“Y queridos amigos, yo os hablaba de las coaliciones de perderles y todos sabéis perfectamente a lo que me refiero”, decía Esperanza Aguirre entre risas de desprecio hace no mucho tiempo. Quizás, ahora debería de arrepentirse de lo pronunciado después de que su partido, el PP, haya firmado un pacto con Ciudadanos y Vox para gobernar en Andalucía, aunque las elecciones las ganó el PSOE de Susana Díaz.

Durante años, el Partido Popular y Ciudadanos se han llenado la boca criticando lo que definen como “coalición o pacto de perdedores” sin saber vaticinar que, algún día, ellos serían los “perdedores” que firmarían acuerdos aún habiendo perdido en las urnas.

Pero como siempre, están las redes sociales y la hemeroteca para recordar el pasado.

Para recuperar declaraciones como las que hizo en su día el ahora líder del PP, Pablo Casado, denunciando que se cambiara en despachos lo decidido por los ciudadanos en las elecciones.  “Pactar en los despachos lo que las urnas te han negado, no se puede seguir tejiendo España con gobiernos de perdedores”, decía.

Pero también para poder volver a escuchar al líder de Ciudadanos, Albert Rivera, asegurar: “Que no, yo votaré que no a quien intente formar un grupo de perdedores para desbancar a una lista que gana las lecciones