El Partido Popular ha jugado sus cartas política y mediáticamente desde el inicio de la nueva legislatura con motivo de la amnistía y el papel que está teniendo el expresident de la Generalitat catalana Carles Puigdemont en ella. Desde los resultados de las elecciones generales del 23 de julio hasta prácticamente estos días, se han dado una consecución de hechos que han protagonizado la agenda política de los últimos meses y por las que se han dejado entrever los consecutivos cambios de parecer de los de Alberto Núñez Feijóo -con falsedades y medias verdades de por medio- con respecto a los contactos mantenidos con Junts y las cuestiones que se plantearon sobre la mesa.

Desde los resultados del 23J y la fallida investidura de Feijóo vino, a posteriori, la que sí salió adelante con Pedro Sánchez a la cabeza; un periodo convulso en términos políticos en el que los contactos entre formaciones estuvieron a la orden del día y, pese a los intentos por silenciar o minimizar los acercamientos con Junts, acompañados de las críticas hacia los socialistas por hacer lo mismo, han terminado por conocerse públicamente. A la par, cabe sumar la consiguiente tramitación parlamentaria de la Ley de Amnistía pactada entre PSOE y Junts -aún en curso- y una de las novedades que han marcado la actualidad en las últimas horas: Feijóo contempló el indulto a Puigdemont, pero el PP, menos de 24 horas más tarde, lo ha desmentido. 

Este podría ser un resumen en diagonal de las decisiones que han resultado de Génova 13 hasta la fecha, pero cabe ahondar en todas y cada una de ellas en detalle. Vamos por partes. 

Reunión PP-Junts tras el 23J

Al ser la primera fuerza política tras los resultados electorales del 23J, el PP comenzó la ronda de contactos con todas las formaciones políticas con representación parlamentaria para tratar de buscar apoyos para investir a Alberto Núñez Feijóo como presidente del Gobierno. Pese al silencio sepulcral que se mantuvo en primera instancia, Feijóo, a mediados de septiembre, reconoció una primera toma de contactos con Junts, aunque echó balones fuera asegurando que fueron los catalanes los que buscaron a los populares: “Hemos escuchado algunos de sus planteamientos, ahora que conocemos cuáles son los requisitos, le contestamos en directo que así no. Preferimos irnos a la oposición que aceptar unas condiciones inasumibles para la dignidad de España”, sentenció entonces en una entrevista para el programa ‘La mirada crítica’.

Días después, el PP siguió en la misma línea: reconoció los contactos, pero puntualizaron que no se hicieron “de manera formal”, ya que el encuentro entre Esteban González Pons (vicesecretario general del PP) y Jordi Turull (secretario general de Junts) se habrían reunido en casa de un empresario. Los vaivenes en estos meses estuvieron a la orden del día, puesto que los populares pasaron de señalar que no negaban “la legalidad” del partido de Puigdemont a reiterar que la negociación “no estaba sobre la mesa”.

No obstante, fue a principios del mes de enero cuando se confirmó que, efectivamente, sí se produjo una reunión entre ambas formaciones. El encuentro habría tenido lugar en un reservado del hotel Alma de Barcelona, poco después del 23J, y a aquella cita habrían acudido el presidente del grupo de Junts en el Parlament, Albert Batet; el portavoz de ese partido y concejal en Barcelona, Josep Rius; el presidente del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento, Daniel Sirera; y el experto en comunicación política Xavier Domínguez. “Nos pedía qué podíamos hacer para llegar a un acuerdo entre Junts y el PP y evitar que Sánchez continuara siendo presidente", destacaron.

Según desveló 'El Mundo', tras conocer la veracidad de esta reunión, se vivió un profundo malestar dentro de las filas del PP por parte de algunos barones autonómicos. Consideraron así un “error” haber mantenido los encuentros con el partido soberanista y señalaron nombres propios, como el de Esteban González Pons y Elías Bendodo. Pese a esta escisión interna, en todo momento, los populares han incidido en que Feijóo no llegó al Gobierno porque no quiso aceptar las reivindicaciones de Junts.

Junts rechaza la investidura de Feijóo

Como bien constata la hemeroteca de los últimos meses, la investidura de Feijóo a la Presidencia del Gobierno central resultó fallida a finales de septiembre al haber contado únicamente con el apoyo de sus filas populares, los 33 diputados de Vox, y los dos que suman Coalición Canaria y Unión del Pueblo Navarro (UPN) -uno cada uno-.

Por ello, pese a los intentos de aunar una mayoría más amplia manteniendo con Junts estos contactos, no surtió efecto debido a que los populares no aceptaron las condiciones de los catalanes que, posteriormente, se pusieron sobre la mesa a los socialistas. Pero este es un punto que vendrá más adelante.

A pie de calle: el PP clama contra la amnistía hasta en cuatro manifestaciones

Como consecuencia, y al materializarse los pasos a seguir que dio Pedro Sánchez para revalidar su cargo en Moncloa, Núñez Feijóo decidió responder a pie de calle en contra de la Ley de Amnistía, que por entonces tan sólo era un mero planteamiento en el marco de continuas negociaciones.

