La pobreza ha crecido en toda España y sigue golpeando especialmente en Andalucía, según un informe de Oxfam Intermón publicado este miércoles. En concreto, en nuestro país actualmente tres millones de personas con trabajo se encuentran en situación de exclusión social, y la situación es especialmente delicada en la comunidad del sur, liderada por Juanma Moreno Bonilla.
En la investigación Pobreza Laboral: cuando trabajar no es suficiente para llegar a fin de mes, la ONG analiza una “realidad alarmante” que afecta a 2.957.000 trabajadores -sobre todo migrantes, del hogar y de familias numerosas y monoparentales- a pesar de los avances que se han producido en materia de empleo en los últimos años como pueden ser la subida del SMI, la reforma laboral o una tasa de paro que se sitúa en su nivel más bajo desde 2008.
En el ránking, la primera autonomía que aparece en Andalucía, que alcanza una tasa de pobreza laboral del 19,4%. Por detrás de ella se encuentra Extremadura (17,2%) y Ceuta (16,4%), seguidas de Castilla-La Mancha (15,4%), Murcia (14,3%), Canarias (13,8%) y Valencia con el mismo porcentaje.
En el otro lado del tablero, por debajo de la tasa media están Melilla (11,6%), Galicia (11,1%), La Rioja (11%), Castilla y León (10,5%), Aragón (10%), Cantabria (9,6%) y Asturias y Baleares con la misma cifra que esta última.
Y ya dentro de las autonomías con menor tasa de pobreza aboral aparecen Navarra (6,3%), País Vasco (6,6%), Madrid (7%) y Cataluña (7,7%).
Moreno Bonilla, líder en pobreza a muchos niveles
Los últimos datos recabados sobre la región del sur son demoledores y reflejan pobreza a todos los niveles. Por ejemplo, los datos en pobreza infantil -recogidos antes del verano del presente año- proyectan que el 46,8% de los niños y niñas andaluces son pobres.
Y si se retrocede un poco en el tiempo, existen otros informes que tampoco dejan en demasiado buen lugar al gobierno ‘popular’. Así las cosas, en 2022 la tasa de pobreza en Andalucía alcanzó al 29,1% de la población, y la de pobreza severa llegó al 14%, según la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA), muy activa en Andalucía. Un año antes, la brecha entre la comunidad y España en población de riesgo de exclusión se había incrementado.
Precariedad laboral
En la actualidad, el 13’7% de las personas empleadas de nuestro país vive por debajo del umbral de la pobreza, un número que se duplica entre las personas migrantes (hasta alcanzar el 29’5%). Asimismo, el 40% de las familias numerosas y el 30% de los hogares monoparentales sufren esta situación. Y lo que puede llamar más la atención: del total de personas en dicho escenario es que tres de cada diez tienen un empleo.
En otro orden de cosas, los sectores más golpeados por la pobreza vuelven a ser los relacionados con el sector primario, como la agricultura; y los relativos al hogar, donde tres de cada diez personas conviven con la pobreza a pesar de disfrutar de un trabajo. A ellos les sigue la hostelería y la construcción, con dos de cada diez personas empleadas en esa tesitura.
Tal y como confirma el informe, el empleo a tiempo parcial o autoempleo condenan a la pobreza a una de cada cuatro personas que trabajan en estos ámbitos, mientras que más de la mitad de las personas que han querido continuar sus estudios se han visto en la obligatoriedad de abandonarlos por falta de recursos o por la necesidad de dar el salto a la vida laboral.
El encarecimiento de la vivienda, entre los motivos principales
Entre los motivos principales que dan pie a esta situación destacan el encarecimiento de la vivienda -sin duda, uno de los primeros problemas, sino el primero, de nuestro país en la actualidad- o el de los servicios básicos; que han complicado aún más la situación.
Para acompañar estos datos, subrayar que los hogares destinan entre el 67% y el 79% de sus ingresos al pago del hogar y los servicios básicos; o que más de la mitad de los hogares en pobreza laboral ha tenido que renunciar a servicios de salud esenciales como tratamientos dentales, gafas o seguimiento psicológico en el último año.
Medidas urgentes
La ONG apunta a la necesidad de adoptar medidas urgentes para enfrentar la difícil realidad y mejorar la calidad de los trabajos, y éstas pasan por ampliar la protección social o reformar el sistema de prestaciones para que las familias más vulnerables de queden desamparadas.
Oxfam deja claro que “no basta con crear empleo”, sino que es necesario que éste “sea de calidad”. “Para muchos hogares, un salario no es suficiente si no viene acompañado de condiciones laborales justas, el acceso a una vivienda digna y un sistema de protección social robusto que les permita salir adelante”, asevera.