La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, se ha pronunciado en cuanto a la crisis de precios de los carburantes y de la electricidad. En sus declaraciones ha solicitado a las compañías eléctricas y a las petroleras “contribuir a la solución final y aportar”. Las compañías eléctricas Iberdrola, EDF y Enel hacían lo propio esta mañana pidiendo un tope a los precios del gas, materia prima que utilizan para la generación de la electricidad.
Montero ha explicado que el Gobierno ha pedido un esfuerzo a las petroleras de cara a las bonificaciones previstas para el gasóleo de uso profesional, de forma que se pueda rebajar el precio del combustible para abordar el paro de los transportistas.
En cuanto a las eléctricas ha apuntado que se deben minimizar los “beneficios caídos del cielo” de forma que los precios de la electricidad sean lo más real posible. La minimización de estos beneficios podría suponer una reducción de hasta un 5% de la factura de la luz. De esta forma, el precio de la electricidad sería lo más ajustado posible a realidad del ‘pool’ del gas.
Asimismo, la ministra se ha mostrado confiada en que se llegará a un acuerdo para poder rebajar el coste de los carburantes a través de la reunión con los transportistas. Los precios de la gasolina y el diésel habrían disminuido hoy, pero la intención del Gobierno es devolver la estabilidad a un sector que se está viendo notablemente perjudicada por el alza de los mismo durante los últimos meses.
La propuesta del Gobierno consiste en ayudas directas de 500 millones de euros para bonificar el gasóleo profesional. La tardanza del Gobierno en la adopción de medidas ha sido justificada, según la ministra, debido al diálogo con los agentes sociales involucrados.
La ministra ha mostrado su apoyo a todos aquellos transportistas que “se han visto coaccionados” a la hora de poder sacar sus camiones. Ha condenado las “fórmulas violentas” y ha precisado que se debe cumplir con todos los acuerdos llevados a cabo.
La ministra ha querido hacer hincapié en que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha intentado convencer durante toda la semana a sus socios europeos para cambiar la regulación del sector eléctrico, sacar al gas del ‘pool’ y así poder rebajar los precios de las facturas de los consumidores.
