Feminismo. Esta es una de las palabras más repetidas en todas las escenas públicas en los últimos tiempos. En la política, el empleo, en el día a día se reivindica dar más pasos hacia delante para lograr una igualdad efectiva. Sin embargo, ¿es suficiente?. En el marco del 8M que se conmemora este miércoles, la número 2 del PSOE de Madrid, Llanos Castellanos, pone el foco en la necesidad de extender los ámbitos de actuación a otras escenas y situaciones cotidianas para poder acercarnos cada vez más a una igualdad real.

"Queremos poner el foco en que el feminismo es la ayuda y la apuesta en los sectores que de verdad liberan y empoderan a una mujer, que son trabajo de calidad, una realidad de ayudas o de asistencia y de educación de 0 a 3 años universal", asegura en pos de la conciliación, otra de las grandes luchas muy vinculadas con el feminismo. Así, insiste en trabajar especialmente mirando hacia las madres solteras, quienes soportan un doble peso, el de ser mujer y criar a un hijo sola.

ElPlural.com charla con Llanos Castellanos

Pero no solo eso. Llanos Castellanos habla con ElPlural.com también de otros aspectos que marcan no solo el devenir de las mujeres sino de todos los madrileños, como sanidad, corrupción, elecciones autonómicas, Isabel Díaz Ayuso... y mucho Madrid.

PREGUNTA: Para hablar de Madrid hay que hablar de Sanidad. Los médicos madrileños continúan en huelga y a la atención primaria se le han sumado ahora los médicos de los hospitales, hace tan solo unos meses se manifestaban los profesionales de las urgencias extrahospitalarias. ¿Por qué Ayuso no llega a ningún acuerdo con los sanitarios? ¿Les interesa alargar el conflicto a unos y a otros como muchos dicen?

RESPUESTA: Parece que cuando se ha extendido la huelga a la especializada es cuando el consejero se ha dignado a hablar con este colectivo, que en el fondo es hablar también con los pacientes. Los médicos están reclamando poder dar buena atención a los ciudadanos. Después de la pandemia se echó a la calle a 6.000 sanitarios y ahora dicen que el problema es de reclutamiento y que no hay médicos. No es verdad. En todos sitios se ha buscado una solución.

En los últimos seis meses del año 2022, la Consejería de Sanidad libró 1.378 millones de pagos a las empresas privadas de salud que llevaban guardadas en los cajones desde 2015 y que, por cierto, llevaban guardadas en los cajones porque los interventores generales de la Comunidad de Madrid se negaban a firmarlas. De hecho, ha habido cinco ceses en este año.

Es producto de una estrategia el no sentarse, porque además cuando no te sientas a hablar, lo que estás generando en la ciudadanía es inquietud sobre la sanidad. Dudan de si van a tener cobertura o no, si van a tener abierto sus centros de salud, si les van a atender en las urgencias y ya tenemos el negocio perfecto. Por un lado, sanean las cuentas de la sanidad privada y por otro lado le generas clientela, porque la gente, ante la incertidumbre de la de la pública, va a hacerse pólizas privadas.

Es la razón por la que somos la comunidad autónoma que tiene la mayor número de pólizas privadas. Hay una estrategia de desmantelamiento y de crear incertidumbre. La gente con otra cosa no, pero con la salud no juega. Por eso no se hablan, no se sientan. Por eso hablan de centros de salud cochambrosos, que están sucios.

P: Otro de los grandes problemas que tiene Madrid está en San Fernando de Henares. Las prisas electorales de Esperanza Aguirre han hecho que miles de familias hayan perdido sus casas porque literalmente se están hundiendo. ¿Qué solución se le puede dar a estas familias? ¿Considera que la Administración está haciendo todo lo posible?

R: Desde luego la Administración Autonómica no está haciendo absolutamente nada, solo inyectar hormigón en las grietas, sin tener dónde asentarse, que están todavía ampliando más. Si tú en algo que se está abriendo le metes a chorro hormigón, imagínate, todavía se dilata más.

San Fernando de Henares es quizá el ejemplo más palmario de lo que es tener al frente un gobierno sin alma. Que no lo dude la gente. Les han causado un problema por hacer un proyecto sin los informes geológicos y sin los estudios precisos. Tenemos ahora a más de 600 familias fuera de sus viviendas, pero que todavía no están hundidas.

