La Fiscalía Anticorrupción investiga al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso por adjudicar millones de euros en Sanidad sin control alguno. Un escándalo, el de las prórrogas millonarias al Grupo Empresarial Electromédico (GEE), que ha desvelado en exclusiva ElPlural.com y que ya ha provocado el cese de gerentes de hospitales de la región tan importantes como el Clínico o el Gregorio Marañón.

Todo ello debido a las prórrogas recibidas por el Grupo Empresarial Electromédico (GEE), encargado del mantenimiento de radiología convencional, equipamiento electromédico y equipos de alta especificidad técnica.

El aforamiento de Escudero

La investigación de la Fiscalía da sentido a la decisión comunicada este lunes por Isabel Díaz Ayuso de nombrar al actual consejero de Sanidad de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, senador por designación autonómica.

Este nombramiento garantiza a Escudero un aforamiento del que carecería hasta la actualidad y que, según reconocen fuentes parlamentarias, le "blinda" ante posibles denuncias judiciales que podrían derivarse de la polémica política gestión sanitaria desarrollada por el gobierno del Partido Popular en la Comunidad de Madrid.

Desde la época de Aguirre

Las adjudicaciones sin control no solo afectan al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, pues algunas se remontan a la época de Esperanza Aguirre. Por ejemplo, según lo desvelado por este periódico, en el Hospital Clínico se produjeron hasta 134 contratos desde 2010 (cuando comenzaron los aplazamientos) hasta 2021, alcanzando un montante de casi 27 millones de euros.

También en exclusiva, ElPlural.com desveló que La Paz lleva diez años encadenando prórrogas al Grupo GEE. Un escándalo que en este centro también tiene cifras de vértigo: más de 230 contratos por un montante que alcanza casi los 22.500.000 euros.

Sin mediar licitación

En definitiva, la Fiscalía investiga una reiterada concatenación de continuidad de servicio, sin soporte en derecho y sin causa que justifique el que el contratista GEE siguiese facturando en más de una decena de hospitales madrileños sin mediar licitación alguna durante prolongados espacios de tiempo.

De igual modo, la Fiscalía investiga las ingentes cantidades de dinero obtenidas por el Grupo GEE, el oscurantismo en torno al personal que desempeña el servicio en hospitales como La Paz y la inexistencia de un control en cuanto a la determinación del valor económico de cuantiosos contratos.

Lo cierto es que el Grupo Empresarial Electromédico, a través de sus múltiples firmas (Mantelec S.A., Iberman S.A., Asime S.A., ITH Maroc y Euskalman S.L.), monopoliza en Madrid el 90% de las adjudicaciones por los servicios de mantenimiento de los equipos de electromedicina en los hospitales creados por la expresidenta Esperanza Aguirre.

Este compendio de contratos realizados por la Comunidad de Madrid con el grupo GEE, en su mayoría por procedimiento de emergencia, con prórrogas infinitas y al margen de la Ley 9/2017, de 8 de noviembre, de Contratos del Sector Público, ha posibilitado que este entramado haya sido beneficiario de cantidades que ascienden a 30 millones de euros en La Pazmás de 22 en el Clínico San Carlos16 en el Severo Ochoa14 en el Ramón y Cajal3 millones en el Niño Jesús900.000 euros en el Universitario de Getafe5 millones en el Gregorio Marañóncientos de miles de euros en el Carlos III y más de 700.000 en el Hospital Universitario Príncipe de Asturias.

Moreno Bonilla, tras la estela de Ayuso

Tal y como viene informando ElPlural.com, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, no solo marca la agenda del Partido Popular con sus constantes ataques al Gobierno. Su gestión sanitaria, centrada en beneficiar a la sanidad privada a costa de la pública, que ha provocado una gran indignación en la región con marchas multitudinarias para denunciar este desmantelamiento, también ha servido de inspiración para otros pesos pesados dentro del organigrama de Génova, 13.

En este sentido, uno de los alumnos más aventajados de Ayuso es su homólogo en Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla. El presidente andaluz no ha tenido reparo alguno en copiar el modelo sanitario de la Comunidad de Madrid, debilitando la Atención Primaria y manteniendo contratos fuera del plazo de licitación. Un modus operandi que vuelve a tener al Grupo Empresarial Electromédico (GEE) como foco principal, puesto que esta empresa es la beneficiaria de todo este escándalo. Para ser más precisos, según ha podido saber este medio, la compañía se habría beneficiado de alrededor de 13 millones de euros a través de diferentes adjudicaciones hechas por la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía.

Unas adjudicaciones que el propio Gobierno de Moreno Bonilla ha admitido, asegurando que la “la posibilidad de prórrogas está regulada igualmente en la Ley de Contratos del Sector Público y son habituales” y que se pueden consultar “en la página web del Servicio Andaluz de Salud” (SAS).

Málaga y Cádiz, en el ojo del huracán

En concreto, todo este agujero se produce a través de las Plataformas Provinciales de Logística Sanitaria en Andalucía (PLS) en las que se divide la región y que dependen directamente del Servicio Andaluz de Salud. Estas plataformas logísticas son las encargadas de firmar los contratos con las empresas adjudicatarias y distribuir los materiales médicos a los hospitales que corresponden a cada una de las provincias. Así, y hasta donde ha podido conocer este diario, la Junta dirigida por Moreno Bonilla tiene actualmente tres contratos con el GEE que se han mantenido fuera de toda prórroga, permitiendo a esta compañía resultar beneficiaria de millones de euros.

Málaga cuenta con un contrato para el mantenimiento del material electromédico con un importe de licitación de 6.355.708 euros, tal y como figura en el detalle de esta adjudicación en el portal de contratación pública de la Junta. Este comienza en febrero de 2016 y finaliza cuatro años más tarde, el 31 de mayo de 2020. Pero, a pesar de su conclusión, los servicios se han mantenido fuera de contrato y de licitación, lo que ha llevado a ASIME a ganar desde entonces una cuantía superior a 8.299.500 euros.

Lo mismo ocurre con los aparatos de radiología con destino a los centros sanitarios pertenecientes al Servicio Andaluz de Salud en Málaga, para cuyo mantenimiento se licitó un contrato por valor de 834.000 euros desde el año 2017. Este finalizó en mayo de 2022, por lo que lleva facturando fuera de contrato desde entonces 412.642 euros adicionales.

En Cádiz se da una situación similar: esta plataforma tiene un acuerdo con ASIME por valor de 8.123.992 euros, como se indica en el apartado de esta concesión en el portal de contratación. Este se inició en 2014 y concluyó en octubre de 2021, por lo que fuera de este plazo ASIME ha facturado ya más de 4.890.000 euros.

Sumando los tres excedentes mencionados, Málaga y Cádiz suman contratos opacos por valor de 13 millones y medio de euros.

Un “agujero” como en Madrid

Fuentes del sector también reconocen a este periódico que este “agujero” de Andalucía reproduce lo que ocurre en la Comunidad de Madrid, donde recientemente se han producido polémicos nombramientos en hospitales públicos con la sombra del GEE.

Paralelamente, en los últimos días se conocía que Ayuso había adjudica a dedo otros 175.000 euros para mantener equipos en el Hospital Universitario Enfermera Isabel Zendal al Grupo GEE.