Amaia Montero ha anunciado este lunes su regreso a la industria musical con un nuevo disco después de cuatro años. Un anuncio que coincide casi en tiempo y forma con la pronunciación de Leire Martínez, actual vocalista de La Oreja de Van Gogh, sobre su antecesora.

A través de sus redes sociales, de las que lleva alejada desde 2020 y de las que se despidió con un “hasta pronto”, la cantante ha anunciado su esperado regreso a la música y los escenarios. En un vídeo que ha publicado en su cuenta de Instagram, la artista vasca ha cantado un extracto del que podría ser su próximo single y que pronto saldrá a la luz, aunque sus seguidores han comprobado que sigue la estela de otras de sus composiciones, como Quiero ser. Este sería el quinto disco en solitario de la cantante.

 

Leire Martínez zanja la polémica

“Los inicios fueron complicados” para la segunda vocalista del grupo musical español por las comparaciones que el público hacía con ella y con Montero. En una entrevista con Socialité el pasado sábado, aseguró que “se han dicho cosas” que no le han gustado durante mucho tiempo pero que prefirió callar para “no generar fuegos” innecesarios.

Sobre su relación con la cantante vasca, Martínez es clara y contundente, rompiendo así de una vez por todas con los rumores sobre su enemistad: “Hay una relación correcta, pero no hay una relación más allá. Me hubiera gustado hablar con ella a tomar café para contarnos nuestras experiencias. Pero no surgió y tampoco estuve sola (…) Las dos hemos ocupado un lugar en un mismo grupo, con la misma gente y creo que empatizo mucho con ella en muchos aspectos porque, a veces, ser la única mujer en un equipo únicamente de hombres no es nada fácil”, defendió.

Asimismo, y sobre la polémica más sonada que implica a ambas artistas sobre la firma de los discos de la banda musical, su actual vocalista rompe con todo. Amaia Montero dio a entender en entrevistas pasadas que no le gustaba que su sucesora firmase discos de la primera época de La Oreja de Van Gogh; sin embargo, Leire Martínez se ha defendido ante las críticas: “El disco cuando se vende es de propiedad del que lo compra y esa persona decida quién quiere que se lo firme. Yo hay determinados discos que no firmo porque no quiero generar malos rollos, pero si el propietario insiste, adelante”, resolvió.