Un tranquilo día de piscina en Pilar de la Horadada (Alicante) se tornó en aciago para dos mujeres, después de que una de ellas fuera expulsada por llevar un bañador de pata. 

Raquel Pérez, la pareja de la mujer expulsada, explicó en un post de Facebook el asunto, mostrando imágenes del bikini de la discordia. 

Según su relato, el socorrista de la piscina municipal le exigió a la cónyuge de ésta que abandonara la piscina municipal por incumplir las normas de vestimenta, que indican que las mujeres deben llevar bikini o bañador tipo braga. 

Poco le importó al socorrista que en el momento del incidente, la pareja estuviera bañándose con su hija de año y medio. Ésta, no paró de llorar durante el camino de vuelta a casa, que es lo que más le duele de todo, según señala Pérez. 

Tras el suceso, la pareja pidió la hoja de reclamaciones y acto seguido acudió al cuartel de la Guardia Civil de San Javier (Murcia), para denunciar los hechos. Cientos de usuarios han querido mostrar su apoyo a las afectadas, ante este nuevo episodio de discriminación hacia la mujer. 

Una normativa ilegal

Ni falta hace decir que esta "normativa de vestimenta" de la piscina municipal a la que apeló el socorrista para echar a la pareja de Pérez del agua es ilegal. De hecho, también lo es la normativa que existe en algunas instalaciones públicas que prohíbe que las mujeres tomen el sol sin la parte superior del bañador. Según advirtió recientemente la Federación Española de Naturismo (FEN) a Elplural.com, estas restricciones son discriminatorias y limitan la libertad de expresión de la mujer.