Día a día tienen que aguantar pagar la hipoteca de esa casa, buscarse un alquiler. Y además, como les han dado veces 30 minutos para salir, se tienen que comprar desde las sartenes, a las sábanas, a las toallas.

Es un dramón y lo único que han conseguido es que cuando fueron a manifestarse en la cena de Navidad del PP es que muchos militantes del PP salieran a decirles "muertos de hambre". No hubo nadie que los callara, no hubo nadie que saliera a decir eso no se puede decir. San Fernando necesita una solución, un plan integral, y una norma que dé cobertura para esas hipotecas. Además hay que buscar una solución urbanística completa, que les dé solución residencial, que se aprecie el daño moral que se ha producido. Esas familias necesitan de un paraguas completo, no de parches.

Ayuso "mueve la silla" a Feijóo

P: Ustedes mismos critican que en vez de solventar estos asuntos, Ayuso se dedica más a mover la silla a Feijóo para hacer oposición a Sánchez.

R: Si vemos el tiempo del número de horas en las que declaraciones sobre Madrid sobre total de veces que habla, obras son amores. Ahí se ve claramente cuáles son los temas que a ella realmente le obsesionan y a los que dedica su tiempo que se dedica a fabricar titulares.

Todo es Sánchez. Por no hablar de sus esfuerzos por cargarse a Casado, cosa inaudita en una democracia. Que un político caiga por intentar investigar y dar luz a lo que había pasado con las mascarillas, con esas comisiones astronómicas. Es todo como de Pepe Gotera. No ha pasado nada. Estoy convencida de que eso pasa factura, porque a la gente la puedes engañar durante mucho tiempo, pero nunca puedes engañar a muchos. Al final la ciudadanía se va a dar cuenta realmente de dónde están sus problemas, quién intenta solucionarlos o quién aporta realmente mejoras en su vida.

Ayuso está en una estrategia para llegar a La Moncloa, que es donde quiere estar. Por eso confronta con Sánchez. Cree que es su enemigo natural y hay personas que le estorban en ese camino y son a las que pretende controlar el discurso o directamente quitarlas de en medio, como a Feijóo que se tuvo que dar veinticuatro horas para saber qué postura tiene que tener sobre el aborto.

P: Habla usted de que la gestión le va a pasar factura a Ayuso, pero lo cierto es que actualmente las encuestas casi dan una mayoría absoluta al PP. ¿Hay partido para la izquierda en Madrid? ¿Cree que el PSOE de Madrid va a recuperar el liderazgo de la izquierda que perdió en las elecciones de 2021?

R: A las encuestas de toda la vida les doy la fiabilidad justa. Depende de quien paga sale una cosa u otra. En el PSOE de Madrid estamos haciendo un trabajo serio. No vamos a entrar en esta campaña de titulares y de insultos porque la política es esgrimir tus argumentos con contundencia, con vehemencia y con firmeza. Ir a insultar es ir a despertar los más bajos instintos de la gente. Los políticos no estamos para eso, estamos para otra cosa: confrontar ideas y aportar soluciones. Tenemos que intentar explicárselo a la gente para cada que cada vez que hay elecciones elija lo que libremente quiera sin intentar intoxicar el debate.

Estoy convencida que el Partido Socialista va a recuperar el liderazgo de la izquierda y que hay mucho partido. En la izquierda hay unas fuerzas políticas que están pendientes de lo que le preocupa a los ciudadanos. Hay una posibilidad muy seria de un gobierno progresista en la Comunidad de Madrid.

P: Las encuestas son fotos fijas, pero lo que es seguro es que cada vez el escenario se acerca más a los pactos y ya no hay mayorías absoluta ¿Es necesario un gran acuerdo de la izquierda en Madrid?

R: Lo posible, por supuesto. Sin ninguna duda. Estamos pendientes desde ópticas distintas de lo que necesita la ciudadanía. A nuestra izquierda está un origen más anticapitalista, más del Partido Comunista y llega hasta nosotros que somos socialdemócratas.

