El PSOE registró el lunes su reforma de la ley del ‘solo sí es sí’, que no solo enmienda el texto nacido en el seno del Ministerio de Igualdad, sino que también expone las delicadas relaciones entre los dos socios de gobierno. La coalición vive uno de sus momentos más difíciles de la legislatura, precisamente a  menos de un año de que ésta finalice. La ministra de Justicia, Pilar Llop, encargada de presentar y desgranar el contenido de la Proposición No de Ley, ha cargado las tintas contra Podemos ante los micrófonos de Hoy por hoy. La socialista ha defendido que el consentimiento no se ha tocado y ha señalado a Igualdad y al ala morada del Ejecutivo de “confundir a la opinión pública” e intoxicar.

“No hay que probar el consentimiento”. Así de tajante se ha mostrado la titular de Justicia durante su intervención en la Cadena SER. Llop ha insistido en que la reforma del PSOE no toca en absoluto este punto, que “queda intacto”. Ha puntualizado que el artículo 178.2 ya recoge que agresión sexual se produce cuando hay intimidación o anulación de la voluntad, entre otras circunstancias. Por lo tanto, en caso de que concurran estos aspectos, no es necesario probarlo”.

En cualquier caso, sin mencionar expresamente a Podemos o al Ministerio de Igualdad, la titular de Justicia ha cargado las tintas contra el socio minoritario del Ejecutivo, acusándolos de poco menos que intoxicar y distorsionar la realidad. “Los mensajes que se están dando son confusos y lo que tiene que hacer cualquier persona que quiera entender cómo está regulada la reforma y el Código Penal es leerlo”, ha apuntado Llop.

A pesar de los obstáculos y del inmovilismo de la facción morada en Moncloa, Llop afirma que intentará seducir a Podemos para atraerlos al ‘sí’ a la reforma que ha encabezado su ministerio. “Es necesaria porque hay que ajustar las penas”, ha puntualizado la titular de Justicia, al tiempo que reseñaba la sinrazón de que un hurto por móvil fuera más punible que una agresión sexual. “Que lo más grave se castigue con una pena más grave y viceversa”, ha asegurado.

Llop: "Los mensajes que se están dando son confusos y lo que tiene que hacer cualquier persona que quiera entender cómo está regulada es leerla"

A pesar de la confrontación y las subidas de tono en un debate ya ideológico, Llop rechaza que las relaciones con Podemos queden maltrechas. “En absoluto”, puntualiza, al tiempo que remarca que la parte de Igualdad “es fundamental”. “Me he dedicado a esto toda mi vida, a atender a los problemas de la mitad de la población”, ha explicado. Asimismo, la titular de Justicia puntualiza que la reforma socialista no es sino un “reajuste técnico” que no cuestiona “modelos ni consentimientos”.

Rebajas de condena

El PSOE ha asumido el liderazgo en esta materia frente a las negativas de Podemos a cambiar ni un ápice del texto original. El incesante goteo de rebajas de condenas a agresores sexuales y violadores ha generado unos efectos “indeseados” que los socialistas querían corregir, aunque no sin la preceptiva prudencia. Entendían que era necesaria la búsqueda de un parche con el tapar la vía del articulado de Igualdad.  

Pero la reforma del PSOE está lejos de frenar las revisiones condenatorias, por eso ha avisado de que esta PNL no arregla “lo que ya ha sucedido”. Llop asegura que no buscan generar “falsas esperanzas” a las víctimas, sino que intentan detener en seco esos “desajustes tecnológicos”. “No es de recibo que con esta ley se haya producido una rebaja de penas y que salga más barato agredir sexualmente y con violencia a una mujer que robar con intimidación”, continúa la ministra del ramo, que se pregunta sobre desde “cuándo vale más la propiedad que la libertad sexual”.

Lo que sí garantiza la ministra es que su reforma no comportará “disminuciones de condena” a los reos. Llop asegura que la situación se tiñó de gravedad ante las rebajas de penas e incluso excarcelaciones que se registraron, por lo que se vieron obligados a “dar una respuesta”. “Hemos estado analizando las distintas resoluciones y ya nos pusimos a trabajar con el ministerio de Igualdad. Primero a nivel técnico y después político. Las penas en los abusos han subido, pero con violencia e intimidación, han bajado. Esto hay que cambiarlo, pero mantendremos la fórmula del consentimiento”, ha explicado.