Fayna Bethencourt acudió a Viajando con Chester, programa presentado por Risto mejide en Cuatro, para contar el infirno que vivió durante los 16 años de relación con Carlos Navarro, 'El Yoyas', quien la maltrató física y psicológicamente. Con su testimonio, la ex concursante de Gran Hermano tiene el objetivo de poder ayudar a las mujeres que estén pasando por una situación como la que ella sufrió.

Navarro tiene una condena firme de casi seis años de cárcel por un delito de maltrato continuado sobre su exmujer y sus dos hijos. En la actualidad, se encuentra en paradero desconocido, ya que desatendió el requerimiento de ingreso voluntario en prisión el pasado 14 de noviembre. “Yo nunca estaré segura mientras este hombre esté en la calle”, reconoce Bethencourt.

Ambos comenzaron su relación en 2001 durante su participación en la segunda edición de Gran Hermano, donde se conocieron. Él terminó saliendo antes que ella por una expulsión disciplinaria, ya que tuvo un mal comportamiento dentro del programa. Fayna explicó en ese momento que él no la maltrató, unas palabras de las que hoy día se arrepiente pero en ese momento no veía la realidad.

El estremecedor relato de Fayna

Fayna repasó en Viajando con Chester toda su historia con 'El Yoyas', desde cómo lo conoció hasta el proceso de convivir con un maltratador. La ex concursante de Gran hermano contó cómo comenzó todo y cómo fue a peor, pese que “tenía el complejo de salvadora, pensaba que le podía cambiar”. “Una de las primeras cosas que hace es aislarte de tu familia y seres queridos”, explicaba la víctima de violencia machista.

"Yo me enamoré de un tío que decía que amaba a su familia y ayudaba a las señoras mayores con las bolsas. Te vende la moto de que 'tú eres la primera mujer de la que se ha enamorado' y tienes la necesidad de ayudarle. Empezamos la relación al revés. Nosotros empezamos una convivencia y el hecho de haber empezado la relación en Gran Hermano nos condicionó mucho. El maltratador lo primero que hace es aislarte. En ese aislamiento yo conozco la parte más amable", comenzó relatando Fayna.

"¿Cuándo aparece el monstruo?", preguntó Risto. "No tardó en aparecer. Seguíamos en Madrid y en la calle, al contestar una cosa, me apretó tanto la mano que se me saltaron las lágrimas. Lo primero que pensé es que espero que no lo haya visto nadie. Las agresiones más brutales fueron hacia el final de la relación. Los monstruos existen y no tienen cara de Drácula o Frankenstein, los monstruos son muy humanos”, respondió la entrevistada.

La violencia era cada vez mayor

Cuando Fayna Bethencourt se quedó embarazada, el maltrato se endureció más aún, una escalada que terminaría con episodios brutales. “Yo me defendía cada vez más y la violencia era cada vez mayor”, aseguró Fayna. "Creo que durante muchos años he pasado más tiempo en la cocina que en otras partes de la casa. Yo era como un ama de casa de los años 50. Si yo no cocinaba algo 'con amor', no se lo comía. Como mujer, mi función era esa", afirmó la canaria, dejando sin palabras a Risto Mejide.

Las amenazas y prohibiciones de 'El Yoyas'

Su maltrador llegó a prohibirle que trabajase, incluso cuando estaban pasando por un nefasto momento económico: "Él me decía que el de la tele soy yo y yo di por sentado que yo me tenía que quedar en casa con mi hija. Hubo un momento en el que vivíamos en la montaña alejados y no me dejaba ir a la compra. Me decía que si le ponía los cuernos el Garrafo era muy grande. Dando a entender de que si te entierran, no te van a encontrar".

Fayna señaló los celos de Carlos. La joven se pasaba todo el día "encerrada" en casa. "No me dejaba ni ir al supermercado sola", declaró la canaria, un aislamiento que disminuyó un poco cuando tuvieron a sus hijos: "En ese momento empecé a tener más autonomía en el pueblo en el que vivíamos. Entonces ya podía ir a comprar".

El punto de inflexión

Fayna denunció al padre de sus hijos a raíz de un mensaje “de índole muy sexual” a su hija mayor: “Me senté en comisaría, llamé al 016 y me derrumbé”. Pero finalmente terminó retirando esa enuncia después de que 'El Yoyas' la contactara pidiéndole perdón.

El punto de inflexión fue “una agresión física muy dura y brutal”, que ha contado con un nudo en la garganta: “Me dejó el cuerpo lleno de moratones, siempre tenía cuidado de no marcarme la cara”, recordaba la entrevistada, quien dice que lo más común era que le retorciera “el cuello y las extremidades”. La joven y su padre decidieron interponerle una nueva denuncia a su maltratador, que acabaría con una pena de casi seis años de cárcel por un delito de maltrato continuado sobre su exmujer y sus dos hijos. Aunque Carlos Navarro trata de eludir esta sentencia y está huido de la justicia.

La angustia de Fayna Bethencourt no cesa mientras su ex pareja esté libre, pues tiene muy presentes sus amenazas: “A mí me da igual terminar en la cárcel por acabar contigo y tu padre, tendré techo y comida”, le dijo 'El Yoyas'. Por otro lado, Fayna tampoco olvida la polémica entrevista al maltratador publicada en el El Mundo: “No hay excusa, me parece bien que le entrevisten, pero con policías para detenerlo”, señaló Bethencourt, que pide más implicación de las instituciones para frenar la violencia de género.