Con un cuerpo de bomberos descontento con la gestión de la Junta de Castilla y León con los incendios, el choque entre el presidente, Alfonso Fernández Mañueco, y miembros de la Brigada Helitransportada de la comunidad autónoma al negarle un apretón de manos ha cobrado protagonismo informativo.

Con motivo de la visita del rey Felipe VI y la reina Letizia a las zonas afectadas por el incendio en Zamora, el presidente de la Junta acompañó la visita e intentó saludar a los brigadistas, pero estos se lo negaron. Uno en particular, al negarle la mano a Mañueco, reprochó al mandatario por negarse a mantener a brigadistas durante todo el año porque, según su consejero de Medio Ambiente, es un “despilfarro”.


Como consecuencia de la negación de dos brigadistas en fila, Más vale Tarde trató de debatir sobre la reacción de Mañueco, donde dejó de ofrecer la mano a los bomberos restantes y se apartó. La periodista Marina Valdés ha resaltado esta reacción, poniendo en cuestión si “hubiera sido más correcto saludar al resto de efectivos y escuchar lo que tuvieran que decirle”.

“Eso hubiera sido lo lógico”, ha afirmado el colaborador del programa Ramoncín, añadiendo que “él [Mañueco] sabe que lo que viene después va a ser muy parecido, si no lo mismo”. “Creo que estas imágenes lo que hacen es ponernos en la situación de los que ven las cosas desde un punto de vista que no es solo político. No podemos plantearnos si [el brigadista] es de derechas o de izquierdas, pero esa persona está indignada con lo que ha ocurrido”, ha destacado el artista.

“La diferencia es que los reyes, como tienen una imagen de que ellos se dedican a otra cosa y no se meten en política de alguna manera, la gente les saluda”, ha expuesto Ramoncín, explicando que cuando los brigadistas interactúan con “el que consideran responsable”, niegan el saludo. Además, ha destacado que la gestión de los incendios “está en manos de las comunidades autónomas”, algo que está recogido por la ley.

Recordando el discurso del Partido Popular (PP) donde se ha señalado al Gobierno estatal como el culpable de la gravedad de los incendios, el colaborador ha asegurado que, dado que la competencia del control de los incendios es de las autonomías: “Hay cosas que podrá hacer el ejecutivo central, pero de esto no tiene la culpa Pedro Sánchez”. Por ello, Ramoncín destaca que el segundo brigadista que le niega la mano al presidente de la Junta “le recuerda al presidente de la comunidad, como le recuerdan otros vecinos, que él es el máximo responsable de la lucha contra los fuegos en Castilla y León”.

“Mañueco tenía dos actitudes que tomar”, ha continuado el colaborador: “Una, dar un paso atrás cobardemente porque no quiere aguantar el chaparrón. Yo creo que lo correcto hubiera sido que se hubiera parado, hubiera hablado, le hubiera preguntado o le hubiera dicho ‘hablamos después si nos vemos’”

Sin embargo, Ramoncín ha resaltado que “eso no le gusta”. “No le gusta que le digan a la cara lo que la gente piensa, y eso es un ciudadano que se ha dejado la piel, y posiblemente se ha jugado la vida, para impedir que esos incendios fuesen a más. Le ha dicho a la cara lo que piensa”, ha criticado el artista.   

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