Con la propuesta de Donald Trump de la toma de control de Groenlandia y el Canal de Panamá, el presidente electo no es capaz de negar el uso de “fuerza militar y económica” para obligar las propuestas anexiones en una rueda de prensa. Afirma que necesita ambos lugares para “seguridad económica”, una aseveración preocupante dado que implicaría la toma forzosa de territorio autónomo perteneciente a Dinamarca y a Panamá respectivamente.
Además, Trump ha nombrado a Ken Howery como embajador de Dinamarca por segunda vez, empresario que comparte las intenciones del presidente electo. "Por motivos de seguridad nacional y libertad en todo el mundo, Estados Unidos considera que la propiedad y el control de Groenlandia son una necesidad absoluta", ha manifestado en Truth Social, su propia red social.
El primer ministro de Groenlandia, Mutue Egede, ha rechazado categóricamente que la isla esté en venta, aunque sí se ha mostrado abierto "a la cooperación y al comercio con todo el mundo", abundando en que Groenlandia debe poder actuar fuera del paraguas y con cierta independencia de Copenhague, recoge el diario Jyllands-Posten.
"Groenlandia es nuestra. No estamos a la venta ni nunca lo estaremos (...) Sin embargo, debemos seguir estando abiertos a la cooperación y al comercio con todo el mundo, especialmente con nuestros vecinos, dado que todo el comercio no puede pasar por Dinamarca", ha zanjado. Varios diputados de Groenlandia han tachado de "muy irrespetuoso" el discurso de Trump, quien consideran que vuelve a la carga con sus declaraciones sobre comprar la isla. Paralelamente, el presidente de Panamá también ha rechazado las propuestas de Trump en un comunicado que ha retuiteado de Astrid Salazar.
Gobierno del presidente @JoseRaulMulino afirma que no ha sostenido ningún tipo de contacto con Trump
— Astrid Salazar (@as_salazar) January 8, 2025
El Gobierno del presidente de la República de Panamá, José Raúl Mulino, no tuvo ni ha sostenido ningún tipo de contacto, formal o informal, con el presidente electo de los… pic.twitter.com/P0UfkxLDYK
Durante su primer mandato, Trump manifestó en varias ocasiones su deseo de comprar Groenlandia en un momento en que China había redoblado sus inversiones en la isla danesa. La Administración estadounidense logró en 2018 impedir que Pekín financiara la construcción de tres aeropuertos en Groenlandia.
Con una población aproximada de un as 56.000 personas, Groenlandia es una parte autónoma del Reino de Dinamarca, y aunque su Gobierno decide sobre la mayoría de asuntos internos, Copenhague se encarga de la política exterior y la seguridad. Estados Unidos cuenta con una base militar en Thule, el destacamento más septentrional del Ejército estadounidense y pieza clave en su sistema global de radar.
¿Por qué quiere comprar Groenlandia?
No es la primera vez que un país ha buscado tomar propiedad de la isla del norte del hemisferio. Desde 1867, Estados Unidos ha considerado o buscado comprar Groenlandia, según Axios, algo explicado por la abundancia en minerales del país.
Es una isla minera desde hace tres siglos y tiene depósitos de carbón, oro, plata, cobre, plomo, zinc, grafito, olivino, criolita y mármol, de acuerdo con el Instituto Groenlandés de Recursos Naturales. Además de las sospechas de que tiene grandes cantidades de aceite, a partir de finales de 2013 se empezó a permitir la extracción de uranio y otros materiales radioactivos, algo valioso en el mercado internacional.
Debido a su riqueza en recursos naturales, varios países miran hacia el país como una solución para una multitud de problemas (como el dinero, la energía renovable y la no renovable). Rusia ha estado reclamando territorio del Ártico exitosamente, recibiendo en 2023 recomendaciones de aprobación sobre la mayoría de sus reclamaciones de la zona central del Ártico de la comisión de Naciones Unidas (ONU) de Límites de la Plataforma Continental, según Arctic Today.
China también ha sido señalado como país a vigilar por sus intereses en recursos naturales, apuntala Axios. La dependencia de China en minerales críticos -esenciales para su estratega de dominación del mercado de energía renovable como los paneles solares y los coches eléctricos- convierte a Groenlandia en un activo importante para la superpotencia. Pese a que el país sufra de una falta de infraestructura debido a su población limitada y su clima severo, China es conocida por su intención de invertir en esto a través de iniciativas como, por ejemplo, la de la Franja y la Ruta.
Trump añade a Panamá en su lista de objetivos
Además de la apuesta del presidente electo por Groenlandia, ha añadido a Panamá a su lista de países a adquirir para su mandato. Ha señalado que Panamá está “timando” a Estados Unidos en el Canal de Panamá: “Si los principios, tanto morales como legales, de este magnánimo gesto de entrega no se siguen, entonces exigiremos que el Canal de Panamá se devuelva a Estados Unidos totalmente, rápidamente y sin preguntas”, según AP.
El presidente panameño, José Raúl Mulino, ha respondido a la exigencia del futuro presidente diciendo que “cada metro cuadrado del canal le pertenece a Panamá y continuará siendo así”. Trump replicó en Truth Social: “¡Eso ya lo veremos!”.
El canal fue una zona bajo disputa el siglo pasado entre Estados Unidos y Panamá, pero se firmó un tratado en 1977 que le concede a Panamá la propiedad del estrecho. La reapertura de este conflicto parece ser otra de las estrategias de Trump que resulta en un agravamiento innecesario de relaciones internacionales y una posible guerra comercial.
¿Quién es Ken Howery?
Howrey sirvió como embajador de Dinamarca durante el primer mandato de Trump sin previa experiencia política. El presidente electo le ha recomendado por servir “brillantemente” y por mejorar la "defensa, seguridad y la cooperación" entre ambos países.
El nuevo embajador también es uno de los cofundadores de PayPal, junto con Peter Thiel, Luke Nosek, Elon Musk y Max Levchin, una experiencia que le vincula con el futuro director de la Agencia de Eficacia Gubernamental y que Trump ha utilizado como ejemplo de su eficacia como político. "Ken hará un magnífico trabajo representando los intereses de Estados Unidos", ha remachado el magnate respecto a un "empresario, inversor y servidor público de renombre mundial" que en su faceta privada "ha convertido la innovación y el liderazgo tecnológico estadounidense en historias de éxito mundial".