Se llama Domingo Delgado, fue policía local, milita en el PP, desde hace tres meses es alcalde de la localidad sevillana de Burguillos y desde hace unas horas es famoso por haber tomado una medida particularmente drástica: salir a patrullar él mismo por las calles de su pueblo, de unos 7.000 habitantes, porque el 80 por ciento de la pequeña plantilla de policías locales se cogió una baja médica poco antes de la toma de posesión del nuevo equipo de gobierno.

El Ayuntamiento tiene cuatro policías locales y un vigilante en su plantilla de seguridad, pero desde hace dos meses solo está en activo uno de ellos, a quien ahora se ha sumado briosamente el alcalde. Que se sepa, la inspección laboral no parece haber considerado la posibilidad de que la sospechosa coincidencia de policías enfermos pueda esconder un fraude para presionar al alcalde.

Uno de los vecinos del pueblo ha relatado en redes sociales que detectó un intento de robo y avisó al propio alcalde, que se personó en la vivienda, cuyo dueño estaba de vacaciones, y al parecer ahuyentó a los ladrones. "Le pedí que se acercara y no dudó en saltarse la cancela y entrar para intentar detener a los ladrones y evitar el robo, algo que no sé cómo agradecer", contaba el denunciante.

El nuevo alcalde ha culpado a su antecesor de haber declarado la localidad “libre de desahucios”, facilitando el suministro de agua a “medio centenar de ocupas, que además han enganchado ilegalmente la luz de la calle”. Todo ello habría multiplicado los problemas de seguridad en la población.

El contencioso de los policías locales con el gobierno local provendría también de la etapa anterior, cuyo gobierno habría dejado de pagarles determinados emolumentos que el nuevo equipo tampoco acaba de asumir.

Las bajas médicas colectivas, generalmente aduciendo cuadros de ansiedad en los que no resulta fácil para los medicos detectar el presunto fraude, se han utilizado en más de una ocasión por trabajadores -sobre todo públicos- como herramienta de presión para satisfacer reivindicaciones laborales.