El Partido Popular ha celebrado este viernes una cita importante. El líder de la formación, Alberto Núñez Feijóo, se ha reunido con sus barones territoriales con el objetivo de mostrar unidad ante los intentos de "división" de los que culpan al Gobierno que lidera Pedro Sánchez así como mostrar su rechazo a la financiación singular de Cataluña y exigir medidas contra la crisis migratoria.
Un evento popular que le ha servido al gallego para poner encima de la mesa algunas peticiones al Ejecutivo central. Entre ellas, dos pilares básicos: "abandonar el cupo independentista" y la entrega "a fondo perdido" de 18 mil millones de euros de los fondos europeos Next Generation para las Comunidades Autónomas. A los suyos les ha pedido ir "todos a una" aunque ya ha tenido voces discordantes.
Feijóo convoca a sus barones contra Sánchez
En un encuentro formal en el Palacete de los Duques de Pastrana, Feijóo ha liderado toda una cumbre de presidentes populares con la presencia de los 11 dirigentes autonómicos más los de Ceuta y Melilla, y el vicepresidente de Canarias, quienes han rubricado un documento conjunto para comprometerse a tratar el llamado cupo catalán y la autonomía fiscal únicamente en "foros multilaterales".
"Frente a la sumisión del PSOE al proyecto separatista, defendemos un proyecto de unidad, igualdad y solidaridad para todos los españoles", ha escrito la cuenta oficial del PP nacional en X, la red social antes conocida como Twitter. Y es que precisamente una imagen de alianza sin fisuras es la que ha pretendido exhibir Génova este jueves, un día después de presentar un recurso de constitucional a la ley de amnistía.
🔵 Cumbre de Presidentes autonómicos del PP presidida por @NunezFeijoo.
— Partido Popular (@ppopular) September 6, 2024
Frente a la sumisión del PSOE al proyecto separatista, defendemos un proyecto de unidad, igualdad y solidaridad para todos los españoles. pic.twitter.com/X1lOkMhY17
En concreto, los populares han suscrito una condena total a "la artimaña de la bilateralidad con los separatistas con la que el Gobierno de España pretende camuflar su determinación de construir un país con ciudadanos de primera y de segunda", al tiempo que se han comprometido a "no romper la multilateralidad en ningún supuesto".
"Deben abordarse entre todos, a través de los cauces democráticos, para asegurar la igualdad de todos los españoles en el acceso a sus servicios públicos: no mediante encuentros arbitrarios, a capricho del Gobierno central y a puerta cerrada", se puede leer en el documento. "Todos a una", han venido a decir.
Así lo ha dicho textualmente el dirigente en su intervención. Y es que, según Feijóo, el encuentro "va más allá" y demuestra que en el PP "hay una alternativa de cambio sólida, de valores y de transformación". "Estamos aquí el primer partido de España para devolver a la política el significado de servicio público", ha sostenido para defender que ofrecen "principios, sentido común, solidaridad y esperanza".
"España es mucho más que la connivencia y la convivencia de unos pocos, más que la ambición de un solo hombre y más que su gobierno. Aquí están 14 gobiernos que sí representan a su nación", ha afirmado para cargar contra Sánchez y para posicionarse contra quien "está dispuesto a purgar a quien no se someta" y contra los "abusos de poder y de confianza".
Abandonar el cupo y 18 mil millones de euros
El dirigente popular ha dado cuenta del acuerdo que han suscrito los 14 populares para "el 70% de la población que representan" pero "también en nombre de los catalanes, engañados por los socialistas". "Sí es necesario un nuevo modelo de financiación y más recursos para todas las comunidades, mucho más que los 400 millones que ha prometido", ha dicho, en referencia al anuncio de Sánchez.
A su juicio, "sí da soluciones una actualización del sistema de financiación pactada en los foros en los que estamos todos, libre de sospechas y provechos ideológicos del independentismo o personales por el socialismo. Es el compromiso del PP. Nos comprometemos a que lo que es de todos se dialogue entre todos", ha señalado Feijóo en esta línea.
Exigimos parar el cupo independentista e inyectar a las CC.AA. 18.000 millones de los fondos Next Generation.
