El líder de la oposición y presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, cometió un error en su reciente entrevista con Carlos Alsina en Onda Cero al hablar sobre la propuesta que lleva defendiendo de cara a las próximas elecciones municipales y autonómicas: que gobierne la lista más votada.

“Mi ofrecimiento está muy claro: comprometámonos a que el que gane las elecciones, el que obtenga más votos, deje gobernar al otro. Siempre ha sido así en España”, defendió, unas palabras que no pasaron desapercibidas en redes sociales.

Por ello, la reacción de Anabel Alonso, que suele mojarse frecuentemente en términos políticos, ha sido una de las más compartidas: “Ya sabéis, el que gane que deje gobernar al que pierda”, ironizó, extrayendo así esta conclusión de las declaraciones de Feijóo.

Otros comentarios en Twitter se han sucedido por la misma línea, incluso otros usuarios anónimos han encontrado similitudes entre estas palabras de Feijóo con su antecesor y expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy: “Yo creía que Mariano Rajoy era insuperable hasta que escuché a Feijóo”, valora uno de ellos.

 

La iniciativa de Feijóo y el desplante de Ayuso

Quien no gana las elecciones “no merece gobernar”, fue la manera en la que defendió el líder de los populares uno de sus planes de cara a los comicios, aunque es un planteamiento que se remite para las municipales y no las generales.

“Me gustaría tener la constancia de que Pedro Sánchez lo haría. Si lo asume, yo lo cumpliré”, prometió este miércoles en el programa de Alsina. “Si no las gano no merezco gobernar”, matizó, incluyéndose así en su propia teoría.

El Plan de Calidad Institucional de Feijóo, con una batería de 60 medidas de “regeneración” en el caso de llegar a La Moncloa, también incluye blindar la comunicación con el líder de la oposición.

No obstante, en lo relativo a la propuesta de la lista más votada, Feijóo ha recibido opiniones dispersas desde su propia cúpula del partido. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, no llegó a valorarla como mala, pero propuso que se le incluyera una segunda vuelta, tal y como se aplica en los comicios de Francia o Colombia.