La cuenta de Twitter del que fuera ex diputado de Ciudadanos, Juan Carlos Girauta, ha criticado la ley del solo sí es sí, situada en el punto de mira en los últimos días por la rebaja de penas a prisión de los condenados por abusos sexuales. El texto y la consecuente actuación de algunos jueces ha provocada una tormenta de opiniones muy dispares sobre si el fallo es de redacción de la ley o de interpretación de la jurisprudencia.

Hay muchas voces alejadas del documento de Igualdad, por lo que en la práctica puede provocar en algunos casos. También las hay, además de la propia ministra, que apuntan a una mala interpretación del mismo. El asunto está dando mucho de qué hablar, y se presume que seguirá siendo así en los próximos días, cuando se prevé la posibilidad de que haya más condenas rebajadas. De hecho, hasta los propios jueces discrepan sobre dónde reside el grueso del error.

La redacción de la ley por parte del departamento de Montero se puede criticar dando razones para ello, si se considera que es ahí donde se encuentra el principal problema. Lo que se encuentra totalmente fuera de lugar es lo que se ha hecho desde el perfil del antiguo político naranja, que ha compartido un montaje en el que aparecen algunas responsable de Podemos, entre ellas la propia ministra de Igualdad, junto a los miembros de La Manada bajo el título San Fermín 2023 y el comentario: “No hace falta decir nada más”. Como cabía esperar, la instantánea ha recibido multitud de críticas y ya se cuentan por decenas, si no cientos, los comentarios.

 

Debate sobre la ley del ‘solo sí es sí’

La ley del ‘solo es sí’ aglutina en uno los delitos de abuso y agresión sexual intentando evitar que lo que hasta entonces haya sido en ocasiones considerado lo primero por no existir violencia sobre la víctima, sea igualmente grave desde el punto de vista jurídico. Esto es importante en casos en los que, por ejemplo, se anula la voluntad de la víctima con drogas.

Al unirse los dos tipos delictivos se agravan los castigos, pero también da pie a que se amplíe el rango de las pena de manera que la horquilla sobre las mismas pueda ir desde los cuatro a los doce años. Dicho en otras palabras, la normativa posibilita elevar las penas para los hechos más leves y rebajarlas para los más graves.

En la práctica, el documento está permitiendo que abogados, entre ellos el de La Manada, pidan rebajas de pena. En el calso concreto, la solicitud es hacia uno de los condenados, ya que los otros también fueron juzgados por abusos sexuales y delitos contra la intimidad de una joven en Pozoblanco (Córdoba) y el total de penas se sitúan cerca de los 20 años de prisión, lo que deja sin efectos la reducción.

El hecho en sí y las acusaciones de Irene Montero sobre los jueces podría haber abierto asimismo un nuevo cisma entre PSOE y Unidas Podemos, aunque las formaciones niegan el desencuentro. Con todo, desde el ala socialista piden “respeto” para los jueces y confían en la “unificación de doctrina”, según declaraciones del propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Todo el mundo ha opinado sobre la normativa y ha dado diferentes puntos de vista. En esta línea, el exvicepresidente del Ejecutivo, Pablo Iglesias, ha calificado de “cobardes” a las voces que no son críticas con la aplicación y ha criticado la “dimensión de las mentiras que se están esparciendo”. También sostiene que la normativa ya pasó los organismos oficiales en el momento de su tramitación y fue aprobada por Gobierno y Senado. “Hay dos posibilidades, la ley es una chapuza que en realidad beneficia a los violadores, o hay jueces machistas que aplican la ley como les sale de debajo de la toga”, asumió en La Base de Público.

Más prudente se muestra, por ejemplo, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que ha emplazado a “ser prudentes” y “analizar” el recorrido judicial y el por qué se están revisando las penas en algunos casos.