El músico sevillano José Manuel Soto ha sido víctima en Twitter del que algunos han calificado como el “zasca del año”, después de meterse con el libertador Simón Bolívar a raíz de unas palabras que, sin él saberlo, pertenecían a un discurso de Felipe VI.

“Simón Bolívar, que tanto amó a esta tierra a la que dejó su nombre y que fue pionero de la preocupación por la cultura, la educación, la moral, y el medio ambiente puso también los cimientos de un gran sueño, el sueño de la unidad iberoamericana. Salvados obstáculos nacionalistas, superados poco a poco problemas como la comunicación física y las fronteras, me llena de satisfacción comprobar cómo estamos cada vez más cerca del mensaje integrador de aquel hombre que hiciera aquel discurso vibrante y de libertad al Congreso Constituyente de Bolivia, el 25 de mayo de 1826”.

Esto dictaba el mensaje original, recuperado en una versión más corta por el exletrado del Tribunal Constitucional (TC) Joaquín Urias, y al que el cantante ha respondido: “Estimado Joaquín, Bolívar fue un asesino sanguinario que ordenó el exterminio de los españoles que se mantuvieron fieles a su patria. Incluso fusiló a 1.000 de ellos que estaban en los hospitales. Hizo gala de una crueldad y un sadismo impropios de ningún “Libertador”.

La declaración, tal y como muestra el jurista, forma parte de un discurso que el entonces príncipe pronunció en Córdoba (Bolivia) en 1991.

La espada de Bolívar y Felipe VI

El momento forma parte de las reacciones que han tenido lugar en los últimos días debido a la actitud de Felipe VI frente a la espada de Bolívar durante la toma de posesión del nuevo presidente de Colombia, Gustavo Petro.

Las diferentes imágenes del rey frente al símbolo latinoamericano han provocado críticas desde Podemos y también desde Vox, paradójicamente. Los primeros mantienen que el rey no se levantó al paso de la espada, sino cuando acaba la ceremonia, después de la imagen difundida por la Agencia EFE.

Por su parte, y tras la instantánea en la que se ve al monarca de pie, los ultras salieron en tromba a criticarle -tan solo 24 horas después- y rescataron el ya clásico mote de Felpudo VI, que emplean cuando algo del Jefe de Estado no les gusta.