La Navidad ya está a la vuelta de la esquina y la confusión sobre cómo y con quién se puede celebrar sigue siendo una incógnita para algunos, lo que ha quedado claro es que estas fiestas no se parecerán mucho a las de años anteriores. Por eso, la presentadora de televisión Paz Padilla ha querido dedicar unos minutos de su tiempo para lanzar un mensaje de concienciación.

Para la colaboradora de 'Sálvame' ha sido un año complicado, no solo por la pandemia, sino por el fallecimiento de su marido Antonio. A pesar de ello, sigue conservando el espíritu navideño: “Yo pienso que es tan bonita y que tengo que estar por encima de todo eso y de superar la adversidad; y pensar que la vida va a continuar por muy fuertes que sean los golpes”, empezaba confesando.

La clave de estas fechas no es la simple celebración, sino que ella se refiere a la importancia de estar bien y estar al lado de los seres queridos. “Lo importante es estar aquí, que tengamos ganas de ser felices, habrá momentos para todo“, opinaba con tono optimista.

Para los que le recuerdan el duro año que ha pasado, Padilla les responde con total sinceridad, diciéndoles que "no lo voy a poder olvidar nunca“, asegurando a su paso que "cuando la vida golpea, no se sabe qué año es”.

De este modo, el próximo 31 de diciembre, para la presentadora será un día más, "da igual que sea Fin de Año o navidad”, si el fin es ser feliz con el día a día, según explicaba a los colaboradores de 'Sálvame'. Además, Padilla sorprendía a los mismos al desvelar que va a escribir un libro, como una guía de acompañamiento para aquella gente que ha perdido a un ser querido, adelantando que será "divertido".

Propósitos para 2021

No obstante, la presentadora ha aludido a la vez que sigue habiendo gente que le reprocha su positivismo acusándole de que no recuerda a su marido. Su respuesta es de lo más contundente: "soy una persona optimista pero eso no quiere decir que no tenga dolor en el alma y cuanto antes aprenda yo a vivir con ganas, seré más feliz. El tiempo que me quede aquí voy a ser feliz con humor como me enseñó mi madre”, se defendía.

Concluyendo con la lección más importante del año. "La vida es amar y valorar lo que tenemos", de este modo, le pide al año que está por venir "humor y amor" porque la vida no se detiene y "no se puede perder la sonrisa”.