El Banco Central Europeo (BCE) ha aprobado una nueva subida de los tipos de interés de 50 puntos básicos. Una vez concluida la reunión, el índice que determina el precio del dinero se sitúa en el 3%, alcanzado ya el valor del 3% que se preveía alcanzar antes de la próxima primavera. Esta es la quinta subida consecutiva que acomete la entidad europea, que repite el incremento de la aprobada a mediados de diciembre. Así, los saltos de 75 puntos básicos parecen haber quedado atrás, la última fue en octubre, dejando paso a avances más moderados. No obstante, la realidad es que el ‘rally alcista’ que el BCE inició en verano continúa su andanza, lo que encarecerá las hipotecas una vez más.

El Euríbor, índice al que están ligadas las hipotecas y que crece conforme lo hacen los tipos de interés, seguirá la senda ascendente que comenzó desde que se abandonar los tipos negativos. Cabe señalar que su subida no afectará a todos los préstamos hipotecarios, sino solo a los de tipo variable que tengan prevista una revisión próxima y a las nuevas hipotecas que puedan firmarse, tanto variables como fijas, ya que el tipo fijo también se ve afectado por el incremento del variable.

Hipotecas 300 euros más caras al mes

Para las afectadas, el valor del Euribor se sitúa, con los datos del cierre del mes de enero, en el 3,33%, valor no experimentado desde 2008. Con estas cifras, una persona que tenga contratada una hipoteca variable a 30 años de 150.000 euros y con un diferencial del 0,99% más Euríbor sufrirá un aumento de su cuota hipotecaria de alrededor de 294 euros. En términos absolutos, pasará de pagar unos 450 euros a unos 744 por mes, lo que equivale a un desembolso anual adicional de más de 3.500 euros.

Con las mismas condiciones, una hipoteca de 300.000 euros de capital pendiente de amortizar y 30 años pendientes de pago tendría que asumir un encarecimiento mensual de 588 euros, lo que supone más de 7.000 euros al año adicionales. Así, pese a la recuperación de la estabilidad en el mercado hipotecario que algunos expertos del sector ya han advertido, las familias seguirán teniendo que asumir subidas desmedidas, en el caso de que les toque renovar un préstamo variable, o enfrentarse a tasas de nueva incorporación muy elevadas.

El Gobierno se plantea congelar los precios

Ante esta situación, ahora el Gobierno se plantea congelar el precio de las hipotecas para evitar subidas desmedidas inasumibles para la clase trabajadora. Fuentes de la parte morada del Ejecutivo confirman a ElPlural.com que a lo largo de estos días están presionando para imponer un tope a los préstamos hipotecarios, propuestas que ya trasladaron en septiembre. "Es algo que me parece que clama al cielo", trasladan. En esta línea se ha pronunciado la vicepresidenta y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, que ha exigido "congelar las hipotecas" y "moderar los beneficios" de los bancos que, aprovechándose de las subidas de tipos están declarando beneficios récord

La parte socialista ha confirmado que está abierta a estudiar las propuestas y actuar buscando un “equilibrio” y "pensando en la gente".  "Vamos a ver qué nos traslada”, ha señalado la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto en referencia a la propuesta de Díaz. “Si hay una propuesta por parte del Ministerio de Trabajo sobre la congelación de las hipotecas se estudiará [...] vamos a ver cuáles son las propuestas y en el seno del Gobierno, estoy segura, tomaremos la mejor decisión", añadía.

Cinco subidas desde verano

El primer incremento de medio punto se produjo en julio, momento en el que se alejó el precio del dinero de los valores negativos y se colocó en el 0,5%. A este le siguieron el aumento histórico realizado en septiembre, que catapultó los valores hasta el 1,25% y la subida de subida de 75 puntos básicos aprobada en octubre, que catapultó el índice al 2%, máximo histórico desde 2009. La última se produjo el 15 de diciembre, momento en el que el índice se situó en el 2,5%.

El último anuncio, que deposita el valor ya en el 3%, ha levantado asperezas y discrepancias, ya que; a pesar de que la inflación de la zona euro está remitiendo y del perjuicio que supone esta subida a familias y empresas solicitantes de crédito, el BCE ha decidido seguir con su política de encarecimiento del dinero. El organismo toma la decisión este jueves después de conocerse en las horas previas que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) ha decidido llevar a cabo una subida de los tipos de 25 puntos básicos.

En el país norteamericano los valores alcanzan ya el rango de entre el 4,50% y el 4,75% después de aprobar la séptima subida realizada, seis de ellas en tan solo un año. A esta, ha anunciado ya el organismo, la sucederán más, lo que supone alcanzar el mayor precio del dinero registrado por el país desde hace más de 15 años. La autoridad monetaria estadounidense ha adelantado, además, que acometerá otras dos nuevas subidas de los tipos de interés a lo largo de 2023.

Banco de Inglaterra

El Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra ha decidido en las horas previas elevar también en 50 puntos básicos el tipo de interés de referencia para sus operaciones, pasando a situarse en el 4%, su nivel más alto desde el otoño de 2008, en respuesta a la escalada de la inflación, según ha anunciado la institución. La subida de tipos anunciada amplía a diez reuniones consecutivas la secuencia de incrementos del precio del dinero acometida por el Banco de Inglaterra, que adoptó la decisión por una mayoría de siete votos a favor y dos en contra, que preferían mantener la tasa en el 3,50%.

La decisión de 'la vieja dama de Threadneedle Street' mantiene así el ritmo de la normalización de su política monetaria, a diferencia del Comité Federal de Mercado Abierto de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), que lo ha reducido en 25 puntos. "La evolución de los datos a corto plazo será crucial para evaluar con qué rapidez y en qué medida disminuirán las presiones inflacionistas internas y externas", advierte el banco central.