“Hay que tener en cuenta que en el momento más complicado de la crisis, cuando había más contagios, no llegamos a ocupar el 100% de las camas. Y ahora no nos vamos a encontrar en esa circunstancia”. Esta fue la reflexión que realizó la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en la comentada entrevista que concedió el pasado 10 de mayo al periódico 'El Mundo'.

Unas palabras que pasaron ciertamente desapercibidas, y que formaban parte de la ofensiva del Gobierno madrileño contra del Ejecutivo central para poder lograr pasar a la fase 1 de desescalada. Sin embargo, estas declaraciones han vuelto al foco mediático casi un mes después, tras las distintas informaciones que han ido saliendo en los últimos días y que destapan que Ayuso ordenó a los hospitales, durante los peores días de la pandemia, restringir al máximo la posibilidad de trasladar a un anciano con síntomas de coronavirus desde los geriátricos.

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En un primer momento, la presidenta madrileña se defendió de esta información y aseguró que el Protocolo fijando qué ancianos podían ser derivados a los hospitales, se envió el 25 de marzo y todos los documentos anteriores son simplemente “borradores”. Sin embargo, su propio consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, reconoció haber enviado “por error” dichas indicaciones.

Esta negligencia, realizada por “error” según la versión oficial de la Comunidad de Madrid, ha sido interpelada por Alberto Reyero, miembro de Ciudadanos y consejero de Políticas Sociales en el Ejecutivo liderado por Isabel Díaz Ayuso. Las tiranteces del núcleo duro de los populares con Reyero han explotado después de que se hayan filtrado los correos electrónicos que el dirigente naranja envió a la cúpula del mando único​ en Madrid avisando de lo grave de la actuación que se estaba llevando a cabo.

“Incurriríamos en una discriminación de graves consecuencias legales”, “muchos residentes fallecieran de forma indigna” o “si esto lo aplicamos a personas con discapacidad, la situación tiene una componente más grave” fueron algunos de los mensajes lanzados a modo de SOS por Reyero, quien ha permanecido totalmente aislado en la gestión durante esta crisis. Encargado de las residencias al principio de la crisis, su mando fue retirado después de que solicitase antes que nadie ayuda a la UME y exigiera la medicalización de los centros de ancianos.

Más de 6.000 ancianos han fallecido en las residencias madrileñas

Cabe destacar que en la Comunidad de Madrid un total de 6.007 usuarios de residencias han fallecido por coronavirus desde el inicio de la pandemia hace casi tres meses, según los datos de la Consejería de Políticas Sociales, Igualdad, Familias y Natalidad facilitados al Gobierno central. Los datos se refieren a todos los centros de servicios sociales de carácter residencial autorizados en la región y que prestan atención a los sectores de personas mayores, personas con discapacidad y personas con enfermedad mental.