Pedro Sánchez y Pere Aragonès han sembrado este miércoles la semilla de la investidura de Salvador Illa, primero en una reunión en el Palau de la Generalitat y después en una comida de trabajo en el barrio del Eixample. La reunión entre sendos presidentes en el Palau de la Generalitat se ha desenvuelto en un clima de cordialidad y normalidad institucionalidad, según apuntan fuentes de Moncloa, que ha concluido con un acuerdo para “calendarizar” las diversas transferencias y acuerdos pendientes, como el servicio de Rodalies, las becas y ayudas al estudio. Además, se ha firmado el convenio para el traspaso definitivo de las competencias en la gestión del Ingreso Mínimo Vital.
Así, Sánchez y Aragonès han abordado la situación política general “y otros asuntos de interés común” en el encuentro que han mantenido este miércoles, comprometiéndose ambos a “culminar” los acuerdos pendientes entre las dos administraciones. La reunión se ha registrado en una semana clave para las negociaciones entre el PSC y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), aunque no han orillado el objeto de la misma que no era sino la firma del convenio para el traspaso de la gestión del Ingreso Mínimo Vital, una reivindicación de los republicanos.
Desde Moncloa, no obstante, han subrayado desde el anuncio del encuentro que éste se enmarcaba en clave institucional, al margen de las negociaciones para la investidura. El Gobierno lo desvincula, descargando la responsabilidad sobre los equipos negociadores y así lo han expresado en el comunicado conjunto emitido por ambas administraciones al concluir una reunión que ha transcurrido en “un clima cordial y de normalidad institucional”, en la que también se ha hecho un repaso a la “relación” entre sendos gobiernos tras la “firma de diversos acuerdos esta semana que concretan y calendarizan diferentes transferencias y acuerdos pendientes”. Entre ellos figura el servicio de Rodalies, las becas y ayudas al estudio o las iniciativas de investigación y desarrollo.
Objetivo: investidura
Se trata de la quinta reunión entre sendos presidentes desde que Aragonès accediera a la Generalitat, en mayo del 2021. Dos de estos encuentros han tenido el Palacio de la Moncloa como escenario -junio de 2021 y julio de 2022-, mientras que los tres restantes se han producido en la sede del Gobierno catalán -septiembre de 2021, diciembre de 2023 y la de este miércoles-.
En las cuatro primeras citas, Sánchez y Aragonès se reunieron con el procés como eje troncal de la discusión, con los indultos en el horizonte, la reforma del Código Penal e incluso el referéndum de autodeterminación. Sin embargo, esta última ha cambiado el foco a cuestiones competenciales de Cataluña. Un cambio que se entiende desde el prisma político en clave territorial catalana. El PSC ganó las elecciones del pasado 12 de mayo con relativa claridad y será su candidato, Salvador Illa, el que recoja el testigo de Aragonès en la Generalitat salvo sorpresa mayúscula.
De ahí se desprende que la fuerza republicana, en sus últimos días al frente del Ejecutivo regional, haya elevado el nivel de exigencia en cuestión de competencias autonómicas, reclamando las reivindicaciones históricas de la gestión de Rodalies, el Ingreso Mínimo Vital y, por último, la financiación “singular”, eclipsando a las clásicas demandas de los tiempos del procés, focalizadas a la autodeterminación de la región.
No obstante, nadie ha querido vincular esta reunión con las negociaciones para la investidura de Salvador Illa, pero sí se interpreta como un gesto de Moncloa para desencallar las conversaciones con los republicanos. De este modo, ERC se apunta algún que otro tanto en cuestiones de reivindicaciones competenciales antes de ceder el testigo a los socialistas catalanes, aunque queda pendiente la negociación que sigue abierta a día de hoy con el lunar de la nueva financiación autonómica para Cataluña. Un asunto por pulir cuya confección final puede pisar el acelerador tras este encuentro.
61.000 familias perceptoras del IMV en Cataluña
Por su parte, la Ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, también ha celebrado el acuerdo por el traspaso del Ingreso Mínimo Vital y ha publicado un hilo en X el que ha dado varios datos de importancia para comprender la magnitud de su funcionamiento. "Confiamos en la eficacia y en el beneficio que traerá este traspaso para los catalanes. Todos sumamos. Todos somos imprescindibles para acabar con la pobreza en este país", ha defendido, antes de pasar a aportar las cifras.
"El Gobierno aprobó en 2020 el IMV como una medida de carácter estructural para paliar las situaciones de pobreza más extrema. El IMV ya triplica los beneficiarios de las rentas mínimas autonómicas en 2020. Ha alcanzado un grado de desarrollo y consolidación muy positivo", ha escrito.
"El IMV llega en Cataluña a 61.000 familias, 200.000 personas, de las cuales un 45% son menores. Aquí hemos desarrollado itinerarios de inclusión social: 32,5 M€ y 34.102 personas beneficiarias. Un traspaso de estas características no es sencillo. Ha requerido meses de trabajo técnico entre los equipos de la Generalitat y del Ministerio de Inclusión. Mi enhorabuena a todos, porque estamos convencidos de que el IMV llegará a más personas y protegerá a más familias", ha zanjado.
Con la firma de este acuerdo, la @gencat asume la gestión del Ingreso Mínimo Vital.
— Elma Saiz (@SaizElma) July 24, 2024
Confiamos en la eficacia y en el beneficio que traerá este traspaso para los catalanes. Todos sumamos. Todos somos imprescindibles para acabar con la pobreza en este país.
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