La Guardia Civil de Zaragoza busca a Benito Ortiz Perea, preso que se fugó la pasada madrugada aprovechando su traslado desde el hospital Miguel Servet hasta la cárcel de Zuera.

Este preso está considerado como muy peligroso al formar parte de uno de los clanes más peligrosos de Aragón.

A sus 61 años, cumple una condena de 25 años y 8 meses de cárcel por el secuestro de una mujer en el año 2046, pero también por un atraco en el que resultó herido el dueño de la tienda, una armería de Huesca.

Ortiz Perea aprovechó un traslado, desde el hospital al que había acudido para pasar consulta. Aunque la ambulancia estaba escoltada por un coche de la Guardia Civil, cuando esta se detuvo a la espera de que se abrieran las puertas de la prisión, aprovechó para escaparse.

Lo hizo justo cuando se retiró la escolta de la benemérita. Se quitó los grilletes y echó a correr. Desde entonces, desde la pasada madrugada, la Guardia Civil está tras su pista desplegando un amplio dispositivo de búsqueda.