“Habemus Papam”, las palabras más esperadas han llegado en torno a las 19:15 y ha resultado ser una sorpresa. La chimenea de la Capilla Sixtina tras la fumata blanca ha anunciado que la Iglesia Católica ya cuenta con un nuevo sucesor de Pedro, y posteriormente se ha anunciado que el cardenal estadounidense Robert Francis Prevost Martínez ha sido elegido por el espíritu santo para ser el nuevo Papa.
Su apellido Martínez nos puede dar pistas sobre sus peculiares raíces. Prevost Martínez nació el 14 de septiembre de 1955 en la ciudad estadounidense de Chicago, en el estado estadounidense de Illinois. Nacido de madre de raíces españolas, Mildred Martínez, y padre Louis Marius Prevost, de ascendencia francesa e italiano. Se trata de un Papa joven, con 69 años. En la bibliografía oficial de la Santa Sede se le destaca por ser el primer Papa agustino y el segundo procedente del continente americano, después del papa Francisco. A su vez, tiene dos hermanos, Louis Martín y John Joseph.
En su discurso se ha podido comprobar el dominio que tiene del español, ya que ha vivido 20 años en Perú. Sus orígenes españoles y la gran vinculación con los pueblos hispanoamericanos han estado presentes en su primer mensaje a los fieles desde el balcón de San Pedro.
“Un saludo a todos aquellos y de modo particular a mi querida diócesis de Chiclayo en el Perú, donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe y ha dado tanto para seguir siendo iglesia fiel de Jesucristo”, ha expresado emocionado. Por la moderación de sus palabras y del primer discurso, el diario italiano ‘La Repubblica’ le llamó “el menos estadounidense de los estadounidenses”.
El perfíl de León XIV
El nuevo pontífice cuenta con una amplia trayectoria eclesiástica. Ingresó al noviciado de la Orden de San Agustón (OSA) en 1977 e hizo sus votos solemnes en 1981. Fue elegido en enero por el papa Francisco para unirse a la Congregación de Obispos, es decir, el encargado de elegir a los nuevos obispos. Con este gesto, el papa Francisco mostró la confianza que tenía en él.
Se desplazó hasta el campus universitario de Villanova University, en Pensilvania. Allí consiguió obtener el grado de Matemática, además de una especialización en Filosofía. Sin embargo, poco después, se dio cuenta de que su camino estaba ligado a la iglesia.
El 1 de septiembre de 1977, comenzó su historia en la Iglesia, cuando ingresó al noviciado de la Orden de San Agustín, en la provincia de Nuestra Señora del Buen Consejo, en Saint Louis. Después de cuatro años profesó los solemnes votos, mientras estudiaba en la Catholic Theological Union de Chicago y se graduó en el Master of Divinity. Con 27 años fue enviado por la Orden a Roma para estudiar Derecho Canónico en la Universidad Pontificia de Santo Tomás de Aquino (el Angelicum). Asimismo, estudió en la Unión Teología Católica de Chicago, graduados con la licenciatura en Teología.
Por otra parte, en 1987 fue elegido director de vocaciones y director de las misiones de la provincia agustiniana de 'Mother of Good Counsel' de Illinois y en 1988 fue destinado a Trujillo como director del proyecto de formación conjunta de aspirantes agustinos en los Vicariatos de Chulucana, Iquitos y Apurímac. En este lugar, ostentó el cargo de prior de la comunidad (1988-1992), director de formación (1988-1998) y maestro de profesos (1992-1998). Por lo que hace a la archidiócesis de Trujillo fue vicario judicial (1989-1998) y profesor de derecho canónico en el Seminario Mayor "San Carlos y San Marcelo".