''Los que hemos sido críticos con la forma de actuar de la directiva estamos siendo acallados'', denuncia Ángeles Ribes, la portavoz de Ciudadanos en Lleida, que ha plantado cara a Arrimadas y continuará al frente del grupo municipal, pese a la orden de cese de la directiva.
''Nos estábamos temiendo que esto supusiera el inicio de una purga a todos aquellos que somos críticos de cara a dejarles el espacio expedito para 2023'', ha afirmado a ElPlural.com Ribes, miembro de Renovadores, el grupo de Ciudadanos más crítico con la dirección.
Para la portavoz esta campaña se inicia por su análisis sobre el camino del partido. ''Tras la debacle de las elecciones al Parlament de Cataluña escribí un artículo donde pedía que se iniciara un periodo de reflexión, de autocrítica y se asumieran responsabilidades. Después de eso se me ha ido apartando poco a poco'', asegura Ribes.
Un lavado de cara
La concejala destaca que esto haya sucedido dos días después del Congreso Nacional de Ciudadanos, con el lema ''Liberales''. ''No ha traído ningún tipo de reflexión ni de autocrítica, sino todo lo contrario. Es un lavado de cara. Precisamente un partido que quiere hacer gala del liberalismo, debería dejar hablar a aquellas personas que tenemos un pensamiento crítico. Están haciendo lo contrario'', afirma.
''No me parece el proceso adecuado para un partido que pretende ser una pieza clave dentro de la gobernabilidad de España'', sentencia Ribes, que va más allá y plantea la posibilidad de que esto merme el futuro de la formación.
''Todos los principios con los que nace el partido, al final no va a haber quien los defienda'', asegura, y añade: ''Es una reafirmación de que las cosas han pasado, aquí no se ha cometido ningún error y vamos a seguir haciendo lo mismo. Al final puede tener consecuencias desastrosas para este proyecto''.
¿Cómo empezó?
Tras la convención del partido el pasado fin de semana, el grupo municipal recibió un correo de la directiva donde se les comunicaba que Ribes debía dejar su papel de portavoz para pasar a manos de la edil María Burrel. Un cambio que tendría que ser efectivo antes del próximo viernes.
Sin embargo, la formación naranja en Lleida lo sometió a votación y se decidió que la hasta ahora portavoz en el Ayuntamiento continuara al frente. ''Los grupos municipales tienen capacidad de autoorganizacion y las decisiones se toman por votación. Es lo más limpio y honesto'', afirma Ribes al respecto.
Sobre si ''desobedecer'' las órdenes de la cúpula puede llegar a tener secuelas, Ribes ''no lo descarta''. ''Dentro del grupo no sé. Seguramente yo tenga consecuencias personales, es muy probable. Pero yo me reservo todas las acciones para defender todo mi trabajo y trayectoria desde el año 2006'', ha afirmado a este periódico.
El apoyo de otros críticos
Tras denunciar el intento de ''purga'', la concejala ha recibido cientos de mensajes de apoyo de otros miembros del bloque crítico de Ciudadanos. ''Me alegro, me reconforta y hasta me emociona ver que la lucha de tantos años se me reconozca. Me toca mucho el corazón'', ha asegurado Ribes, que agradece el soporte recibido.
''Yo no tenía una ambición política. Tengo 53 años y llevo en política solo 15. Eso hay mucha gente que lo valora y lo reconoce y me da mucha satisfacción y mucho orgullo, sobre todo en estos momentos tan duros'', ha sentenciado. Y es que muchos compañeros han defendido a Ribes, de quien destacan el "compromiso y lealtad" con el partido.
Pedro Miret, el único representante de Renovadores miembro del Consejo General del partido, ha lanzado un dardo a la dirección: "Sólo con liderazgos salidos de las bases conseguiremos seguir hacia delante". En un mensaje en Twitter ha respaldado a la portavoz y ha señalado que "los liderazgos se ganan, no se imponen".
Ángel Guillem, concejal de Cs en La Garriga, ha afeado que esta sea la primera reacción tras la convención del pasado fin de semana. ''Lo mismo me envían a mi otro correo en forma de cabeza de caballo. En serio ¿este movimiento torpe era necesario por parte de la dirección de mi partido? ¿Para esto sirvió la convención?'', ha afirmado en un tuit.
Ibáñez, portavoz de Renovadores, ha advertido del intento de censura. “Con semejante currículum, esta decisión solamente puede ser vista como una purga hacia una persona que se ha mostrado crítica con la dirección, aunque lo haya hecho desde la más absoluta lealtad”, ha insistido.
