El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha incrementado el desplome de la inflación reflejado en el último mes del año, modificando el dato anticipado el pasado 30 de diciembre, y sitúa el Índice de Precios de Consumo (IPC) definitivo en el 5,7%. De esta manera, teniendo en cuenta los datos de todos los países de la zona euro, España se reafirma como el país con menor inflación de la eurozona, a escasas décimas de su primer perseguidor, Francia. Este descenso de un punto porcentual es el quinto consecutivo y aproxima a España a la superación del alza de precios provocado por la guerra de Ucrania y la crisis energética.

Esta caída interanual se debe, según explica el INE, a una nueva reducción de los precios de los carburantes y de la electricidad, compensados algunas de las medidas aprobadas por el Ejecutivo, como la gratuidad del transporte público o la excepción ibérica y las tarifas eléctricas y energéticas especiales. No obstante, la nota negativa la aporta la inflación subyacente -aquella que no incluye los alimentos no elaborados ni la energía- que también modifica su dato y repunta siete décimas desde noviembre y se sitúa en el 7%. Además, el IPC intermensual experimenta un leve aumenta de tres décima en su variación intermensual.

Esta cifra disparada, aseguran desde Economía, se debe a que en el mes de diciembre se mantienen altos los precios de los alimentos (15,7%), especialmente leche, queso, huevos y aceite, con un incremento de cuatro décimas. Las medidas adoptadas por el Gobierno a finales de diciembre eliminan el IVA de los alimentos básicos –pan, leche, queso, huevos, frutas, verduras– y reducen del 10% al 5% el del aceite y pasta, con el objetivo de bajar sus precios, situación que no se ha visto reflejada de forma real en la cesta de la compra de los hogares. No obstante, fuentes del Gobierno aseguran que se está realizando un seguimiento para garantizar que la reducción del IVA aprobada se traslade a los consumidores.

La inflación ha bajado muy rápidamente desde el pico de julio, hemos terminado el año muy por debajo de la zona euro y de la Unión Europea y lo que tenemos que hacer es seguir en esta línea durante 2023”, ha señalado Nadia Calviño, vicepresidenta y ministra de Asuntos Económicos, en una entrevista concedida a RNE. Así, ha depositado sus esperanzas en el paquete de medidas aprobado en el último Consejo de Ministros antes del cierre del año para reducir la inflación subyacente y el elevado dato de los alimentos. “La tendencia es que la bajada de la inflación se mantenga y el crecimiento económico español siga al alza, por encima del resto de economías europeas”, ha confirmado.

Con estos datos, la inflación da carpetazo a 2022 con el dato más bajo desde noviembre de 2021, momento en el que su ascenso ya había comenzado y se situaba en el 5,5%. Lejos queda el máximo histórico de julio, momento en el que se alcanzó el 10,8%, debido a la meteórica caída experimentada en tan solo cinco meses en los que se ha reducido en cinco puntos el dato. Sin embargo, como muestran los datos, el elevado precio de los alimentos y el vestido y calzado generan una situación muy difícil para las familias trabajadoras.

La evolución de la inflación confirma la eficacia de las medidas adoptadas por el Gobierno, aseguran desde el Ministerio de Asuntos Económicos. Se reduce la presión sobre los costes energéticos de las empresas, reforzando para los próximos meses su competitividad y reafirma la urgencia y oportunidad de las medidas incluidas en el Real Decreto Ley 20/2022 para reducir los precios de los alimentos, añaden.

Momento de las revisiones salariales

La evolución de la inflación confirma la eficacia de las medidas adoptadas por el Gobierno, aseguran desde el Ministerio de Asuntos Económicos. Se reduce la presión sobre los costes energéticos de las empresas, reforzando para los próximos meses su competitividad y reafirma la urgencia y oportunidad de las medidas incluidas en el Real Decreto Ley 20/2022 para reducir los precios de los alimentos, añaden. Ahora es turno de las empresas, que han visto incrementados sus beneficios en este periodo, de revisar los salarios si no lo han hecho ya.

Esto se debe a que, más allá del dato interanual que se cierra en diciembre y se situó en torno a un 8,5%, muchas compañías utilizan el dato del último mes del año como referencia para las revisiones salariales, a pesar de que no representa el incremento de los precios de todo el año. Así, de elegir este valor, la subida de los salarios se alejaría 2,8 puntos de la inflación real a diferencia de las pensiones, que han confirmado su subida del 8,5%.