El reconocido grupo multinacional Inditex no aclara su situación con respecto a su posición en el mercado ruso. Este martes saltaban las alarmas a causa de unas informaciones publicadas a través de un medio ruso, 'Kommersant', que aseguraba que la compañía fundada por Amancio Ortega –ahora con su hija Marta Ortega a la cabeza- estaría estudiando trasladar sus activos en Rusia a socios de un país amigo; probablemente del Sudeste Asiático o del Golfo Pérsico.
De acuerdo con las fuentes consultadas por el medio ruso, la posible transferencia del negocio llevará entre seis meses y un año. Una transferencia que dejará fuera de Rusia a marcas como Massimo Dutti, Oysho o Zara Home. Otras marcas que pertenecen a la compañía podrían permanecer en el país con otros nombres y otros productos, eso sí, no antes de la primavera.
Inditex no confirma la venta de sus tiendas en Rusia
Ante las preguntas de ElPlural.com, la multinacional textil ha evitado confirmar su salida definitiva del mercado ruso. Desde la compañía han remitido las declaraciones del consejero delegado del grupo, Óscar García Maceiras, que se pronunció al respecto en un acto celebrado el mismo martes en una planta logística en Zaragoza. El Ejecutivo afirmó estar “monitorizando distintas alternativas”, evitando así confirmar los rumores.
Esta no sería la primera maniobra del gigante textil en el mercado de Rusia. Ya el pasado mes de marzo -al poco de estallar el conflicto- Inditex decidió cerrar 502 tiendas propias en el país gobernado por el régimen de Putin, una decisión que no resultó fácil para la compañía pues Rusia se sitúa como el segundo mercado después de España con una plantilla que alcanza los 9.000 empleados.
El mercado ruso constituye alrededor del 8,5% del resultado neto de exportación de la compañía. Más concretamente el resultado antes de impuestos en dicho mercado alcanzó la cifra de 86 millones de euros en 2020, cifras que rondan el 5% de su volumen total de negocio, que supone unos 1.000 millones de euros.
Inditex no es la primera
La compañía fundada por Amancio Ortega no es la primera en sopesar este tipo de movimientos. Una situación similar sucedió el pasado julio con el minorista polaco LPP con marcas como Reserved, Cropp, Mohito y Sinsay. La multimarca polaca decidió transferir sus tiendas en Rusia a una empresa registrada en los Emiratos Árabes Unidos, a la par que sus establecimientos en el país de Putin reanudaban su actividad bajo nuevos nombres.
De llevar a cabo esta maniobra, el grupo Inditex no abandonaría Rusia de forma definitiva al contrario de lo que ya han hecho otras multinacionales como Ikea, Starbucks, McDonald’s, Burger King, Coca Cola, Apple, Microsoft, Airbnb, Nintendo o Spotify, entre otras muchas.