Tenemos claro el diagnóstico de qué pasa en Madrid y cuáles son las dificultades que tiene realmente la gente en Madrid. A la gente se le ha querido vender que las cosas aquí son muy difíciles porque es el precio que pagar por vivir en Madrid como si fuera algo inexorable e inevitable. Y no es verdad. Aquí las cosas son difíciles porque tenemos un gobierno sin ambición y que está en otra cosa. Estamos cansados de proyectos que se anuncian como el de 250 millones de ayudas a familias que luego cuando se trasladan con cifras a los presupuestos se quedan en 35 y de esos, además, no se ejecutan la mayoría.

La ayuda a las familias es únicamente en determinados umbrales de renta y siempre para menores de 30 años y solo hasta que los niños tienen dos años ¿Saben la edad en la que normalmente estamos embarazando? ¿Cómo que la ayuda se corta a los dos años? Yo que tengo hijos más mayores, te puedo decir que realmente cuando empiezas a gastar es cuando se hacen mayores. Algún día se sabrá el daño que ha hecho Bizum a las familias españolas.

P: Otro de los temas que ocupa la actualidad es el caso 'Mediador'- Tanto el PSOE a nivel nacional como como Juan Lobato, secretario general del PSOE de Madrid, han condenado los actos y se están depurando responsabilidades. De hecho, Lobato ha hablado de que está "en contra de todo tipo de corrupción" y de "situaciones indeseables que se pueden dar" incluso en su propio partido. ¿Qué opinión le merece?

R:  Pues que es un asco. Se te cae la cara de vergüenza cuando ves que es una trama de comilonas, de prostitutas y puteros. En fin, es algo bastante cutre. El PSOE en 16 horas decidió que esta persona entregara el acta, se tramitó la baja inmediata en el partido y se puso a investigar. En otros partidos políticos al que denunció sería al que hubiera sido fusilado políticamente y se hubiera intentado echar una cortina de humo".

"Esto es el caso de un diputado socialista que tenía una red con un mediador, donde había unas comisiones, donde podía haber unas cenas. Pero está saliendo al mismo tiempo que conocemos el alcance de la connivencia entre cargos del Ministerio del Interior que habían organizado la operación Kitchen con jueces. Me gustaría recordar, porque como se nos acumulan todos los casos y con los nombres ya no sabemos lo que es nada, que el caso Gürtel eran las mordidas y las comisiones de una trama de financiación de un partido político tal y como está acreditado en sede judicial y que la Kitchen era el montaje policial para intentar tapar la Gürtel.

Esta semana pasada nos hemos despertado con la noticia de que el segundo de Jorge Fernández Díaz, el secretario de Estado de Seguridad, se tiró un año cruzándose whatsapps con el presidente de la Audiencia Nacional. Le decía 'tranquilo', 'me entero', 'te cuento'. Y cenaba en su casa. Me resulta inaudito, absolutamente inaudito. Eso sí que es preocupante, porque eso sí que carcome los cimientos de las instituciones y la confianza ciudadana. Lo que se está poniendo de manifiesto del caso Kitchen es que había una policía patriótica, pero es que ahora parece que había también una justicia patriótica. Es alarmante porque lo que tenemos que hacer es dar confianza a la gente. Hay otros que se van cruzando whatsapps durante más de un año y cenan en casa del presidente de la Audiencia Nacional".

Feminismo, ¿es suficiente?

P: En los últimos años se está hablando mucho de Feminismo. Además, queda muy poco para el 8 de marzo. ¿Qué falta por hacer? Una de las medidas a las que se ha referido es que una de las propuestas del PSOE de Madrid con la que concurre a las elecciones tiene que ver con la intención de equiparar a las mujeres que afrontan la maternidad en solitario con las familias numerosas.

R: Eso es. Para nosotros es una realidad impresionante. Hay mujeres que afrontan la maternidad solas desde el inicio, que se encuentran solas después en mitad de la crianza, que tienen una realidad muy dura, muy desafiante. Criar, trabajar, sacar adelante, a veces sin ayuda a tus hijos. Creemos que ahí tenemos que poner el foco como sociedad para intentar arropar. Y de la misma manera que las familias numerosas hay que ampliar esas ayudas.

