El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha subrayado que su obligación es la de dotar de los medios personales y materiales "suficientes" a la unidad de asuntos internos y exigirles la "máxima" profesionalidad para llegar al fin de los hechos relacionados con el caso BBVA-Villarejo.

Durante la sesión de control al Gobierno, el titular de Interior respondió así a la pregunta de la diputada Noelia Vera Ruiz-Herrera del grupo parlamentario Podemos-En Comú Podem-En Marea, que le pedía saber qué es lo que está haciendo el Gobierno para aclarar la "trama corrupta" que relaciona al excomisario José Manuel Villarejo, al BBVA y Francisco González (FG), presidente de la entidad hasta enero de este año. "Nuestra ocupación y nuestra preocupación desde el Ministerio del Interior es la de dotar de los medios personales y materiales suficientes a la unidad de asuntos internos para que puedan realizar su trabajo bajo una única dependencia", ha apuntado Grande-Marlaska, al tiempo que ha subrayado que se trata de una cuestión judicializada.

El ministro ha asegurado tener "muy claro" que la seguridad del Estado no puedo convertirse en una justificación de actuaciones ilícitas. "Creo que no tiene nada que imputar a este Gobierno, ni a este a ministro, ni al equipo de este ministro, ni a las fuerzas y cuerpos de seguridad bajo mi dirección", ha recalcado, después de que la diputada le acusara de pertenecer a las "cloacas del Estado".

"Actualmente seguimos y estamos limpiando. El entramado policial que se hizo por otros gobiernos no es, evidentemente, el presente", ha añadido, indicando que su objetivo, tanto antes como juez como ahora como ministro, es el de dotar de medios a la Policía y a la Guardia Civil para luchar contra la corrupción.

La interminable 'investigación interna del BBVA'

Presionado por lo publicado por los medios y la expresión pública de preocupación por parte de los reguladores, el BBVA decidió dar un paso más en sus trabajos de investigación interna para determinar qué relación tuvo el banco bajo la presidencia de Francisco González con la firma de detectives del encarcelado excomisario de Policía José Manuel Villarejo, para lo que fichó a la auditora PwC, que se suma a los bufetes Garrigues y Uría Menéndez, que trabajan en dicha investigación desde el verano pasado, según comunicó el banco. Sin resultados conocidos hasta el momento y sin plazo estimado de finalización. 

PwC trabaja en la realización de un informe 'forensic' al que ha destinado un equipo de más de 40 personas especializadas y dedicadas en exclusividad a este asunto. Para ello, indican desde el BBVA, utiliza "una tecnología muy puntera y los medios más avanzados", con el fin de realizar una investigación de carácter objetiva y lo más independiente posible.

A principios de año, los digitales El Confidencial y Moncloa.com sacaron a la luz numerosas informaciones que relacionan a BBVA con una operación de espionaje masivo durante los años 2004 y 2005 a empresarios,miembros del Gobierno de España y periodistas con el objetivo de desestabilizar a Francisco González, presidente nombrado por Aznar cuando la entidad era pública, por parte de directivos de la constructora Sacyr supuestamente con el apoyo del entonces Gobierno socialista.