Desde que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, fuera acusado por el Gobierno de Israel de “apoyar al terrorismo” de Hamás tras pedir el reconocimiento del Estado palestino, el Partido Popular se ha posicionado en el lado contrario al de Moncloa, acusando así al Ejecutivo de crear “un problema” en materia internacional. Debido a este postulado, las críticas se han sucedido en las últimas horas, siendo la esgrimida por José Zaragoza una de las más compartidas.

A través de sus redes sociales, el diputado del PSC en el Congreso, ha resumido en una frase de escasas palabras la postura adoptada por Alberto Núñez Feijóo en el marco de este conflicto exterior: “A Netanyahu sólo le queda Feijóo”, ha sentenciado en su cuenta de X -red social antes conocida como Twitter-.

El discurso del PP sobre ante el conflicto Israel-Palestina

En el marco del viaje de Pedro Sánchez la semana pasada a Israel, Palestina y Egipto, donde se produjo la grave acusación del Gobierno de Netanyahu al presidente español y a su homólogo belga de “apoyar el terrorismo” de Hamás por pedir el reconocimiento del Estado palestino, la respuesta de la derecha en España no se hizo de esperar, aunque fue a la contra de la postura adoptada por Moncloa.

En lo que respecta al PP, el pasado viernes Núñez Feijóo acusó a Sánchez de “crear un problema a España” y de ser “imprudente en política exterior”: “Ir invitado a casa de un aliado para ofenderle es la peor carta de presentación de España”, afearon desde Génova 13. En este punto, el principal partido de la oposición insistió en que Sánchez puso “el interés de su coalición de Gobierno por delante del interés de su país”.

Una disposición que ha continuado estirándose en los últimos días. Este lunes, en el marco del cónclave del Partido Popular Europeo (PPE) en Barcelona, Núñez Feijóo ha esgrimido sendas críticas en contra de Sánchez ante el papel que está protagonizando España en el conflicto en Oriente Próximo.  Por un lado, Sánchez recibió buenas palabras por parte de Hamás después de pedir el reconocimiento del Estado de Palestina, lo que le ha servido al líder popular como medida de ataque: “Es un error grave”, ha resumido.

En los mismos términos, Núñez Feijóo ha admitido el derecho de Palestina “a la paz y a la estabilidad”, aunque ha abogado por “destruir” a Hamás. Por esta consecución de hechos, el líder de Génova acusó a Sánchez de abrir “una crisis diplomática” con Israel en mitad de “un conflicto bélico”.

Otras voces populares, tales como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, también se han posicionado en el blanco del escenario político, ya que ha asegurado que "en este momento" no es tiempo de hablar de reconocer o no el Estado palestino, echando por tierra así la decisión del Gobierno de Sánchez. 

Cabe remarcar que el PP sí que defendió reconocer el Estado de Palestina años atrás. Allá por 2014, el PP, bajo el mandato de Mariano Rajoy en el Gobierno, aprobó una resolución en la Cámara Baja “a favor del reconocimiento del Estado palestino y de la solución de los dos Estados votada por unanimidad”. No obstante, esta iniciativa fue una proposición no de ley que presentó previamente el PSOE en la que se pedía expresamente “reconocer Palestina como Estado” como “única solución posible” ante el conflicto con Israel. 

Las palabras de Sánchez en Gaza

Lo único que defendió Sánchez desde la Franja de Gaza el pasado viernes es apremiar a la comunidad internacional a mediar con más claridad en el conflicto: “Ha llegado el momento para que la comunidad internacional y especialmente la UE tomen una decisión sobre el reconocimiento del Estado palestino. Valdría la pena y sería importante que lo hiciéramos juntos. Si eso no ocurre, por supuesto que España tomará sus propias decisiones”, argumentó.

A renglón seguido, llegó la respuesta del Ejecutivo de Netanyahu subiendo el tono en contra de la postura adoptada por España y secundada por Bélgica con acusaciones de “apoyo al terrorismo” y convocando a los respectivos embajadores en Israel como señal de represalia por las “falsas” afirmaciones. Después, el Ministerio de Asuntos Exteriores español, hizo lo propio tachando de “inaceptables y falsas” las palabras de Netanyahu.