Cuando estamos hablando de feminismo, aparte de un discurso político que para nosotros está en nuestra esencia como es la igualdad lo tenemos que ampliar y aplicar a un montón de realidades distintas. Queremos poner el foco en que el feminismo es la ayuda y la apuesta en los sectores que de verdad liberan y empoderan a una mujer, que son trabajo de calidad, una realidad de ayudas o de asistencia y de educación de 0 a 3 años universal, donde estamos pensando además en medidas mientras llegamos a una política de conciliación que habrá que elaborarla fundamentalmente de acuerdo con las empresas y donde habrá que tener unas negociaciones.

En el PSOE pensamos en políticas de apoyo directo y real de ese feminismo material funcional, que es lo que te permite de verdad competir y no tener que renunciar porque lo que nos está ahora mismo diferenciando a las mujeres son los cuidados. Cuando alguien se pone enfermo somos las que normalmente asumimos ese rol con los más pequeños y con los mayores.

Los mayores son otras personas para las que tenemos que labrar esa asistencia de proximidad en la Comunidad de Madrid. Hay mucha gente que cuando se jubila lo primero que piensa es en irse de Madrid. Nos estamos encontrando con que la Comunidad de Madrid, con estas políticas neoliberales de sálvese quien tenga, no es ni comunidad ni para jóvenes ni para mayores. No estamos hablando solo de residencias. Desde los 65 hay muchísima vida y sobre todo hay muchísimo talento y lo que tenemos que hacer es posibilitar esas ayudas que empoderan y hacen que los cuidados no sean el lastre que a nosotros nos pone el techo de cristal y nos limita.

P: Usted es una de las personas que más aboga por hacer políticas para los mayores porque parece que no hay más vida después de los 65. ¿Qué propone?

R: El alargamiento de la calidad y la esperanza de vida hace que tengan los mayores un número de años con un talento y una experiencia que no podemos desperdiciar. Estamos pensando programas de mentoring, de gente que a lo mejor quiere dejar su negocio o quiere dejar su actividad profesional, pero le apetece mucho colaborar con gente joven y darle y transmitirle y enseñarle y colaborar.

Hay programas de voluntariado en el ámbito cultural donde hay muchísimo profesor, muchísimo experto en arte, que es una gozada y que está dispuesto a hacer esas actividades durante unas unas horas para transmitir todo ese conocimiento. También hay que empezar a dar soluciones a gente que quiere seguir viviendo en su casa, pero que a lo mejor necesitarían una pequeña ayuda en cuanto a que le puedan facilitar la comida o que puedan tener alguien que me eche un ojo que venga a verles.

P. En Madrid, ¿el modelo que impera ahora mismo es el de 'la gente de bien'?

R: Ha sido una traición a su subconsciente, porque esa expresión de la gente de bien me recuerda a mi infancia. La expresión familia de bien o las familias de toda la vida hacían que se entendiera muy bien de quién estabas hablando. Hay que hablar más de la buena gente, la que se sube al metro a las siete de la mañana a pelear por su familia, por su realidad, por pagar su hipoteca, por no deberle ni un duro a nadie, que no hace daño, que cumple las normas y que está ahí pico y pala trabajando.

Las políticas que se aplican para la gente de bien aquí en la Comunidad de Madrid básicamente consisten en la gente que tiene dinero. La política de ayudas que hay en Madrid no es de un programa de gobierno serio. No pueden ser deducciones fiscales para ricos vengan de donde vengan. 

Tenemos un problema de medio ambiente somos un sumidero energético que produce una cantidad ínfima de energía mientras estamos tragando toda la que se genera alrededor. Nadie hace nada. Si tú das una ayuda es para que esos que vienen colaboren o hagan unas actividades que te parece que benefician al bien común. ¿Dónde están ya las expresiones del bien común y el interés general? ¿Dónde está la sensación de que esta es una comunidad que acoge? Cuando vine aquí a Madrid había una expresión que me gustaba mucho que era 'Madrid la suma de todos'. Si os dais cuenta ha desaparecido. Ya no está. Madrid sigue siendo el producto del esfuerzo de todos, el problema es que el resultado se lo quedan muy pocos. El esfuerzo sigue siendo de todos, pero el reparto de la tarta se hace entre cuatro.

Lo que reclamamos es que eso no puede ser. Si es verdad que somos la comunidad más rica se tiene que notar en los mejores servicios públicos, en las mejores condiciones y en las mejores apuesta para todos.