Malos pronósticos llegan desde Buckingham. Desde que en febrero se comunicó que el rey Carlos III padecía cáncer, la evolución de su estado se ha mantenido en un ámbito privado alejado en la medida de lo posible del foco mediático. Pero cuando el río suena, agua lleva. Ahora, informaciones compartidas por la prensa internacional como Page Six o New York Post apuntan a que la salud del monarca se ha “deteriorado progresivamente”.

Esto ha llevado a que el Palacio tenga activado un protocolo de preparación del funeral por si se diera el fatal desenlace, algo que realmente se inició justo el día posterior de la muerte de la reina Isabel II el 8 de septiembre de 2022. A pesar de que el equipo médico que lo atiende, familiares y el propio rey están luchando para poder superar la enfermedad, fuentes cercanas a la Familia Real han informado que se encuentra en mal estado. “Por supuesto que está decidido a vencerlo y se lo está dando todo. Todo el mundo se mantiene optimista, pero él se encuentra realmente muy mal. Más de lo que dejan entrever”.

En la misma línea, una fuente cercana a la familia ha informado este jueves al Daily Beast que “al hablar con amigos del Rey en las últimas semanas sobre su salud, la respuesta más común es ‘No es bueno’”.

Operación Puente Menai

Después de la muerte de la reina Isabel, se ha estado revisando un documento que recibe el nombre de Operación Puente Menai (el puente colgante de Gales), donde se detallan los planes del posible funeral. Como ejemplo, sigue el funeral de Isabel II, cuyo plan fue el de Puente Londres, para evitar que se produzcan incidencias en el de Carlos III. “Los planes han sido desempolvados y se están actualizando activamente. No es más de lo que cabría esperar dado que al Rey le han diagnosticado cáncer. Pero la circulación de ellos ciertamente ha enfocado las mentes”.

Así pues, esta Operación comprende el ascenso del príncipe de Gales, William, y el nombramiento de su mujer, Kate Middleton como reina consorte, que ahora posee Camila. Si se diera el caso de que William asuma el trono, su hija Charlotte sería nombrada nueva princesa de Gales, por lo que Camila Parker, actual esposa de Carlos III, tendría el único título de reina viuda de Inglaterra.

Última aparición pública

Fue hace escasos días, concretamente el 21 de abril, cuando los medios captaron una imagen de Carlos III acompañando a su esposa Camila a misa. A pesar de la buena impresión que causó a los medios, la última noticia del Palacio ha desdibujado todas las esperanzas.

Y es que en los últimos meses la Familia Real británica ha tenido que enfrentar varios malos tragos relativos a cuestiones de salud. Aproximadamente un mes después de la noticia de Carlos III, la princesa de Gales, Kate Middleton, reaparecía en la escena pública después de varias semanas alejada, para comunicar que también tenía cáncer. Lo hacía a través de un vídeo en el que señalaba que, a pesar de la cirugía abdominal a la que se sometió en enero, el cáncer no había conseguido remitir. “Me sometí a una cirugía abdominal en enero en Londres. En ese momento se pensaba que mi condición era cancerosa. La cirugía fue exitosa, pero la prueba después de la operación y el cáncer habían estado presentes, por lo que mi equipo médico me aconsejó que debería someterme a un tratamiento de quimioterapia preventiva y ahora estoy en las primeras etapas de ese tratamiento”, comunicó.