La Guardia Civil ha detenido este jueves a una mujer en Fene (A Coruña) tras una persecución por la AP-9, mientras busca aún a su compañero. La detenida es una toxicómana que está acusada de varios robos junto a su pareja, entre ellos el de 300 rascas de la ONCE en una gasolinera de Valdoviño, los cuales abandonaron el pasado sábado. Después de saltarse dos controles, los delincuentes se dieron a la fuga, siendo localizada la mujer en la localidad coruñesa poco después.

La pasada madrugada del jueves, la Guardia Civil dio el alto a un vehículo en un control en la AP-9, a la altura de Ferrol. El automóvil, ocupado por dos personas, hizo caso omiso y huyó de los agentes. Al llegar a un segundo control en Fene, los fugados impactaron contra un coche de la benemérita, teniendo que apartarse los agentes para evitar su atropello. Los ocupantes del vehículo son una pareja de toxicómanos muy conocidos por las autoridades los robos que han perpetrado.

La mujer fue detenida al poco tiempo en una calle de Fene, un municipio del norte de A Coruña. A escasos metros se encontró el vehículo con el que huyeron de los agentes, el cual se sospecha que es robado. La Guardia Civil comenzó las labores para localizar al segundo ocupante, la pareja de la detenida. Ambos ya estaban buscados por las autoridades por varios robos. El último de ellos fue este mismo martes por la tarde en una tienda de piensos de Mugardos. Los fugitivos se coordinaron para distraer al vendedor y sustraerle mil euros de la caja registradora.

La pareja de toxicómanos abandonó 300 cupones en una piscina de Oza-Cesuras (A Coruña)

El comerciante al que robaron explicó su modus operandi: “el hombre me pidió que llevara unas patatas al coche por lo que me pagó 16 euros y de vuelta en la tienda me encontré con la mujer, entonces saltaron las alertas”. Los dos toxicómanos ya eran conocidos en la zona por sus robos. Su suceso más sonado y pintoresco ocurrió el pasado fin de semana en el municipio de Oza-Cesuras.

La noche del lunes 25 de marzo, la mujer detenida se coló en una estación de servicio de Valdoviño. Las cámaras captaron como robaba algunas chocolatinas y más de 300 rascas de la ONCE, “851 euros en ventas”, según declaró la trabajadora del establecimiento. El sábado, la Guardia Civil encontró un vehículo robado en la puerta de una piscina en Oza-Cesuras, una localidad cercana. Al examinar los alrededores, los agentes encontraron centenares de boletos escondidos entre la maleza. Se trataba de los rascas de la ONCE robados, los cuales estaban todos rayados.

A esta pareja de ladrones no les sonríe la fortuna. Ninguno de los rascas encontrados estaba premiado. Los investigadores cruzaron datos, descubriendo que se trataba de los boletos que la mujer detenida había robado en Valdoviño. La ONCE bloqueó el cobro de cualquier premio con estos boletos cuando se denunció el robo. Sin embargo, la pareja podría haber canjeado algún premio, siempre que no superase los 2.000 euros. A partir de esta cantidad, los premiados deben identificarse al ingresar el dinero. Entre los cupones encontrados había algunos que fueron robados semanas atrás a un un vendedor de La Felguera (Asturias).