La medida del pin parental aplicada por Vox en Murcia y que están planteando los partidos de derechas, es el tema de la semana y, seguramente, de momento, del mes de enero. 

Vox ha sabido aprovechar su mensaje de aplicación de tal medida y está recorriendo España de punta a punta. Ya sea para estar a favor o en contra, el partido de ultraderecha está en los temas de conversación de muchas personas y eso les favorece.

Pero un usuario de Twitter e ingeniero informático, David Fernández, ha sido el encargado de retractar los mensajes enviados por Vox y sus seguidores para tratar de justificar la aplicación del pin parental.

Más de un usuario afín a la ultraderecha española, había tratado de defender la aplicación de esa medida con vídeos e imágenes que, aunque aseguraban que pertenecían a colegios españoles y que habían sido grabadas estos días, en realidad eran de hace tiempo y no ocurrían ante menores de edad.

David, harto de las propuestas de los seguidores del pin parental, quiso hacer un hilo en Twitter retractándoles y mostrando que, verdaderamente, ellos están tratando de engañar a la gente.

En varios mensajes de defensores del pin parental, se trataba de justificar que este vídeo correspondía a "una muestra de adoctrinamiento a menores", cuando la realidad era que se trataba de un monólogo teatral en la Universidad Carlos III de Madrid. 

Otros usuarios decidieron usar una imagen de una mujer con un dildo, las cuáles usaron para justificar que "hay dos futuros: el de estas imágenes o el del pin parental". Pero, realmente las instantáneas pertenecen a una alumna de una universidad canadiense, como logró averiguar Maldita.

En este caso, es la propia cuenta oficial de Vox la que utiliza un vídeo en el que tratan de asegurar que "no volverán a adoctrinar a nuestros hijos en chorradas como éstas". Cuando la realidad es que las imágenes pertenecen a un monólogo, de también la anterior cómica, Pamela Palenciano, que realizó en una de las aulas de la Universidad Complutense de Madrid.

Otro usuario de Twitter trataba de justificar un vídeo de dos chicas que tocan la mano de un hombre desnudo tumbado, asegurnado que "es necesario el pin parental para que no enseñen a sus hijos ese tipo de burradas", cuando en realidad pertenece a un evento que se realizó en el Museo de Arte Moderno de São Paulo (Brasil), hace más de dos años. 

Un hilo de Twitter con el que se demuestra que las medidas parentales que quiere implantar la ultraderecha están siendo justificadas a base de mentiras y hechos que no tienen que ver con la realidad propuesta.

Esto se suma a las declaraciones que dío el consejero de Educación de la Comunidad de Madrid, Enrique Ossorio. El político del Partdo Popular aseguró que de los 1,2 millones de alumnos que hay en Madrid, no hay ninguna denuncia, solo una queja por escrito y dos en Twitter sobre prácticas extraescolares. 

"Es un problema que no existe. No hay adoctrinamiento en las aulas ni se producen charlas que no sean deseadas por los padres", aseguró ayer Ossorio, retractando, también, al partido de ultraderecha.