El CEO y fundador de Glovo, Oscar Pierre, ha declarado este martes ante el Juzgado de Instrucción 31 de Barcelona que la decisión de laboralizar a sus empleados, anunciada apenas 24 horas antes del juicio, es simplemente una "coincidencia". "Puede parecer una estrategia de defensa, pero es una coincidencia", ha declarado el directivo ante el juez, investigado precisamente por las condiciones laborales de la plantilla de Glovo, hasta este lunes contratados como falsos autónomos. Según fuentes presentes en la sala, el directivo ha defendido su modelo laboral como "lícito" y justifica la decisión de laboralizar a los falsos autónomos de Glovo para mantener la "paz social con las administraciones".
El anuncio del cambio de modelo laboral de Glovo se ha producido este lunes, apenas 24 horas antes de que su consejero delegado y fundador, Óscar Pierre, declare como investigado en un proceso penal en un juzgado de Barcelona. El directivo ha declarado esta mañana en un proceso penal abierto tras una investigación a la compañía que arrancó con una denuncia presentada por la Fiscalía contra la empresa catalana y sus directivos, entre ellos Pierre. Ya en el mes de julio se conoció que un juzgado de Barcelona estaba investigando a la compañía por un presunto delito contra los derechos de los trabajadores.
Una investigación que se ha producido en paralelo a las multas económicas que estaba recibiendo la compañía de delivery por seguir funcionando con falsos autónomos, hasta este mismo lunes, y en paralelo también a las investigaciones de la Inspección de Trabajo e incluso del Tribunal Supremo. La Fiscalía aseguraba que el modelo laboral de Glovo "menoscaba y suprime" los derechos de los trabajadores por su condición de falsos autónomos. "Glovo utiliza trabajadores a los que exige su alta en el régimen especial de trabajadores por cuenta propia de la Seguridad Social, estableciendo con ellos una relación en apariencia mercantil que le permite reducir sus costes empresariales", denunciaba la Fiscalía.
Ante esto, la Fiscalía pedía citar a declarar al CEO y fundador de la compañía como investigado en el caso. Finalmente, en el mes de octubre se confirmó esta petición y el directivo ha tenido que acudir este martes 3 de diciembre a declarar ante el juez por el modelo laboral que, hasta ahora, ha practicado Glovo con sus empleados, considerándolos trabajadores autónomos.
Glovo se enfrenta a multas millonarias por no respetar la ley rider
La propia Fiscalía aseguraba en su denuncia que "a pesar de todo lo anterior, Glovo continúa manteniendo la misma relación de trabajo con sus trabajadores, incluso en fecha posterior a 12/01/2023, quienes se siguen viendo obligados a darse de alta como autónomos y a abonar sus propias cotizaciones si quieren continuar prestando los servicios para la empresa". Todo ello a pesar de la entrada en vigor de la ley rider aprobada por el Gobierno para evitar estas condiciones laborales entre los riders. Glovo ha hecho frente a sanciones y multas económicas que ya superan los 200 millones de euros en el acumulado de los últimos años.
No obstante, este mismo verano el Gobierno ha reforzado el control para asegurar la protección laboral de los riders. El Ejecutivo ha puesto en marcha "la vía penal" contra estas empresas para no solo imponer multas económicas, sino también "sanciones penales", a aquellas empresas que no respetan los derechos laborales plasmados en la ley. Así, desde enero de 2023, están sobre la mesa penas de prisión, de seis meses a seis años, a aquellos “que impongan condiciones ilegales a sus trabajadores mediante su contratación bajo fórmulas ajenas al contrato de trabajo, o las mantengan en contra de requerimiento o sanción administrativa”.
El CEO y fundador de Glovo tenía que declarar este martes ante el Juzgado de Instrucción 31 de Barcelona precisamente por no respetar la ley rider. Sin embargo, la sorpresa se produjo a primera hora del lunes cuando la compañía, de origen catalán pero dependiente de la matriz italiana Delivery Hero, anunciaba que dejaba atrás su modelo laboral de falsos autónomos para contratar a personal laboral 100%. Un cambio que se producirá a todos los niveles y en los 900 municipios en los que Glovo está presente en todo el territorio nacional.
Asimismo, Glovo ha anunciado este lunes la apertura de una mesa de diálogo con los agentes sociales para dotar de todas las garantías al proceso y asegurar que el cambio de operativa se desarrolle "con consenso". Un foro que, tal y como ha avanzado la compañía, estará abierto al resto de operadores del sector para que puedan realizar en la práctica procesos de transición similares para sumarse así a los acuerdos alcanzados por la plataforma.
Por su parte, Delivery Hero, la empresa propietaria de la catalana Glovo, ha cifrado este mismo lunes un impacto esperado de 100 millones de euros en sus cuentas por el cambio de modelo laboral de la empresa en España. La plataforma alemana ha estimado que el cambio de modelo de su filial registrará este impacto económico reflejado en su resultado bruto de explotación (Ebitda) ajustado para el ejercicio fiscal de 2025. "Hoy, la dirección de Glovo decidió cambiar de un modelo autónomo a un modelo basado en empleo para sus repartidores en España para evitar mayores incertidumbres legales que conduzcan a un aumento de contingencias", ha justificado la compañía alemana minutos después de conocerse la decisión de la empresa de delivery catalana.