El eurodiputado de Vox Hermann Tertsch ha cargado duramente contra el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, después de que este evocara a la catástrofe de Gernika durante su intervención en el Congreso de los Diputados.

“Zelenski, nacido en la URSS, no tiene culpa de no saber que la iconografía de Guernica es pura propaganda de guerra. Ni que en Guernica murieron menos que en un ataque a cualquier pueblo en Ucrania. Sabe de la Guerra Civil según Stalin y nuestros colegios”, ha señalado el eurodiputado ultra en su cuenta de Twitter.

Un mensaje con el que Tertsch contestaba, a su vez, a un tuit anterior de Felipe Utrera-Molina, hijo de José Utrera Molina, exministro de Franco: “En Guernica murieron entre 150 y 300 personas. Unos meses antes, en noviembre de 1936, el Frente Popular asesinó a más de 5.000 inocentes en Paracuellos, con las manos atadas con alambre de dos en dos. Como en Katyn”.

Zelenski: “Parece que estamos en abril de 1937”

Un Zelenski que, tal y como se mencionaba en los párrafos anteriores, ha comparecido en el Congreso equiparando las masacras a civiles en las ciudades de Mariúpol y Mucha con la catástrofe que vivió España hace más de un siglo, durante la Guerra Civil. “Imaginen que esto pasa en Europa. Estamos en abril de 2022, pero parece que estamos en abril de 1937, cuando ocurrió el desastre de Gernika. Imaginen que en las ciudades de Ucrania la gente vive sin medicamentos ni alimentos porque el ejército ruso bloqueó nuestra ciudad Mariúpol y la mayoría de los edificios están derrumbados y las personas enterradas en los patios de las cosas donde vivían”, ha denunciado el dirigente ucraniano.

Zelenski ha venido haciendo menciones específicas a acontecimientos y situaciones históricas en los distintos países en sus discursos ante los Parlamentos con el fin de interpelarles a actuar frente a Rusia y su presidente, Vladimir Putin, como también ha hecho hoy en el caso de los españoles.

Así les ha querido poner en situación de lo que está ocurriendo y les ha pedido que se imaginen "a las madres que escriben con bolígrafo en la espalda de su hijo su nombre y un contacto de alguien cercano por si los ocupantes matan a los padres para que este niño tenga una pequeña posibilidad de ser salvado".

Igualmente, ha destacado que, en muchas ciudades, como Mariúpol, donde el 90 por ciento de los edificios han sido destruidos, la población vive sin agua, sin comida y sin medicamentos y los muertos son enterrados en sus propios patios.