias Los Berrocales. Dentro de la sociedad, el futbolista posee el 49%, Cecosa el otro 49% y su padre, José María Ramos, tiene el 1,01% de las acciones, además de ocupar la presidencia.

Relacionado Sergio Ramos: 33 millones en inversiones empresariales e inmobiliarias

La información de la empresa disponible en el balance contable de 2019 demuestra que la adquisición de terrenos se produjo en el año 2000, una década antes de que Ramos entrara en el negocio.

“La sociedad adquirió en el ejercicio 2000 dos paquetes de solares en Vallecas de 97.830 metros cuadrados y 102.170 metros cuadrados. En el ejercicio 2001, ejercitó los contratos de opción de compra firmados el año anterior, adquiriendo de este modo otros 98.821 metros cuadrados y 232.224 metros cuadrados”, aseguran fuentes cercanas. Esto significa, según Vanitatis, que “las superficies propiedad de la sociedad son de 196.651 metros y 334.394 metros cuadrados”.

Además, el balance también informa que “la sociedad tiene concedido un préstamo hipotecario con un principal de 35 millones de euros, dispuesto en su totalidad, que tiene como garantía los solares descritos. Su vencimiento es el 17 de noviembre de 2020. Se mantienen negociaciones con la entidad bancaria”.

Préstamo hipotecario de 35 millones de euros

La deuda del préstamo hipotecario de 35 millones de euros sería la cantidad por la que ha realizado la dación en pago al fondo Blackstone, que en principio vencería el 17 de noviembre, a lo que Ramos se ha adelantado. Este préstamo pasó del Banco Pastor al Popular y posteriormente al Banco Santander.

La operación de Ramos empezó a presentar problemas en el momento en el que el Ayuntamiento de Manuela Carmena bloqueó el proyecto hace unos años. Esto generó una serie de denuncias, incluida la de Ramos y su familia, por las que el Ayuntamiento se enfrentaba a indemnizaciones millonarias por la paralización urbanística. De hecho, según Vanitatis, un informe de dos peritos independientes cifraba en 640 millones de euros la cantidad que el Consistorio tendría que desembolsar a la junta de Los Berrocales.

Posteriormente Almeida desbloqueó la operación, tal y como demuestra la sociedad en sus cuentas: “Tras varios años de indecisión, el Ayuntamiento de Madrid ha iniciado la tramitación para la aprobación del convenio para dotar el impulso urbanístico de Los Berrocales, lo que supondría la puesta en marcha de las tramitaciones para disponer de un próximo proyecto de reparcelación, el cual permitirá el establecimiento de las parcelas definitivas, y con ello tanto la mejora de la viabilidad del proyecto como del recorte en los plazos previstos para el desarrollo del ámbito”.

El objetivo de la operación en Los Berrocales era construir más de 100.000 viviendas que deberían estar terminadas en 2034, la mayor bolsa de suelo en el sur de Madrid.