Isabel Díaz Ayuso no ceja en su empeño de confrontar al Gobierno de Pedro Sánchez, incluso en materia de educación. La Comunidad de Madrid ha enviado al Ejecutivo una propuesta para cambiar completamente el acceso a la universidad en todo el territorio español que pasa por un nuevo modelo de Selectividad con dos tipos de exámenes distintos: una prueba única que rija para todo el territorio español y otra autonómica para los estudiantes que quieran realizar la carrera en su propia comunidad. Todo bajo el argumento de que hay regiones que "no tienen el mismo nivel de exigencia y calidad educativa" que Madrid, tal y como ha defendido la propia presidenta regional.

Este viernes, la Administración madrileña, y más concretamente la Consejería de Educación que dirige Enrique Ossorio, ha enviado al ministerio de Educación su propia alternativa a la Evaluación para el Acceso a la Universidad, conocida como Evau. Lo ha hecho el marco de consultas que ha abierto la cartera liderada por Pilar Alegría para llegar a un acuerdo con las autonomías de cara a aprobar un nuevo real decreto que regule el acceso a los estudios universitarios. De hecho, el secretario de Estado José Manuel Bar ha iniciado esta misma semana una ronda de conversaciones con las distintas regiones para buscar "puntos de aproximación" que ayuden a "consensuar" una norma.

"Son decisiones que estamos tomando y estudiando por algo que está pasando en España y que es muy perjudicial. Y es que no tengamos una Selectividad única que iguale a todos los estudiantes y no divida al país aún más en materia económica", ha defendido este viernes Ayuso ante los medios de comunicación a la entrada de un acto del Bachillerato de Excelencia. "Estoy convencida de que debería haber una sola prueba pero el Gobierno se ha negado por muchísimos motivos", ha insistido para asegurar que "mientras tanto" llega a La Moncloa un Ejecutivo nacional liderado por el PP para cambiarlo, su Administración tiene que "buscar opciones y estudiarlas".

Dos exámenes distintos

De esta forma, Ayuso rechaza dejar de lado su lucha para que exista una prueba única en todo el territorio español aunque ahora ha introducido la novedad de que también se de la opción de una prueba autonómica para aquellos que no quieran salir de su región. A juicio del Ejecutivo popular, su proyecto, que se pone encima de la mesa "ante la negativa del Gobierno" a impulsar un solo examen y que se aplicaría a nivel nacional, "conjuga el principio de autonomía de las universidades y las competencias de cada comunidad autónoma con el principio de equidad e igualdad de oportunidades", afirma el documento presentado.

Sin embargo, la iniciativa propuesta por la Comunidad de Madrid pone sobre la mesa dos escenarios muy distintos. Si un alumno de Madrid elige el modelo autonómico su nota solo computaría para los centros universitarios de esta región pero, en el caso de querer trasladarse a otra comunidad, tendría que acogerse sí o sí a la prueba única. Con esto, el estudiante estaría obligado a escoger antes de enfrentarse a Selectividad qué modelo quiere o, en su defecto, verse forzado a tener que elegir el examen único para poder dejarse la puerta abierta a estudiar en cualquier centro y fuera de su provincia.

"Hay una gran queja por parte de los universitarios madrileños. Nos explican que, al ser una región de acogida, como tiene que seguir siendo, en muchas ocasiones son perjudicados", ha comenzado a justificar para después reivindicar "la calidad" de la capital desde un agravio comparativo. "Al no tener el mismo nivel de exigencia y calidad educativa en todas, algunas están equiparadas a Madrid, -ha matizado-, al haber sistemas educativos distintos en otras regiones, ellos luego se quedan sin plazas con muy buenas notas en su propia comunidad autónoma", ha afirmado.

Ayuso intenta así confrontar el proyecto propuesto por el Gobierno de coalición, que apuesta por avanzar hacia "una mayor homologación y equilibrio entre las pruebas para asegurar que sean efectivamente equiparables entre los distintos territorios" pero que rechaza por completo implantar un examen único para todo el territorio, como pide precisamente el Partido Popular y el Ejecutivo madrileño.

Las regiones en manos del PP consideran que el borrador presentado por el ministerio de Educación en julio de este año es "injusto". Aseguran que la existencia de 17 exámenes distintos de Selectividad perjudica a los alumnos dado que tienen que competir por las mismas plazas con pruebas de acceso diferentes. Madrid, en concreto, manifiesta que esto "no resuelve el problema fundamental, que es la desigualdad de los alumnos". "Lo que no tiene sentido es que en España tengamos 17 evau. Deberíamos caminar como un único país y que todos los estudiantes tengan las mismas oportunidades y los mismos conocimientos básicos", ha defendido, en línea con la denuncia que ha realizado recientemente y con sus primas catalanas como protagonistas, de las que dijo que "saben las regiones de Cataluña pero no los ríos de España".

El Ministerio es optimista

Por su parte, desde Educación afrontan las negociaciones con optimismo ya que creen que "hay margen para el acuerdo". Afirman que "ya nadie discute" que hay que cambiar el sistema de evaluación para entrar en la universidad debido a que socialmente se reconoce que es un procedimiento que lleva décadas sin reformarse y que supera más del 90% de los alumnos que se enfrentan a ella.

Con todo, en la pasada Comisión General de Educación, el Ministerio aseguró que no era posible realizar el mismo examen con las mismas preguntas y el mismo día en toda España, desde el punto de vista jurídico ya que esgrimen que "invadiría competencias autonómicas y de las universidades". Madrid, sin embargo, asegura que esto no interfiere en la jurisdicción y garantiza "la igualdad sustancial de todos los españoles" en materia de enseñanza.