Tamara Falcó en las últimas horas se ha quedado sin diseñadora de vestido de novia a 7 semanas de su boda con Íñigo Onieva, un contratiempo más que se suma a otros imprevistos a los que ha tenido que hacer frente la pareja desde que anunciaran su compromiso matrimonial. Todo está organizado para que su gran día se celebre el 8 de julio en la capilla del palacio El Rincón, por lo que la marquesa de Griñón tendrá que buscar una nueva firma para su vestido, aunque el tiempo corre en su contra.

Sophie et Voilà, la marca que había elegido para su diseño, alegó incumplimiento contractual en un comunicado que sorprendió a los seguidores de a hija de Isabel Preysler. Las diseñadoras bilbaínas insinuaron que durante el proceso creativo la propia Tamara Falcó les pidió que se inspiraran en el modelo de otro diseñador, algo que la protagonista desmintió en ¡Hola!. Lo que está claro es que finalmente no llegaron a un acuerdo tras las pruebas realizadas tanto en su atelier como en diferentes hoteles de lujo en Madrid.

La crisis del vestido no es la única a la que se ha tenido que enfrentar durante la preparación de su boda. Tan solo días después de hacer público su engagement, en septiembre de 2022, tuvieron una sonada ruptura por una infidelidad del empresario. Tras la navidad, la aristócrata le dio una segunda oportunidad, anunciando su enlace con la fecha inicial, el 17 de junio. Sin embargo, en febrero, la pareja anunció el retraso de la fecha de la boda al 8 de julio para que todos sus familiares pudiesen asistir.

En busca de un diseñador internacional para su vestido de novia

Tamara está “tranquila” ante la necesidad de elegir un nuevo diseñador, según han confirmado personas de su entera confianza a Vanitatis. Lo que sí le preocupa es que se vuelva a repetir la situación vivida con la marca bilbaína, con la que “todo parecía de color de rosa” y al final “ha terminado en drama”.

Ya está manos a la obra con su equipo buscando una nueva firma, pero lejos del mercado nacional, donde grandes marcas se han ofrecido como firmes candidatas a acompañarla al altar, según han asegurado al citado medio Juan Avellaneda y Blanca Unzueta, las dos personas de confianza de Tamara en todo el proceso.

Para su nueva elección ha cambiado mucho de su primera elección en la que escogió un atelier pequeño y con tradición, aunque aún no está decidido el nuevo diseñador, que según afirman desde su entorno no será de su amigo Avellaneda ni saldrá de los talleres de Pronovias.

Para esta búsqueda a contrareloj están contando con la ayuda de su madre Isabel Preysler, quien habría puesto a disposición de su hija su preciada lista de contactos para que todo salga según lo planeado y sea “la novia que ella desee ser”.

Así sera el vestido de Tamara

Las opciones que se barajan son relevantes firmas a nivel internacional como Giambattista Valli, Dior, Carolina Herrera o Valentino, que se presentan en las quinielas de sus personas cercanas como las candidatas más probables para vestir a la aristócrata más popular de España en la que probablemente será la boda del año.

La inspiración de Tamara está clara desde hace años y es el modelo de Chanel que forma parte del archivo del Museo Metropolitano de Nueva York del que todo el mundo habla desde que se hiciese pública la información del comunicado. Un vestido sencillo, clásico y que no es de novia tradicional, el que Falcó habría pedido reinterpretar a las diseñadoras Sofía Arribas y Saioa Goitia y que tiene “entre ceja y ceja”.

“Ella no quiere copiarlo, lo ha usado de inspiración en todo momento. Desde hace años guarda la foto del vestido como oro en paño en su galería de fotos del móvil y en el pasado no ha dudado en enseñarlo siempre que salía el tema de bodas y vestidos de novia. Lo guarda desde mucho antes de conocer a Íñigo”, han comentado sus amigos.

El gafe que persigue a Falcó

Los problemas que se le han ido presentado a Tamara Falcó en su camino al altar con Íñigo Onieva hacen que muchos apunten ya a un supuesto mal fario que la persigue. El último contratiempo del vestido a dos meses de la celebración es solo el último de los que acumula.

Días después de hacer público su compromiso, en septiembre de 2022, tuvieron una sonada ruptura por un vídeo en el que aparecía el empresario de fiesta con otra chica. "Veo imposible volver con Íñigo. Para los cuernos soy muy cuadriculada. Y ya si le sumas la mentira...", aseguró en Sálvame afirmando que los cuernos no los aguantaba "ni un nanosegundo en el metaverso".

Íñigo, desapareció del mapa y empezó a tratar de reconquistar a la marquesa, alejándose de la fiesta y a base de misas, rezos y confesiones. Tras la navidad, logró que la aristócrata le diese una segunda oportunidad, anunciando su enlace por segunda vez y con la fecha inicial, el 17 de junio.

Sin embargo, en febrero, la pareja anunció el retraso de la fecha de la boda al 8 de julio: "Para nosotros es muy importante contar con nuestros seres queridos y algunos familiares no podían venir en la primera fecha planteada, por razones de causa mayor", explicó Tamara.