— Alberto Núñez Feijóo (@NunezFeijoo) September 6, 2024
En el @ppopular no caeremos en la bilateralidad tramposa que busca el Gobierno para el nuevo sistema de financiación de los servicios públicos de todos los españoles. pic.twitter.com/ygB3SCCwtW
Sin embargo, el dirigente popular ha puesto encima de la mesa unas peticiones al Gobierno que pasan por "abandonar el cupo independentista" para que el Gobierno y los independentistas "vuelvan al mínimo principio de lealtad constitucional", y la convocatoria de la Conferencia "para escuchar a los representantes del estado y no solo a las imposiciones de una minoría".
Pero también ha exigido una "inyección" de dinero para las Comunidades Autónomas, solicitando a fondo perdido 18 mil millones de euros de unos fondos europeos Next Generation que Sánchez "no ha sido capaz de ejecutar", ha sostenido antes de proponer también la creación de "un fondo transitorio" para "reducir la infrafinanciación y garantizar la igualdad en la prestación de servicios".
Ayuso, la nota discordante de Génova
Pero aunque la financiación ha sido el eje central del evento popular, lo que ha marcado este cónclave ha sido el pulso que ha intentado echar Isabel Díaz Ayuso a la cúpula nacional. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha querido marcar el paso pidiendo a los barones que no se sienten con Pedro Sánchez de forma bilateral mientras no se celebre una Conferencia de Presidentes, como solicita la formación.
Y es que asegura que va a intentar "sobornarles" en La Moncloa intentando "blanquear la ruptura territorial". "Yo les pido a los presidentes de las comunidades autónomas que no compren la estrategia de Sánchez y de su cómplice Montero, y que si hay una reunión sea para ir todos juntos porque este Gobierno va a intentar sobornarnos uno a uno en La Moncloa", afirmó este jueves en un acto en la capital.
Estas declaraciones fueron raudamente contestadas por Génova, que sentenciaron que sus barones son quienes tienen que decidir si acuden a las reuniones con Sánchez o no. "El PP nacional ni inducirá ni prohibirá ninguna reunión", han indicado fuentes de la cúpula de la formación. Y parece que muchos de ellos ya han tomado su decisión, a la luz de sus declaraciones a favor de hablar con el presidente.
Sin embargo, Ayuso también ha intervenido este viernes tras el encuentro, en el que sí se ha acordado precisamente lo que ella solicitaba. De hecho, ha sido la primera dirigente regional en hacerlo tras una reunión "que no podría celebrar Sánchez porque no es capaz de unir a cuatro presidentes autonómicos", ha dicho nada más comenzar un relato plagado de malos augurios.
Desafíos inmensos, dinero que no existe o "años económicos durísimos" están por delante, según la lideresa, que ha sostenido que "la productividad se está hundiendo". "Sánchez ha decidido romper la caja común y asfixiarnos en debates territoriales que nadie ha votado en las urnas", ha manifestado. Pero la presidenta madrileña ha querido destacar sobre todo la "unidad absoluta" del PP en el debate de la financiación.
López Miras o Moreno Bonilla sí hablarán con Sánchez
"Lo tenemos claro. Mientras no haya una reunión conjunta entre todos los presidentes, no vamos a caer en la trampa y hablar por partes de lo que es de todos", ha sostenido para asegurar después que en esas citas les van a intentar "engañar". "Somos el único partido que representa a la España regional", ha manifestado para terminar con un "Vamos a ir todos a una".
Con todo, no todos los barones parecen querer seguir el compromiso de no hablar con Moncloa. Ya el presidente murciano Fernando López Miras ha defendido verse con Sánchez para hablar de asuntos que afectan a su comunidad, aunque bajo la advertencia de "que no cuente" con su región si lo que busca es "establecer una negociación bilateral con los territorios para perjudicar a unos frente a otros".
"Estoy deseando que me convoque para sentarme con él y poder decidirle esto a la cara" que su comunidad está "infrafinanciada", ha reivindicado este jueves. En la misma línea lo ha dicho este viernes, como ha hecho Juan Manuel Moreno Bonilla, presidente de la Junta de Andalucía, quien ha afirmado que "no va a aceptar la bilateralidad" pero va a hablar "con todo el mundo".