La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, han lucido este lunes su patriotismo israelí y han salido en defensa del Estado genocida gobernado por Benjamín Netanyahu ante las amenazas emitidas contra España. Almeida considera que el reconocimiento del Estado de Palestina, que se hará oficial este martes, “provoca” a Israel y que no puede pretenderse que este se quede “callado” y “tenga que asumir todo”, ha justificado las amenazas realizadas por el ministro de Exteriores israelí.

Los días de la Inquisición han terminado. Hoy en día, el pueblo judío tiene un Estado soberano e independiente, y nadie nos obligará a convertir nuestra religión ni amenazará nuestra existencia: aquellos que nos hacen daño, nosotros les haremos daño en respuesta”, ha conminado Israel a España. La reacción sionista ha llegado después de que el Gobierno, junto con Irlanda y Noruega, se pongan del lado de las más de 35.000 víctimas civiles, decenas de ellas niños, asesinadas por Israel, dando el paso de reconocer Palestina para caminar hacia la solución de los dos Estados.

Escasas horas después de que Israel haya bombardeado las tiendas de campaña de refugiados palestinos en Rafah, quemando vivas a 50 personas, Almeida considera que reconocer la estatalidad del pueblo palestino es alinearse con terroristas. "Si este gobierno pretende que Hamás le dé la enhorabuena y le felicite y Israel se quede callado, no es razonable. No puede ser que este Gobierno pretenda que Hamás e Israel le aplaudan al mismo tiempo", ha trasladado el alcalde, comprando el argumento sionista que apunta que el reconocimiento del Estado de Palestina es apoyar a Hamás.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, que el pasado viernes aseguró que Pedro Sánchez “premia atentados terroristas” y equiparó a ETA con reconocer el Estado de Palestina (“Mata, que yo te daré una comunidad autónoma. Mata, que yo te daré un Estado”) ha vuelto a pronunciarse en la misma dirección, justificando que Israel amenace a España. "Esto lo está provocando el Gobierno constantemente porque necesita quedarse con la extrema izquierda de su gobierno, y también hacer política internacional fuera de las fronteras para ganarse fuera el prestigio que no tiene en España", ha espetado.

Ignorancia histórica

Yendo más allá e ignorando la evolución histórica del conflicto, Ayuso ha asegurado que el Ejecutivo español “está llamando al exterminio de Israel y está justificando lo que el terrorismo de Hamás pretende con este Estado". Esta aseveración la sustenta la líder del Partido Popular (PP) en el eslogan “desde el río hasta el mar”. Este lema ha sido utilizado por los sionistas en anteriores ocasiones para llamar a completar el genocidio de la población palestina, mientras que el pueblo palestino lo utiliza para reclamar la conexión de sus dos territorios, Cisjordania (limítrofe con el río Jordán) y Gaza (limítrofe con el Mar Mediterráneo), desconectados por los colonos israelís.

Además, cabe destacar que estas son las fronteras que reconoce la Organización de Naciones Unidas (ONU), desde el río hasta el mar, delimitaciones que el Estado de Israel no ha respetado desde que los Británicos decidieron incrustar una colonia sionista en territorio históricamente palestino. Desde 1948, cuando se hizo ilegalmente con más territorio del concedido y vulneró la neutralidad de Jerusalén, Israel no ha cumplido ningún parámetro internacional y se dedica a practicar un apartheid de la población palestina y una ocupación ilegal de viviendas y tierras, impidiendo la movilidad y el acceso de ayuda humanitaria.

España no entra en provocaciones

Mientras el Estado de Israel realiza vídeos con grabaciones de la embajadora española sin su consentimiento y otros a modo de meme que entremezclan a personas bailando flamenco con ataques de Hamas, la derecha española apoya al sionismo. Ni si quiera amenaza directa a España ha servido para que el PP defienda el país. No obstante, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, conocedor de que no puede contar con la oposición en esta cuestión, mantiene la calma.

“En algún momento habrá que expresar nuestra expresión de rechazo a algo que no está dentro de la cortesía diplomática y de los usos de la convención de Viena de relaciones diplomática”, ha valorado. No obstante, no es el momento para el ministro, que ha asegurado que “no vamos a caer en ninguna provocación que nos aleje de nuestro objetivo: reconocer mañana el Estado de Palestina y alcanzar el alto el fuego”.