El pasado 26 de junio una diputada de Vox, Rocío de Meer, fue agredida en un acto del partido en Sestao, Vizcaya, celebrado con motivo de las próximas elecciones vascas para el 12 de julio. Tan pronto la diputada denunció a través de las redes sociales que había recibido una pedrada en un ojo, la imagen de su ojo ensangrentado se difundió con rapidez y muchos internautas mostraron su rechazo ante tal acto de violencia.

A partir del día siguiente, cuando la diputada se fue a otro acto en Irún, las dudas sobre la veracidad de la agresión comenzaron a florecer. Tal como se informa en Informe Picazo, medio que se puso en contacto con el criminólogo especialista en homicidios, investigación avanzada y muertes judiciales, Óscar Tarruella, también exmarido de la cantante Mónica Naranjo, para clarificar el asunto de este caso.

Después de haber observado las dos instantáneas donde se puede ver la herida de la diputada, una en Sestao y otra en Irún, el criminólogo asegura ante el mismo medio: “Considero que es imposible el impacto. Ya que en el mismo momento en el que se produce el impacto la sangre hubiera sido más aparatosa, no solo una línea en la ceja. Aunque fuera una herida pequeña sangraría a borbotones. Es imposible que esa ceja al día siguiente no esté ni inflamada por mucho hielo que se ponga”.

“La ceja es la mejor zona para simular estas agresiones. Si lo haces por ejemplo en la parte inferior del ojo, en el párpado, se notaría demasiado. La sangre en esa zona sería más oscura y no tan clara, como muestra la imagen. La sangre clara es de una arteria y por ahí no pasa ninguna”, reafirmó Tarruella.

Informe Picazo también asegura haberse puesto en contacto con médicos de la Federación Asociación Sanidad Pública, quienes consideran que les sorprende que Abascal publicase solo la mitad del informe médico, así como no presentar el parte de lesiones que se redacta en el momento que se produce la lesión. Respecto a la cuestión del informe, hay otras versiones que aseguran que es real y hecho por un médico.