En la tarde del jueves, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado la emergencia sanitaria internacional ante la epidemia del coronavirus de Wuhan después de que se haya cobrado la vida de 170 personas en China. Desde el año 2009, el organismo ha decretado este estadio hasta en cinco ocasiones sin contar esta última.

Nuestra mayor preocupación es el potencial de que el virus se expanda a países con sistemas sanitarios más débiles y que estén poco preparados para hacerle frente”, admitió Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS. Además, agregó que el motivo de la declaración no es lo que ocurre en China, sino que lo está sucediendo en otros estados.

El coronavirus se ha cobrado la vida de 170 personas en el último mes y ha dejado por el camino más de 7.000 casos de contagios. Ante estas cifras, la OMS ha reaccionado y ha activado la emergencia sanitaria internacional por sexta vez, como ya hiciera en 2009 ante la epidemia masiva de la gripe H1N1, más comúnmente conocida como gripe A.

La gripe porcina de 2009

Esta infección respiratoria aguda y muy contagiosa se conoció también como la gripe porcina. Se trataba de un virus gripal de tipo A que padecen los cerdos y una cepa de esta generó el caos en el mundo entero, desembocando en una pandemia que no firmó cifras altas de mortalidad en comparación con su fácil distribución.

Los dos primeros casos en todo el mundo tuvieron lugar en Estados Unidos. Sin embargo, germen del brote fue México. La gripe A se extendió a lo largo de sendos países en sus primeros meses de actividad. Sin embargo, el número de personas contagiadas que no habían viajado a ambos enclaves aumentó.

El 11 de julio de 2009, la OMS estableció el nivel de alerta 6, correspondiente al periodo de máxima actividad de la gripe H1N1. Es decir, “pandemia en curso”. No fue hasta el 10 de agosto de 2010 cuando el organismo estableciera el periodo pospandémico, arrojando unas cifras de infectados que bordeaban los 60 millones en todo el planeta y más de 12.000 muertes.

Emergencia por Polio en 2014

La Poliomielitis es una enfermedad vírica que incide a los nervios y puede conducir a una parálisis parcial e incluso total. Una afección que padecen, sobre todo, los niños que residen en zonas más pobres y vulnerables. El virus de la Polio se propaga por contagio directo – persona a persona – o a través de fluidos (mocos y flemas) y heces.

En mayo de 2014, la Organización Mundial de la Salud estableció el estadio de emergencia sanitaria mundial al incrementarse los casos de infectados en un 183%. La comparación con el resto de epidemias en el número de infectados es bastante pobre, pues se dieron 68 en 10 países distintos. Sin embargo, al tratarse de una patología erradicada, se aumentó el nivel de alerta.

Alertas del Ébola en 2014 y 2019

El virus del Ébola es letal y, a diferencia de la gripe, no se contagia a través del aire, sino que se contrae al entrar en contacto con los fluidos corporales del paciente afectado. Antes del año 2014 se dieron algunos casos localizados de esta enfermedad en Sudán y la República Democrática del Congo. Desde ese momento, se han reproducido hasta 30 brotes.

La enfermedad no es contagiosa hasta que aparecen los primeros síntomas, entre 2 y 21 días. La OMS explica que los primeros signos de afección son “fiebre, debilidad intensa, dolores musculares, vómitos, diarreas, erupciones cutáneas, disfunción renal y hepática y, en algunos casos, hemorragias internas y externas”.

El organismo declaró el estado de emergencia sanitaria por el Ébola hasta en dos ocasiones. Una en 2014, cuando un brote con origen en Guinea se propagó a diversos países del África Occidental e incluso traspasando fronteras continentales, como es el caso de España con los misioneros repatriados y el mediático caso de la auxiliar de enfermería Teresa Romero.

Este brote tuvo su origen en diciembre de 2013 y, hasta tres años después, la OMS no declaró el estadio pospandémico. Esta epidemia le costó la vida a 11.300 personas de las 28.000 que la contrajeron.

Sin embargo, seis años después, el organismo volvió a establecer la alerta sanitaria internacional ante un nuevo brote que comenzó en la región de Kivu (República Democrática del Congo) y, a día de hoy, no se ha retirado esta declaración. En junio del pasado curso se cifraron 2.145 casos y más de 1.596 fallecidos en dicho país.

El virus del Zika

La picadura del mosquito Aedes generó una alerta aún mayor que la de la gripe porcina. El animal transmitía la enfermedad conocida como Zika, aunque también se puede propagar a través de relaciones sexuales e incluso de madres a hijos durante la gestación.

Su origen está en África en la década de los 50, pero un brote proveniente de Sudamérica, América Central y el Caribe entre 2015 y 2016 puso en jaque al mundo. El virus se ha extendido en la actualidad lejos de estos dos continentes, puesto que la picadura del mosquito Aedes ya no es el único medio de propagación.