Óscar Puente, el ministro de Transportes, ha desmentido las pruebas presentadas por Víctor de Aldama mediante una auditoría compuesta por 40 pruebas, de las cuales 18 están sin licitar, seis son de la época de José Luis Ábalos y cuatro pertenecían a la época en la que gobernaba el Partido Popular.
La auditoría ordenada por Óscar Puente
La auditoría solicitada por Óscar Puente se realizó tras las declaraciones de Aldama que alegaban que “Ábalos lideraba en Transportes una red de adjudicaciones amañadas a cambio de comisiones”. En la auditoría se ha podido demostrar que esto no es así tras un análisis de los supuestos contratos. Los resultados de la revisión y verificación de esos archivos indican que no hay ningún pago ilegal al exministro Ábalos.
Se trata de 39 contratos señalados, 21 son lícitos: el contrato de obras, uno con Ana Pastor, tres con Íñigo de la Serna, seis con Ábalos y once con la ministra Raquel Sánchez. Los otros 17 están sin licitar y tras este informe, Óscar Puente describía como "papelucho" las pruebas de Aldama.
Estalla la tensión entre las colaboradoras
En el plató de En boca de todos tras conocer todas estas novedades y pruebas aportadas por el ministro de Transportes, desmintiendo de manera categórica lo que alegaba Víctor de Aldama, se ha producido una discusión entre los que defienden a Puente y la posición del PSOE, y los que tienen claro que lo que dice Aldama no puede ser mentira.
Sarah Santaolalla se enmarca en los que advierten que Aldama no está en lo cierto con sus acusaciones a Ábalos, y se encaraba así contra os que piensan lo contrario: “Preferís creer a alguien que no tiene absolutamente ninguna prueba y que cada día se inventa algo nuevo, que creer a quien está desmintiendo un ‘papelucho’ y seguir una política que lo único que quiere es acabar con los gobiernos”, encarando así a Antonio Naranjo y Lucía Etxebarría.
Antonio Naranjo, también colaborador de En boca de todos, interrumpía a Santaolalla diciendo: “Sí, el nazismo”, a lo que la colaboradora le contestaba: “No hables con tanta frivolidad del nazismo, porfa, por respeto” contestaba visiblemente molesta la comunicadora. En esta conversación, Lucía Etxebarría estallaba y gritaba: “Claro que no tienes que hablar con tanta frivolidad, me estás tocando un tema ya personal y voy a intentar tranquilizarme”. En el plató aumentaba la tensión y Sarah Santaolalla no estaba dispuesta a seguir rebatiendo a sus compañeros, aunque sí le paró los pies a la escritora: “Yo no tengo que aguantar voces de nadie”.
Lucía Etxebarría acusa de delitos graves a Koldo
Lucía Etxebarría rebajaba el tono y expresaba su opinión sobre la trama, de la que considera que todavía hay mucho que investigar. Además, señalaba a Koldo como alguien con un expediente bastante truculento, así lo describía: “Un portero de un ‘puticlub’ metido en extrañas historias de tráfico de drogas y trata de mujeres”. Tras esta declaración, Nacho Abad, presentador del programa, interrumpía a la escritora para decirle: “Lucía, ¿Me estás diciendo que Koldo tiene que ver con tráfico de drogas y trata de mujeres? Es que me parece una acusación muy grave para hacer gratuitamente”. La única justificación que indicaba Etxebarría era que Koldo era portero de una discoteca que, casualmente, cerró por un asunto de tráfico de drogas. Esta explicación despertó las risas de Sarah Santaolalla, que le parecía que era una acusación bastante injustificada.