Los pesos pesados de Génova 13 comenzaron a impulsar desde septiembre sendas movilizaciones ciudadanas y de afines a su partido en varios puntos del país en contra de la amnistía, especialmente en Madrid. El punto de partida tuvo lugar a las puertas del Wizink Center de Madrid, un evento que posteriormente se vio secundado por otras concentraciones en Plaza España y el Templo de Debod y que, al tiempo, coincidió en tiempo y forma con las consecutivas manifestaciones violentas durante más de mes y medio a las puertas de la sede estatal del PSOE, en la calle Ferraz. Aunque estas últimas aupadas por Vox y agrupaciones ultra, al PP le constó tiempo y expresiones condenar algunas de las duras imágenes que trascendieron de estas.

Críticas a Yolanda Díaz por reunirse con Puigdemont, pero silencio con el líder del PPE

Volviendo al marco de las negociaciones ante la investidura de Sánchez, hubo un encuentro que generó el pronto enfado de las filas populares: el encuentro en Bruselas de Yolanda Díaz con Carles Puigdemont. Sin embargo, desde Génova guardaron silencio ante las mismas condiciones cuando la reunión con el expresident se dio con el líder del Partido Popular Europeo.

Ante la primera reunión, venida del Gobierno de coalición entonces en funciones, Feijóo puso el grito en el cielo y llegó a exigirle a Sánchez el cese de la vicepresidenta segunda, tachándolo de “anomalía democrática” y “bochorno”, ya que se sentó no a hablar, sino a “negociar” con un “prófugo de la justicia”.

Dos meses después, a finales de noviembre, Feijóo se negó a condenar el mismo escenario salvo por un detalle: la reunión la mantuvo el presidente del PPE, Manfred Weber, con Puigdemont también en la capital europea.

Acuerdo PSOE-Junts e investidura de Sánchez

En noviembre, trascendió la imagen en la que se veía al número tres de los socialistas, Santos Cerdán, en Bruselas con el equipo de Puigdemont con Jordi Turull a la cabeza y con la que se dio luz verde a dos aspectos fundamentales de esta legislatura: el apoyo de Junts a la investidura de Sánchez y el impulso de la Ley de Amnistía. En este punto, ambas formaciones constataron que “la situación política actual” permitió llegar a este acuerdo para abrir “una nueva etapa política y contribuir a resolver el conflicto histórico sobre el futuro político de Catalunya”, según se pudo leer en el pacto.

Como respuesta, el PP comenzó a maniobrar su respuesta desde la oposición continuando sus manifestaciones a pie de calle y sin ceder parlamentariamente ante la aprobación de la amnistía y las medidas del Gobierno.

PP, Vox y Junts tumban la Ley de Amnistía en el Congreso

Teniendo en cuenta todo el proceso parlamentario que ha tenido -y está teniendo- que traspasar la normativa en el Congreso y el Senado, pasando por distintas Comisiones de Justicia, fue el pasado 30 de enero cuando la Cámara Baja tumbó, por obra de Junts, la ley de Amnistía debido a que los neoconvergentes cumplieron su amenaza de no aprobarlo ante la negativa de respaldo de los socialistas a sus enmiendas a la norma.

Un hecho más que sustancial, ya que el voto de los de Puigdemont se sumó a los de la derecha por distintas razones, pero provocando el mismo resultado. Ahora, la ley ha vuelto a la mesa de negociación para poder llevarla de nuevo ante el Congreso próximamente para obtener su aprobación final. No obstante, está previsto que vuelva a verse retrasada debido a que, cuando llegue al Senado, el PP hará uso de todos sus medios con su mayoría absoluta para ralentizarla lo máximo posible.

Carta a eurodiputados: Puigdemont advierte al PP

En una misiva pública que remitió a eurodiputados, Carles Puigdemont denunció largo y tendido la situación que está viviendo y la cual tildó de “persecución judicial”, unas palabras que acompañó con una fuerte advertencia al partido de Núñez Feijóo. “Todo se sabrá”, amenazó en la carta.

En el texto, el expresident de la Generalitat abordó desde el señalamiento del juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón, vinculado al PP, y que decidió investigarle por terrorismo ante la causa del ‘Tsunami Democrátic’.  “Quienes más han interferido en la democracia española fue precisamente la policía patriótica, los jueces patrióticos y la corrupción sistémica del PP”, subrayó, a la par que hizo mención de las continuadas concentraciones violentas ante sedes del PSOE contra la amnistía.

Feijóo se abre a indultar a Puigdemont y la cúpula del PP lo desmiente

Fue este sábado por la noche cuando sendos medios de comunicación señalaron que Núñez Feijóo se habría mostrado dispuesto a indultar a Puigdemont “con condiciones” dentro del marco de “un plan de reconciliación para Cataluña”. Unas palabras que habría esgrimido el líder del PP y que, horas más tarde, el mismo partido rechazaba.

Cambiaron así esta versión insistiendo en que, en efecto, “no se dan las condiciones” para el indulto ya que Puigdemont “sigue huido de la justicia española y no se arrepiente de lo que hizo en el procés. "No a negociar impunidad por votos, y no a llamar reconciliación a lo que es interés electoral o parlamentario", expresan desde el PP.

Tal ha sido el revuelo dentro de las filas del PP que su portavoz en el Congreso, Miguel Tellado, es el que más firme se ha mostrado ante esta postura: “Ni amnistía ni indultos. Ya lo dijo Feijóo: ‘Prefiero los principios al poder’. Echaremos a Sánchez de Moncloa, pero con la fuerza de los votos, no con pactos encapuchados y oscuros”.