Los indicadores económicos que recogen los resultados del ejercicio 2022 se suceden en el primer mes del año y, lejos de lo que oposición y organismos pronosticaban, han desbordado todas las previsiones. Ahora, los augurios negativos vuelven, como si sus locutores no hubiesen aprendido nada, para asegurar que sí, que este año sí que se hundirá España. “Frente a los profetas del apocalipsis, hoy tenemos un fuerte crecimiento económico, la inflación más baja de Europa y récord de empleo”, ha respondido Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, a todos los agoreros y fatalistas. Apoyándose en datos, no en conjeturas, celebra que el país marque los mejores datos en todas las variables posibles, que han ido goteando en enero ante un silencio sepulcral.

Hace dos semanas, el dato definitivo de la inflación de diciembre (5,7%) confirmaba que España es el país con el dato más bajo de todo Europa, a casi cuatro puntos de la media (9,2%) y el único por debajo del 6%. Este jueves, tras la publicación de la Encuesta de Población Activa (EPA), se constataba también el notable avance del mercado laboral español tras un año de aplicación del Reforma Laboral, con récord histórico de afiliados (en torno a 20,5 millones), mejor dato de paro desde 2008 (12,87%) y casi 300.000 ocupados más. Este viernes el ciclo se ha cerrado con la publicación de la Contabilidad Nacional, que muestra que el crecimiento de la economía española ha alcanzado el 5,5%, desbordando las previsiones del Gobierno (4,4%) -no digamos de organismos económicos-, y dejando el PIB a escasas décimas de recuperar sus valores prepandemia.

La inflación más baja de Europa

El primero de los datos conocidos este año fue el del Índice de Precios de Consumo (IPC) de diciembre, confirmado por Instituto Nacional de Estadística (INE) tras bajar una décima el adelanto. Con un 5,7% de inflación cerró España el año después de reducir cinco puntos el valor en tan solo cinco meses. Las medidas aprobadas por el Gobierno funcionaron, tanto que posicionaron al país como el que menor inflación de la eurozonona tenía (desde noviembre), título que sigue ostentando.

Lejos se sitúa la media de la zona euro (9,2%), donde ningún país puede se acerca siquiera al 6%, y las grandes ecolonomías, socias habituales de España, no consiguen abandonar la espiral inflacionista: Francia (6,7%), Alemania (9,6%), Portugal (9,8%), Bélgica (10,2%), Países Bajos (11%) o Italia (12,3%). Muchos de estos países marcan datos que España no llegó a alcanzar en su peor momento, julio de 2022, cuando se batieron valores históricos y se alcanzó el 10,8%. Lejos queda aquel momento, aunque ahora la preocupación es la inflación subyacente.

Los mejores datos de empleo desde 2008

Hace apenas 24 horas se daban a conocer los datos de la última EPA del pasado año, que confirmaron lo que los resultados mensuales y trimestrales ya apuntaban. El empleo experimento un ascenso meteórico y cerró el pasado año con 278.900 ocupados más que en 2021. El número de ocupados se catapultó hasta los casi 20,5 millones, cifra récord de la serie histórica, y el paro cayó en 80.000 personas hasta situarse en el 12,87%, cifra que, aunque alta, no se reflejaba desde hace 15 años. Una reducción de más de dos puntos y medios en tan solo un año. Los efectos de la Reforma Laboral son palpables en el día a día de los trabajadores, pero también sobre el papel.

No obstante, más allá de la contratación y del número de trabajadores (cantidad), si algo ha cambiado con esta nueva normal es la calidad del empleo. La temporalidad, problema endémico del mercado laboral español, se ha reducido hasta el 17,9%, desde el 25%. Así, cayendo más de ocho puntos en tan solo doce meses, la tasa retrocede hasta su mínimo histórico y acerca los valores a la media europea. Tanto es así que, en 2022, los contratos indefinidos aumentaron en 1.591.100 y alcanzaron los 14,3 millones, dando estabilidad laboral a los trabajadores y castigando los contratos temporales, que cayeron 1,2 millones. Con estas nuevas condiciones la cantidad de personas que demandan trabajo, la población activa, se ha disparado y alcanza los 23,5 millones.

El crecimiento económico desborda las previsiones

El último indicador que se ha deslizado en enero ha llegado este viernes, con la publicación de los datos de la Contabilidad Nacional. Los datos son claros y muestran que el crecimiento de la economía española en 2022 ha desbordado las previsiones del Gobierno cerrando el año en el 5,5%. El último trimestre del año ha cerrado en positivo alcanzando una subida 0,2% en comparación con el trimestre anterior y del 2,7% y ha dejado por los suelos las previsiones de recesión técnica, contracción económica y demás estimaciones catastrofistas realizadas por la oposición y los organismos económicos.

Estos datos son posibles porque, en un contexto de inflación disparada y encarecimiento de bienes de primera necesidad, el consumo de los hogares ha resistido el envite cerrando el año por encima del 4%. De la misma manera ha crecido la inversión, que es el segundo motor que ha impulsado la economía española al primer puesto de la zona euro. Actualmente, España es el país con un mayor crecimiento en 2022, de los pocos que cuentan con unas previsiones positivas para 2023, por encima del 1%, y el país con la inflación más baja (5,7%). No puedo obviarse tampoco que, como reflejaban los puntos anteriores, el crecimiento económico ha sido compatible con el avance en derechos y la protección de los más vulnerables.

Más de diez millones de pensionistas que ven ahora garantizado su poder adquisitivo con la aprobación de subida de sus prestaciones conforme a la inflación media anual. Este compromiso del Gobierno ya se ha visto reflejado en la primera pensión del año que, con una subida del 8,5%, es de media 108 euros más alta. En lugar de un incremento de 2,39 euros que se habría aplicado con el sistema aprobado por el Partido Popular, este es el aumento de la nueva ley aprobada, con el consenso de los agentes sociales, por el Gobierno de coalición. Uno de tantos ejemplos que da más sentido que nunca a la frase publicada este viernes por el presidente del Gobierno: “Frente a los profetas del apocalipsis”…