La polémica surgida a raíz de la ley del solo sí es sí no cesa. Mientras el Gobierno de coalición se encuentra en una crisis interna a cuenta de la reforma de la norma que ha llevado al PSOE a buscar apoyos fuera de Unidas Podemos para aprobar la modificación, las opiniones al respecto de los efectos y la necesidad de cambiar la normativa se suceden en distintos ámbitos. Tanto los partidos políticos, las redes sociales y la calle se han llenado de consideraciones muy contundentes al respecto, sin embargo, un asunto tan importante también puede ser tratado con cierto humor. Esto es lo que ha hecho precisamente Polònia, que ha arrasado con la parodia de una cita viral de First Dates con la ministra de Igualdad, Irene Montero, y un presunto juez.
Polònia parodia First Dates con Irene Montero
Lo han vuelto a hacer. Tras sacar los colores a Ayuso, el conocido programa de TV3 Polònia ha dado muestra una vez más de toda su capacidad humorística y ha convertido la cita más viral de los últimos tiempos de First Dates en una parodia de una supuesta conversación entre la ministra de Igualdad, Irene Montero, con un peculiar juez por la ley del solo sí es sí. Una imagen que parece lejos de producirse pero que ha arrasado en las redes sociales. Y es que el espacio de la televisión catalana ha aprovechado la polémica generada al rededor de un curioso encuentro entre un soltero y una chica estudiante de Medicina para trasladarlo hasta la primera línea de la política actual.
En los últimos días, las redes se han llenado de un vídeo de una cita a ciegas que se ha producido en First Dates. Allí, un joven soltero comenzó a cuestionar que su potencial compañera sentimental estudiara Medicina, tal y como ella aseguró, y comenzó a plantearle preguntas sobre sus conocimientos. Una escena muy criticada por ser un claro ejemplo de mansplaining. Tal ha sido el alcance que ha tenido esta conversación que ha sido fuente de inspiración para que TV3 hiciera una vez más de la suyas. El famoso programa de humor Polònia ha parodiado esta escena con un hombre del ámbito de la justicia y la ministra Montero al hilo de la ley de la libertad sexual. "Te lo explico si no lo sabes", le llega a espetar.
"Con tu chapuza de ley puedo liberar violadores"
Todo empieza cuando la mujer le dice que trabaja como ministra de Igualdad en el Gobierno, a lo que él -vestido con una toga- le responde que entonces tendrá constancia de que "no es igual que una chica vaya provocando por la calle a que no lo haga". "¿Sabrás que con tu chapuza de ley puedo liberar violadores todos los días y con la antigua no?", añade. Ante esto, una supuesta Montero le replica que "igual la reforma tenía flecos, pero la interpretáis como os sale de la punta de la toga porque la clave es el consentimiento". Un mensaje en clara referencia a lo que en varias ocasiones ha manifestado la verdadera titular de Igualdad.
Como si del verdadero programa de encuentros amorosos se tratara, el hombre también mantiene conversaciones con la cámara, a la que le reconoce que no es su "prototipo" ya que es "muy progre". "Llevo bastantes años metido en el mundo de la justicia y sabré yo lo que es o no el consentimiento", dice. Ya en la mesa de nuevo, el joven manifiesta sus dudas de que Montero sepa lo que es el consentimiento -principal escollo entre Unidas Podemos y el PSOE- y pasa a explicárselo. "Es cuando se manifiesta libremente la voluntad de una persona respecto a un acto concreto, muy ambiguo", asegura, cometiendo mansplaining.
"Si sabes tanto..."
También Montero tiene su particular confesión ante las cámaras, donde confirma que "no va bien la cita" debido a que "el tío tiene la autoestima alta, pero es diferente eso a ser gilipollas". "Si sabes tanto de consentimiento, sabrás cuántas penas se han rebajado por tu ley", le suelta el hombre en la mesa, ante lo que ella le replica que "muchas de estas condenas estaban a punto de cumplirse. "No hace falta ser ministra para saberlo, solo con que seas del mundo de la judicatura o del fitness...", le llega a decir este. Al final, como ocurre en el programa, los dos confesaron si querían tener una segunda cita, a lo que ella se negó mientras él se mostró dispuesto a repetir, tal y como ocurrió en la realidad entre el chico y la doctora.
