Tras la venta de cuatro fábricas y la liquidación de todo su inventario el pasado 15 de junio, Ikea va un paso más allá y decide dejar de operar online en el mercado ruso a partir del próximo 15 de agosto. La empresa escandinava ya suspendió sus ventas en este país a principios de marzo tras el inicio de la invasión rusa en Ucrania.
Desde el pasado 24 de febrero, cuando dio comienzo la "operación militar especial" en Ucrania, un gran número de compañías internacionales han ido abandonado el mercado ruso. El presidente ruso, Vladímir Putin, advirtió a Occidente de que sus empresas tendrán muchas dificultades para volver al mercado ruso y consideró que su salida incluso "puede ser para bien".
Ikea recordó a inicios de verano que el pasado 3 de marzo decidido suspender sus operaciones en Rusia y Bielorrusia debido "a la guerra en Ucrania", pero que desde entonces garantizó "seis meses de sueldo para todos los trabajadores". "Desafortunadamente, las circunstancias no han mejorado y la devastadora guerra continúa. Los negocios y las cadenas de suministro en el mundo se han visto muy afectadas y no vemos que sea posible reanudar las operaciones en un futuro próximo", lamentaron desde la compañía.
"El 15 de agosto de 2022 a las 20:00 horas (hora de Moscú), finalizará la venta en línea de productos Ikea", ha anunciado la multinacional. De este modo, las tiendas de Ikea en Rusia permanecerán cerradas y solo operarán para la emisión de pedidos realizados previos al cierre, así como para la devolución y cambio de mercancías y mobiliario.
"Todos los pedidos realizados antes de que finalice la venta online serán procesados, emitidos o entregados durante los meses de agosto y septiembre en el momento acordado al realizar el pedido", ha precisado la compañía. De este modo la multinacional escandinava culmina su “nueva fase de reducción de sus operaciones”, lo que significa su salida del país ruso.